Detenciones masivas en frontera sur de México tras ingreso a la fuerza de nueva caravana migrante
El gobierno mexicano defendió su decisión de no permitir la entrada a aquellos que querían atravesar el territorio nacional para llegar a EEUU y aseguró que detendrá a quienes no comprueben su estancia legal
Infobae
El gobierno mexicano ha comenzado una detención masiva en su frontera sur para evitar que los integrantes de la nueva caravana migrante que ingresaron a la fuerza al país no pudieran continuar con su camino en busca de llegar a la frontera con Estados Unidos.
Hasta ahora, sin embargo, no se ha dado a conocer ninguna cifra aproximada de aquellos migrantes que consiguieron atravesar la frontera entre México y Guatemala ni de aquellos que ya han sido detenidos.
Las imágenes son evidentes: cientos de personas, provenientes sobre todo de Centroamérica, y en particular de Honduras, cruzaron el río Suchiate, una de las fronteras naturales entre tierras guatemaltecas y mexicanas.
Los migrantes, que sólo llevan consigo algunas pocas pertenencias, tomaron la decisión después de que el gobierno mexicano se negara a permitirles pasar por México para llegar a Estados Unidos. Unas horas antes enviaron una carta al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“Las disposiciones jurídicas no establecen una calidad migratoria de tránsito, razón por la cual no es posible obsequiar positivamente su petición”, estableció Carmen Yadira de los Santos, representante del Instituto Nacional de Migración (Inami).
El Instituto ofreció que ingresaran a México grupos de 40 migrantes, aunque esto no significa que se les dará algún tipo de documento, pues se analizará caso por caso. Sin embargo, cientos de migrantes, desesperados por la negativa, decidieron cruzar hacia el lado mexicano, sin que las autoridades mexicanas puedan contener por completo el flujo.
Sin embargo, aquellos que pudieron conseguir ingresar en el estado mexicano de Chiapas, aunque intentaron formar una caravana para seguir su camino hacia Estados Unidos, comenzaron a ser rodeados y detenidos por miembros de la Guardia Nacional, el cuerpo de seguridad creado el año pasado y que se encuentra ubicado estratégicamente desde junio a lo largo de la frontera sur mexicana.
En las imágenes de las televisoras se puede apreciar cómo los migrantes son tomados a la fuerza y sometidos para ser llevados en transportes oficiales del Inami. Varios de los integrantes de la nueva caravana migrante son menores de edad y mujeres.
De acuerdo con reportes de medios locales, algunos de los migrantes que lograron escapar de la detención se refugiaron en la maleza de la zona, pero no es un refugio ideal, ya que durante el día el clima es agobiante y durante la noche el frío es insoportable.
El gobierno mexicano, por su parte, defendió su actuación. “Se ha actuado en todo momento con responsabilidad”, expresaron en un comunicado. Además, acusaron a los “dirigentes” de la caravana migrante, sin detallar quiénes eran, de tomar la decisión de convocar a las personas a atravesar el río Suchiate “sin considerar los riesgos que esto implica”.
En su intento inicial, lanzaron proyectiles a los elementos de la Guardia Nacional para internarse de manera irregular, lo que representa una violación a la Ley de migración
Es por ello, aseveraron las autoridades, que los Agentes federales de migración trasladarán a las estaciones y estancias migratorias “a toda persona extranjera que no acredite una condición de estancia irregular". En estos lugares se resolverá su situación y, en determinado momento, su retorno a sus respectivos países de origen.
La situación en la frontera sur mexicana se intensificó en 2019, cuando miles de migrantes, sobre todo provenientes de El Salvador, Honduras y Guatemala, han intentado cruzar México para llegar a Estados Unidos y solicitar asilo o refugio.
Por esta razón, el gobierno estadounidense de Donald Trump presionó a México para que limitara de manera radical el paso de migrantes por éste país, y evitar así que llegaran a su frontera norte: amenazó con aplicar aranceles a todos los productos mexicanos si la administración de López Obrador no tomaba cartas en el asunto.
México respondió y, a cambio de la desactivación de la amenaza comercial, se comprometió a desplegar a la Guardia Nacional en ambas fronteras, consiguiendo debilitar de manera importante la llegada de migrantes centroamericanos.
