Vélez celebró, se emocionó y le ganó a Colón
Vélez se dio un festín en el Amalfitani ante un Colón que no tuvo chances en ningún momento. Gago fue la figura en el homenaje a la Intercontinental y Cubero.
IAM
En un día especial y lleno de festejos para el club, Vélez Sarsfield venció hoy 3-1 como local a Colón de Santa Fe en el estadio José Amalfitani, por la decimoquinta fecha de la Superliga Argentina de Fútbol.
Thiago Almada, Leandro Fernández y Nicolás Domínguez marcaron para el dueño de casa. Christian Bernardi descontó parcialmente para el Sabalero.
Fabián Cubero ingresó para jugar los últimos minutos y se despidió del fútbol profesional dentro del campo de juego.
El Fortín rompió el maleficio y convirtió tras 391 minutos de sequía, y acabó con una seguidilla de cuatro encuentros sin victorias.
Como influido por el canal festivo reinante en el Amalfitani por los festejos de los 25 años de la obtención del título mundial, Vélez arranco con una media hora inicial de alto vuelo futbolístico. Con precisión y velocidad, buen manejo y goles, después de cuatro partidos de abstinencia ante los arcos contrarios.
Pese a la superioridad numérica de Colón en el medio campo, en esa zona prevalecía el local guiado por Fernando Gago y Gastón Giménez.
Una fantástica volea de derecha del pibe Almada, a los 21 minutos, puso el 1-0.
La defensa sabalera daba ventajas, y su mejor factor de desequilibrio ofensivo, el Pulga Rodríguez, estaba muy solo.
El dueño de casa dominaba y, a los 25, una lúcida combinación colectiva tuvo el broche final con la definición de Fernández dentro del área.
A los 38 descontó Colón cuando Christian Bernardi superó a Lucas Hoyos en el mano a mano. Achicó el resultado, aunque no la diferencia en el juego.
Esa distancia en la generación volvió a reflejarse en el tanteador a los 7 minutos del segundo tiempo. Gran jugada y habilitación de Giménez para darle el pase a Domínguez y aumentar su caudal goleador en su despedida del Amalfitani, ya que a fin de año se sumará a Bologna de Italia.
Leonardo Burián, con una tapada espectacular ante un cabezazo de Fernández, a los 21 evitó el cuarto festejo local.
Y la tarde-noche cerró con más fiesta fortinera. Se despidió de su gente Cubero, el histórico capitán, el futbolista que más veces vistió la camiseta de Vélez. Demoró bastante el cambio Heinze. Hasta que a los 42 mando a Poroto a la cancha, para sus últimos instantes con ese camiseta que lleva grabada en la piel.
Cubero ingresó y se levantó todo el estadio para ovacionarlo, pero la cancha se vino abajo a los 45, porque Wilson Morelo definió, Hoyos tapó a medias y se repuso para salvar en la línea, y quien cumplió su partido número 633 con la V en el pecho salió jugando con un enganche y toda la tranquilidad del mundo ante la presión de los rivales.
Fue lo último para destacar de un partido lleno de emociones, que comenzó homenajeando a los campeones del mundo y terminó con un inolvidable “Cubeeerooo, Cubeeerooo”.
IAM
En un día especial y lleno de festejos para el club, Vélez Sarsfield venció hoy 3-1 como local a Colón de Santa Fe en el estadio José Amalfitani, por la decimoquinta fecha de la Superliga Argentina de Fútbol.
Thiago Almada, Leandro Fernández y Nicolás Domínguez marcaron para el dueño de casa. Christian Bernardi descontó parcialmente para el Sabalero.
Fabián Cubero ingresó para jugar los últimos minutos y se despidió del fútbol profesional dentro del campo de juego.
El Fortín rompió el maleficio y convirtió tras 391 minutos de sequía, y acabó con una seguidilla de cuatro encuentros sin victorias.
Como influido por el canal festivo reinante en el Amalfitani por los festejos de los 25 años de la obtención del título mundial, Vélez arranco con una media hora inicial de alto vuelo futbolístico. Con precisión y velocidad, buen manejo y goles, después de cuatro partidos de abstinencia ante los arcos contrarios.
Pese a la superioridad numérica de Colón en el medio campo, en esa zona prevalecía el local guiado por Fernando Gago y Gastón Giménez.
Una fantástica volea de derecha del pibe Almada, a los 21 minutos, puso el 1-0.
La defensa sabalera daba ventajas, y su mejor factor de desequilibrio ofensivo, el Pulga Rodríguez, estaba muy solo.
El dueño de casa dominaba y, a los 25, una lúcida combinación colectiva tuvo el broche final con la definición de Fernández dentro del área.
A los 38 descontó Colón cuando Christian Bernardi superó a Lucas Hoyos en el mano a mano. Achicó el resultado, aunque no la diferencia en el juego.
Esa distancia en la generación volvió a reflejarse en el tanteador a los 7 minutos del segundo tiempo. Gran jugada y habilitación de Giménez para darle el pase a Domínguez y aumentar su caudal goleador en su despedida del Amalfitani, ya que a fin de año se sumará a Bologna de Italia.
Leonardo Burián, con una tapada espectacular ante un cabezazo de Fernández, a los 21 evitó el cuarto festejo local.
Y la tarde-noche cerró con más fiesta fortinera. Se despidió de su gente Cubero, el histórico capitán, el futbolista que más veces vistió la camiseta de Vélez. Demoró bastante el cambio Heinze. Hasta que a los 42 mando a Poroto a la cancha, para sus últimos instantes con ese camiseta que lleva grabada en la piel.
Cubero ingresó y se levantó todo el estadio para ovacionarlo, pero la cancha se vino abajo a los 45, porque Wilson Morelo definió, Hoyos tapó a medias y se repuso para salvar en la línea, y quien cumplió su partido número 633 con la V en el pecho salió jugando con un enganche y toda la tranquilidad del mundo ante la presión de los rivales.
Fue lo último para destacar de un partido lleno de emociones, que comenzó homenajeando a los campeones del mundo y terminó con un inolvidable “Cubeeerooo, Cubeeerooo”.