Rashford y Mata lideran al United en el triunfo sobre el Norwich
El español dio dos asistencias, la primera para que el 10 abriera el marcador. El equipo de Solkskjaer coge aire a costa de un Norwich que exhibió las debilidades del colista.
Alberto Muñoz
As
El Manchester United puso final a una racha de tres partidos sin ganar con un triunfo sobre el Norwich que pudo sacar adelante gracias a la asociación entre la clarividencia de Mata y el poder de Rashford. También la manopla de De Gea sobre Cantwell justo antes del descanso tuvo algo que ver. Porque a Old Trafford le pudieron temblar las rodillas si antes del pitido del intervalo el meta no le adivina la intención al joven centrocampista del Norwich. No quedaba margen para transigir otro traspié en la afición de los Diablos y la mano del meta dio el sosiego necesario.
Se había adelantado el United con la conexión entre Mata y Rashford. El español, en este momento de titubeos de su equipo, aportó el temple para encontrar al 10, que remató con mucho poderío. El Norwich había colocado el andamiaje para levantar el muro alrededor de Krul, pero la zurda de Mata encontró el resquicio. Buendía trataba de responder entre líneas, pero ni Pukki se acercaba para secundarle. Así, la primera parte había sido muy confortable para el United en defensa, pero le costaba más inquietar. Rashford se ha venido salvando de la quema de las críticas en este periodo oscuro de su equipo y ante el Norwich volvió a ser el faro de los suyos.
Apenas reanudado el juego intuyó muy bien el desmarque al espacio de Brandon Williams. El joven lateral irrumpió con fuerza y Krul cometió un error impropio. Se pasó de frenada en el costado del área y Williams cobró un penalti que transformó Rashford. Old Trafford ya respiraba y Solskjaer, más. El Norwich empieza a dar algún síntoma de entrega. El colista exhibió todas sus debilidades y en el 54’ el equipo amarillo no atendió como debía a un córner sacado rápidamente por el United para que Mata encontrara a Martial. El español alimentó al francés, que necesitaba reencontrarse con el gol, con su segunda asistencia de la tarde. El resto del choque sirvió para que Solskjaer comprobara cómo una buena camada de jóvenes promesas de los Diablos amanece. Prueba de ello fue el cuarto gol de Mason Greenwood. El ariete de 18 años agarró un zurdazo desde fuera del área que redondeó el choque.
Tras más de tres meses sin perder en Premier contra un equipo que no fuese el Liverpool o el Manchester City, dos equipos de otra dimensión diferente a la suya, el Leicester hincó la rodilla contra un Southampton superior al que el VAR le permitió sumar los tres puntos en los minutos finales. Los foxes, que se habían adelantado en el marcador, se vieron remontados en la segunda mitad, y, aunque en los instantes finales consiguieron la igualdad, la tecnología les arrebató la posibilidad de sumar un punto que quizás no habría sido del todo merecido.
Este resultado permite a los citizens, que jugarán mañana, recuperar de una vez por todas una segunda posición de la que parecían no querer desprenderse los de Brendan Rodgers, entrenador que está sabiendo sacar verdadero petróleo de una plantilla que, por otra parte, tiene mucho potencial.
As
El Manchester United puso final a una racha de tres partidos sin ganar con un triunfo sobre el Norwich que pudo sacar adelante gracias a la asociación entre la clarividencia de Mata y el poder de Rashford. También la manopla de De Gea sobre Cantwell justo antes del descanso tuvo algo que ver. Porque a Old Trafford le pudieron temblar las rodillas si antes del pitido del intervalo el meta no le adivina la intención al joven centrocampista del Norwich. No quedaba margen para transigir otro traspié en la afición de los Diablos y la mano del meta dio el sosiego necesario.
Se había adelantado el United con la conexión entre Mata y Rashford. El español, en este momento de titubeos de su equipo, aportó el temple para encontrar al 10, que remató con mucho poderío. El Norwich había colocado el andamiaje para levantar el muro alrededor de Krul, pero la zurda de Mata encontró el resquicio. Buendía trataba de responder entre líneas, pero ni Pukki se acercaba para secundarle. Así, la primera parte había sido muy confortable para el United en defensa, pero le costaba más inquietar. Rashford se ha venido salvando de la quema de las críticas en este periodo oscuro de su equipo y ante el Norwich volvió a ser el faro de los suyos.
Apenas reanudado el juego intuyó muy bien el desmarque al espacio de Brandon Williams. El joven lateral irrumpió con fuerza y Krul cometió un error impropio. Se pasó de frenada en el costado del área y Williams cobró un penalti que transformó Rashford. Old Trafford ya respiraba y Solskjaer, más. El Norwich empieza a dar algún síntoma de entrega. El colista exhibió todas sus debilidades y en el 54’ el equipo amarillo no atendió como debía a un córner sacado rápidamente por el United para que Mata encontrara a Martial. El español alimentó al francés, que necesitaba reencontrarse con el gol, con su segunda asistencia de la tarde. El resto del choque sirvió para que Solskjaer comprobara cómo una buena camada de jóvenes promesas de los Diablos amanece. Prueba de ello fue el cuarto gol de Mason Greenwood. El ariete de 18 años agarró un zurdazo desde fuera del área que redondeó el choque.
Tras más de tres meses sin perder en Premier contra un equipo que no fuese el Liverpool o el Manchester City, dos equipos de otra dimensión diferente a la suya, el Leicester hincó la rodilla contra un Southampton superior al que el VAR le permitió sumar los tres puntos en los minutos finales. Los foxes, que se habían adelantado en el marcador, se vieron remontados en la segunda mitad, y, aunque en los instantes finales consiguieron la igualdad, la tecnología les arrebató la posibilidad de sumar un punto que quizás no habría sido del todo merecido.
Este resultado permite a los citizens, que jugarán mañana, recuperar de una vez por todas una segunda posición de la que parecían no querer desprenderse los de Brendan Rodgers, entrenador que está sabiendo sacar verdadero petróleo de una plantilla que, por otra parte, tiene mucho potencial.