En diversos discursos y declaraciones oficiales, Trump ha felicitado a López Obrador por su labor con respecto a la migración proveniente de Centroamérica. Sin embargo, los críticos de ambos han señalado que México apenas se ha comportado como “el muro” que el magnate neoyorkino había prometido en campaña.
Infobae
El gobierno mexicano ha comenzado una detención masiva en su frontera sur para evitar que los integrantes de la nueva caravana migrante que ingresaron a la fuerza al país no pudieran continuar con su camino en busca de llegar a la frontera con Estados Unidos.
Hasta ahora, sin embargo, no se ha dado a conocer ninguna cifra aproximada de aquellos migrantes que consiguieron atravesar la frontera entre México y Guatemala ni de aquellos que ya han sido detenidos.
Las imágenes son evidentes: cientos de personas, provenientes sobre todo de Centroamérica, y en particular de Honduras, cruzaron el río Suchiate, una de las fronteras naturales entre tierras guatemaltecas y mexicanas.
Los migrantes, que sólo llevan consigo algunas pocas pertenencias, tomaron la decisión después de que el gobierno mexicano se negara a permitirles pasar por México para llegar a Estados Unidos. Unas horas antes enviaron una carta al gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
“Las disposiciones jurídicas no establecen una calidad migratoria de tránsito, razón por la cual no es posible obsequiar positivamente su petición”, estableció Carmen Yadira de los Santos, representante del Instituto Nacional de Migración (Inami).
El Instituto ofreció que ingresaran a México grupos de 40 migrantes, aunque esto no significa que se les dará algún tipo de documento, pues se analizará caso por caso. Sin embargo, cientos de migrantes, desesperados por la negativa, decidieron cruzar hacia el lado mexicano, sin que las autoridades mexicanas puedan contener por completo el flujo.
Sin embargo, aquellos que pudieron conseguir ingresar en el estado mexicano de Chiapas, aunque intentaron formar una caravana para seguir su camino hacia Estados Unidos, comenzaron a ser rodeados y detenidos por miembros de la Guardia Nacional, el cuerpo de seguridad creado el año pasado y que se encuentra ubicado estratégicamente desde junio a lo largo de la frontera sur mexicana.
En las imágenes de las televisoras se puede apreciar cómo los migrantes son tomados a la fuerza y sometidos para ser llevados en transportes oficiales del Inami. Varios de los integrantes de la nueva caravana migrante son menores de edad y mujeres.
De acuerdo con reportes de medios locales, algunos de los migrantes que lograron escapar de la detención se refugiaron en la maleza de la zona, pero no es un refugio ideal, ya que durante el día el clima es agobiante y durante la noche el frío es insoportable.
El gobierno mexicano, por su parte, defendió su actuación. “Se ha actuado en todo momento con responsabilidad”, expresaron en un comunicado. Además, acusaron a los “dirigentes” de la caravana migrante, sin detallar quiénes eran, de tomar la decisión de convocar a las personas a atravesar el río Suchiate “sin considerar los riesgos que esto implica”.
En su intento inicial, lanzaron proyectiles a los elementos de la Guardia Nacional para internarse de manera irregular, lo que representa una violación a la Ley de migración
Es por ello, aseveraron las autoridades, que los Agentes federales de migración trasladarán a las estaciones y estancias migratorias “a toda persona extranjera que no acredite una condición de estancia irregular". En estos lugares se resolverá su situación y, en determinado momento, su retorno a sus respectivos países de origen.
La situación en la frontera sur mexicana se intensificó en 2019, cuando miles de migrantes, sobre todo provenientes de El Salvador, Honduras y Guatemala, han intentado cruzar México para llegar a Estados Unidos y solicitar asilo o refugio.
Por esta razón, el gobierno estadounidense de Donald Trump presionó a México para que limitara de manera radical el paso de migrantes por éste país, y evitar así que llegaran a su frontera norte: amenazó con aplicar aranceles a todos los productos mexicanos si la administración de López Obrador no tomaba cartas en el asunto.
México respondió y, a cambio de la desactivación de la amenaza comercial, se comprometió a desplegar a la Guardia Nacional en ambas fronteras, consiguiendo debilitar de manera importante la llegada de migrantes centroamericanos.
En diversos discursos y declaraciones oficiales, Trump ha felicitado a López Obrador por su labor con respecto a la migración proveniente de Centroamérica. Sin embargo, los críticos de ambos han señalado que México apenas se ha comportado como “el muro” que el magnate neoyorkino había prometido en campaña.