Soldado: "En Madrid estaban Figo, Zidane, Raúl... pero seguí a quien no debía"
ESpaña, AS
El delantero del Granada se sincera de forma brutal en una entrevista concedida a The Guardian, en la que repasa su paso por el Madrid y el Tottenham.
Roberto Soldado (Valencia, 27/5/1985) muestra su lado más sincero en una entrevista concedida al diario británico The Guardian, en la que repasa su carrera, especialmente su etapa en el Real Madrid. El actual delantero del Granada, muy crítico consigo mismo, admite que su actitud no fue la mejor en la etapa de los Galácticos y que posiblemente la fama se le subió a la cabeza demasiado.
“Peso siete kilos menos que en el Madrid. Veo fotos mías y me siento avergonzado. Yo era un niñato. Había jugadores como Figo, Zidane, Raúl, que eran súper profesionales. Pero me fijaba en otros... Seguí lo que no debería haber seguido", admite el ariete con la perspectiva que da la madurez personal.
"Cada uno debe asumir la responsabilidad de sus actos, saber qué es apropiado y qué no, dónde están los límites. Salía pensando que era más grande que Beckham. No estaba mentalmente preparado; mi cabeza no estaba lista. Es difícil. Me gustaría haber tenido la oportunidad de jugar para ese Madrid al 100%. Miro hacia atrás y pienso: "Qué niñato era". Alguien debería haberme agarrado, darme una bofetada y decirme: "¿Qué estás haciendo?", continúa recordando su etapa en el club blanco, hasta que la situación se hizo insostenible y algo cambió.
"No me estaba cuidando, comía mucho. Miro las fotos y pienso: ¿cómo iba a jugar con los galácticos en esa forma? Si me hubiera cuidado mejor, hubiera tenido la madurez, tal vez habría tenido más oportunidades. Esa idea me persigue. [...] A los 17 o 18 años, a la 1 de la madrugada alguien decía "¿por qué no vamos a tomar una copa?"... y yo era el primero en prepararme para salir. El Madrid contactó a mis padres. Mi padre se tomó un permiso de dos años, vino a Madrid y estableció los límites. Luego me mudé con un amigo que ahora está aquí en Granada. Era más concienzudo. Y fue entonces cuando conocí a mi esposa, que resolvió todo", cuenta. "Sabía que había ido demasiado lejos, sobrepasado el límite. Conocí a mucha gente en Madrid por salir. Ellos podían llevar esa vida porque no eran futbolistas profesionales, no tenían que jugar para el Madrid. Al final, lo entiendes: "Tú, sal si quieres, yo tengo algo más que hacer". Afortunadamente, mis padres y mi esposa estaban allí para ponerme en el camino correcto. Fue un buen trabajo", sentencia.
Otra etapa complicada en su carrera fue la del Tottenham, al que llegó en 2013 tras tres buenas temporadas en el Valencia. "No me arrepiento de ir al Tottenham en absoluto, y estaba convencido de que todo iría bien. Pensé que, con mi estilo, iba a encajar bien, pero cuando fui... Bueno, fue todo lo contrario", admite. "Si hay una cosa con la que no estaré totalmente en paz el día que me retire, es cómo jugué en Inglaterra".
El delantero del Granada se sincera de forma brutal en una entrevista concedida a The Guardian, en la que repasa su paso por el Madrid y el Tottenham.
Roberto Soldado (Valencia, 27/5/1985) muestra su lado más sincero en una entrevista concedida al diario británico The Guardian, en la que repasa su carrera, especialmente su etapa en el Real Madrid. El actual delantero del Granada, muy crítico consigo mismo, admite que su actitud no fue la mejor en la etapa de los Galácticos y que posiblemente la fama se le subió a la cabeza demasiado.
“Peso siete kilos menos que en el Madrid. Veo fotos mías y me siento avergonzado. Yo era un niñato. Había jugadores como Figo, Zidane, Raúl, que eran súper profesionales. Pero me fijaba en otros... Seguí lo que no debería haber seguido", admite el ariete con la perspectiva que da la madurez personal.
"Cada uno debe asumir la responsabilidad de sus actos, saber qué es apropiado y qué no, dónde están los límites. Salía pensando que era más grande que Beckham. No estaba mentalmente preparado; mi cabeza no estaba lista. Es difícil. Me gustaría haber tenido la oportunidad de jugar para ese Madrid al 100%. Miro hacia atrás y pienso: "Qué niñato era". Alguien debería haberme agarrado, darme una bofetada y decirme: "¿Qué estás haciendo?", continúa recordando su etapa en el club blanco, hasta que la situación se hizo insostenible y algo cambió.
"No me estaba cuidando, comía mucho. Miro las fotos y pienso: ¿cómo iba a jugar con los galácticos en esa forma? Si me hubiera cuidado mejor, hubiera tenido la madurez, tal vez habría tenido más oportunidades. Esa idea me persigue. [...] A los 17 o 18 años, a la 1 de la madrugada alguien decía "¿por qué no vamos a tomar una copa?"... y yo era el primero en prepararme para salir. El Madrid contactó a mis padres. Mi padre se tomó un permiso de dos años, vino a Madrid y estableció los límites. Luego me mudé con un amigo que ahora está aquí en Granada. Era más concienzudo. Y fue entonces cuando conocí a mi esposa, que resolvió todo", cuenta. "Sabía que había ido demasiado lejos, sobrepasado el límite. Conocí a mucha gente en Madrid por salir. Ellos podían llevar esa vida porque no eran futbolistas profesionales, no tenían que jugar para el Madrid. Al final, lo entiendes: "Tú, sal si quieres, yo tengo algo más que hacer". Afortunadamente, mis padres y mi esposa estaban allí para ponerme en el camino correcto. Fue un buen trabajo", sentencia.
Otra etapa complicada en su carrera fue la del Tottenham, al que llegó en 2013 tras tres buenas temporadas en el Valencia. "No me arrepiento de ir al Tottenham en absoluto, y estaba convencido de que todo iría bien. Pensé que, con mi estilo, iba a encajar bien, pero cuando fui... Bueno, fue todo lo contrario", admite. "Si hay una cosa con la que no estaré totalmente en paz el día que me retire, es cómo jugué en Inglaterra".
Aunque de sus años en Inglaterra siempre guardará el recuerdo de haber compartido vestuario con uno de los mejores delanteros de los últimos años. "A mi hijo le gusta mucho el fútbol y si estamos viendo la Premier o a Inglaterra y Harry Kane marca, le digo: "Yo jugué con ese chico". "¿Sí?", me responde. Estoy muy feliz por su exito, especialmente por la persona que es", asegura antes de bromear: "Me habría gustado que hubiera esperado un poco (para explotar). Tuve que lidiar con el 'boom' de Harry Kane. Me apartó un poco, pero lo entendí perfectamente, lo podías ver desde el principio. Vi su nivel en el entrenamiento y era increíble. No creo que haya un límite para lo que puede hacer. Todavía no hemos visto lo mejor de Harry Kane. ¿Que si es lo suficientemente bueno para terminar en el Madrid? Me gustaría verlo allí", sentencia.