Las peleas del verano en River
Gallardo planifica los 11 ante el Rojo con cuatro luchas muy reñidas. ¿Díaz o Rojas? ¿Quintero o Ferreira? ¿Casco de volante? ¿Y arriba?
Olé
Mientras los manotazos vuelan de acá para allá entre la Superliga, la AFA y los clubes que intentan sacar una mejor tajada ante la posible postergación del torneo, River levanta la guardia. Aguarda atento. Y no descuida lo más importante para Marcelo Gallardo: el armado del equipo para visitar este domingo a Independiente. Es precisamente en ese aspecto que el DT deberá resolver una pelea interna que, a juzgar por lo visto en el amistoso frente a Nacional, todavía no tiene ganadores. Básicamente, porque ninguno de los contendientes demostró un rendimiento sólido como para sacar una ventaja considerable de acá al fin de semana.
Son varios los frentes que están abiertos, y uno de ellos se encuentra en la zaga. Allí donde la baja obligada de Martínez Quarta (suspendido) resquebrajó la zona defensiva de una manera insospechada. Porque si bien Paulo Díaz se asomaba como reemplazante del Chino, su actuación en Punta abrió un interrogante: su falta de continuidad desencadenó esas fallas groseras en los goles de Nacional y es por eso que el Muñeco aún no bajó el martillo. Por el contrario, sumó a Robert Rojas (jugó el ST en Uruguay en lugar del chileno) a esa lucha central.
Ahora bien, los atípicos errores que se vieron en el fondo también derivaron de la inestabilidad de un mediocampo que no funcionó “aceitado”, tal como espera MG. Porque en la zona de volantes hubo desacoples en la presión y el retroceso y en ese sentido se sintieron las ausencias de Palacios (ya andando su camino en Alemania) y De La Cruz, otro que deberá purgar sanción el domingo. Juan Fernando Quintero, primera opción para regresar al 11 por el tucumano, anduvo a los tumbos, con más fastidio que claridad en su gran pase filtrado, y por eso el entrenador también utilizará estas prácticas para probar allí al pibe Ferreira.
El juvenil, de hecho, también pugna por un lugar en el sector izquierdo del medio, aunque MG piensa que al pibe todavía le falta el despliegue que fue adquiriendo DLC, y por eso es que en el ST ante Nacional lo utilizó a Milton Casco (y no a Angileri, como sí lo hizo en otros partidos) en ese sector. Pero claro, si esto último sucede desembocará en un cambio de esquema.
Y la última briga aparece en la delantera, donde Rafa Borré sigue como una fija y espera a su acompañante. Si bien Scocco terminó el 2019 de titular y arrancó este año de la misma manera, no significa que Matías Suárez esté resignado al banco. Ni ahí: hoy estarían 55/45.
De esa forma está planteado el escenario de la lucha interna en River, con cuatro competencias bien marcadas y un fallo que para las peleas del verano que Gallardo empezó a definir este martes por la mañana.
Olé
Mientras los manotazos vuelan de acá para allá entre la Superliga, la AFA y los clubes que intentan sacar una mejor tajada ante la posible postergación del torneo, River levanta la guardia. Aguarda atento. Y no descuida lo más importante para Marcelo Gallardo: el armado del equipo para visitar este domingo a Independiente. Es precisamente en ese aspecto que el DT deberá resolver una pelea interna que, a juzgar por lo visto en el amistoso frente a Nacional, todavía no tiene ganadores. Básicamente, porque ninguno de los contendientes demostró un rendimiento sólido como para sacar una ventaja considerable de acá al fin de semana.
Son varios los frentes que están abiertos, y uno de ellos se encuentra en la zaga. Allí donde la baja obligada de Martínez Quarta (suspendido) resquebrajó la zona defensiva de una manera insospechada. Porque si bien Paulo Díaz se asomaba como reemplazante del Chino, su actuación en Punta abrió un interrogante: su falta de continuidad desencadenó esas fallas groseras en los goles de Nacional y es por eso que el Muñeco aún no bajó el martillo. Por el contrario, sumó a Robert Rojas (jugó el ST en Uruguay en lugar del chileno) a esa lucha central.
Ahora bien, los atípicos errores que se vieron en el fondo también derivaron de la inestabilidad de un mediocampo que no funcionó “aceitado”, tal como espera MG. Porque en la zona de volantes hubo desacoples en la presión y el retroceso y en ese sentido se sintieron las ausencias de Palacios (ya andando su camino en Alemania) y De La Cruz, otro que deberá purgar sanción el domingo. Juan Fernando Quintero, primera opción para regresar al 11 por el tucumano, anduvo a los tumbos, con más fastidio que claridad en su gran pase filtrado, y por eso el entrenador también utilizará estas prácticas para probar allí al pibe Ferreira.
El juvenil, de hecho, también pugna por un lugar en el sector izquierdo del medio, aunque MG piensa que al pibe todavía le falta el despliegue que fue adquiriendo DLC, y por eso es que en el ST ante Nacional lo utilizó a Milton Casco (y no a Angileri, como sí lo hizo en otros partidos) en ese sector. Pero claro, si esto último sucede desembocará en un cambio de esquema.
Y la última briga aparece en la delantera, donde Rafa Borré sigue como una fija y espera a su acompañante. Si bien Scocco terminó el 2019 de titular y arrancó este año de la misma manera, no significa que Matías Suárez esté resignado al banco. Ni ahí: hoy estarían 55/45.
De esa forma está planteado el escenario de la lucha interna en River, con cuatro competencias bien marcadas y un fallo que para las peleas del verano que Gallardo empezó a definir este martes por la mañana.