Furia y escándalo en Buckingham: la reina Isabel II se enteró de la traición de su nieto Harry por TV y ahora no los deja renunciar

Carlos de Inglaterra y su hijo William estallaron de furia y lo sintieron como una “puñalada por la espalda”, mientras que la soberana se puso “triste” al principio pero luego contraatacó

Infobae
El palacio de Buckingham reaccionó fríamente al sorpresivo anuncio hecho por Meghan Markle y el príncipe Harry de apartarse de la corona real británica. Al parecer los duques de Sussex no consultaron a la soberana ni al príncipe Carlos de Inglaterra sobre sus planes. El primer sentimiento de Su Majestad fue de “decepción" por el imprudente comportamiento del nieto y su esposa, pero después les dejó en claro que ella tiene la última palabra.


La drástica decisión de retirarse de la vida pública como “royals” fue tomada sin el conocimiento tanto de la Reina como de su hijo, primero en la línea sucesoria al trono de rey de Inglaterra, y el príncipe William. De acuerdo a The Sun, "se enteraron en televisión” de las declaraciones explosivas de la pareja real, hechas en las redes sociales el miércoles por la noche. A los pocos minutos de que anunciaran que daban un paso al costado de casa real y en medio de la confusión, el Palacio de Buckingham les contestó: "Comprendemos su deseo de iniciar otro camino, pero son cuestiones complicadas que requieren tiempo” .

Una fuente dijo al Daily Mail: “El nivel de engaño fue asombroso y todos sienten que han sido apuñalados por la espalda. Incluso su propio personal advirtió en contra de que hicieran esto público hasta que realmente se discutiera adecuadamente con la familia".

La reina, de 93 años, quedó “profundamente molesta” por el inesperado anuncio y William "estallaba de ira”. Para ellos fue una "declaración de guerra contra la familia”. Y desde la casa real admitieron que las negociaciones con la pareja no serán fáciles.

Harry y Meghan no mencionaron renunciar a sus títulos reales o estatus e insisten en que se quedarán con Frogmore Cottage, la casa ubicada en Windsor que se refaccionó para ellos por casi USD 3 millones de dinero público. Una mudanza que fue motivada por su pésima convivencia con William y Kate Middleton en Kensington.

Los duques también mantendrán a sus oficiales de protección de la Policía Metropolitana financiados por el estado.

Tras seis semanas de vacaciones en una mansión en la Isla de Vancouver, la pareja anunció en el miércoles por medio de su cuenta de Instagram que planean retirarse de los deberes reales y dividir su tiempo entre Gran Bretaña y América del Norte, y se espera que Canadá sea su segundo hogar. Además, expresaron que quieren ser “financieramente independientes”.

Harry había solicitado una reunión con la reina en Sandringham tan pronto como regresó al Reino Unido con Meghan y su hijo Archie este fin de semana, luego de un receso navideño de seis semanas en Canadá. Isabel II se ofreció a encontrarse con el duque, pero aún así le hizo una solicitud explícita a su nieto de que primero hablara en detalle sobre sus planes futuros con su padre, el príncipe de Gales. Pero la pareja desafió la orden, siguió adelante con el anuncio con William y Carlos presuntamente recibiendo una copia de la declaración solo 10 minutos antes.

“Les dieron la boda que querían, la casa que querían, la oficina que querían, el dinero que querían, el personal que querían, los viajes que querían y contaban con el respaldo de su familia. ¿Qué más querían? Es profundamente injusto para la reina que no merece ser tratada de esta manera”, expresó un ex asesor de la corona en declaraciones al Daily Mail.

El padre de la ex actriz, Thomas Markle, también habló con la prensa al conocer la noticia y dijo estar “decepcionado" con su hija y el esposo de ella.

La gota que colmó el vaso para Harry y Meghan fue el lanzamiento oficial de un nuevo retrato real de la reina con su hijo, su nieto William y su bisnieto, el príncipe George. Al parecer esa imagen fue un mensaje directo a los duques para decirles que “no son considerados parte del futuro de la institución”.

Hoy, la familia buscó dar una muestra de unidad y le deseó a la duquesa de Cambridge “un muy feliz cumpleaños” en las redes sociales. Tanto el príncipe Carlos y Camilla Parker Bowles como la reina le enviaron cálidos mensajes y se mostraron fuertes pese a la noticia de la renuncia de los duques como miembros de la realeza que ellos integran.

Entradas populares