Se tensionan las relaciones de Bolivia con Argentina y México por Evo
La Paz, Página Siete
Las relaciones diplomáticas de Bolivia con Argentina y México atraviesan uno de los peores momentos, se enfriaron y están tensionadas. El Gobierno boliviano reconoció que la relación con Argentina es "delicada" por la presencia de Evo Morales en ese país y acusó a México de injerencia interna.
El internacionalista Andrés Guzmán afirma que esta tensión tiene su origen en la posición ideológica de los gobiernos que ayudan al exmandatario que ahora se encuentra en Argentina.
La Cancillería boliviana advirtió ayer que estudia la posibilidad de dejar la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) debido a la decisión del Gobierno mexicano de desconocer las atribuciones de la presidencia pro tempore de Bolivia y convocar a una reunión para el miércoles 8 de enero, para la ceremonia de traspaso de titularidad, sin la anuencia del país.
“No vamos a asistir porque era Bolivia quien debía convocar a esa reunión y en territorio boliviano, era lo que correspondía al detentar nosotros la presidencia pro tempore. Veremos si continuamos o nos apartamos”, expresó ayer en conferencia de prensa la canciller Karen Longaric.
La jefa de la diplomacia boliviana también denunció una conducta “inamistosa” de México, que se niega a reconocer a la presidenta Jeanine Añez, y facilitó el asilo a Evo Morales, quien cuando se encontraba en ese país coordinó el cerco a las ciudades para evitar el paso de comida y carburantes.
Después de la denuncia y advertencia de la Cancillería boliviana, México expresó su preocupación por la presencia “excesiva” de personal de inteligencia y de seguridad que vigilan la residencia del embajador y de la legación diplomática en La Paz.
“México confía en que se respetarán la inviolabilidad de los inmuebles diplomáticos y se llevarán a cabo las medidas correspondientes para garantizar el resguardo y la protección de la integridad física del edificio, tanto interior como exterior, así como de los agentes diplomáticos acreditados, en cumplimiento a los compromisos internacionales de los que forma parte”, señala en un comunicado y apela al artículo 22 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, que señala que los locales de una misión son inviolables.
El internacionalista Guzmán Escobari señala que "México debe comprender que fuera de los locales diplomáticos, el país receptor puede despelegar a cuantos policías o militares desee, sin ninguna restricción. La Convención de Viena de 1961 sólo protege a los locales diplomáticos, no al perimetro circundante ni a los vehículos".
En las instalaciones de la embajada de México se encuentra los exministros Juan Ramón Quintana y Wilma Alanoca, denunciados por promover actos terroristas en Bolivia y con orden de arresto, y otros funcionarios de Morales. Ayer se conoció del traslado de algunos muebles y enseres en esa legación diplomática, según registró la agencia APG.
Las tensiones con el gobierno de Manuel López Obrador comenzó después de que dio asilo político a Evo Morales después de que éste renunció a la presidencia del país cercado por movilizaciones ciudadanas que protestaron por el fraude electoral y después de que el expresidente coordinó desde país el cerco a las ciudades de Bolivia para que no pasen alimentos ni carburantes como parte de una venganza porque en las urbes solicitaron su renuncia.
Con Argentina, el panorama de las relaciones tampoco son las mejores. El gobierno de Alberto Fernández aún no acreditó a los diplomáticos enviados por Bolivia como el embajador Julio Alvarado.
Longaric estimó esta demora a la organización de la administración del nuevo gobierno argentino. "Considero que seguramente luego de los feriados de Navidad se tomará conocimiento de nuestra acreditación y se pronunciarán en consecuencias. El canciller (Felipe) Solá adelantó que las relaciones con Bolivia se sujetarán a lo establecido por la convención de Viena" dijo la canciller ayer en rueda de prensa.
Insitió en que la Cancillería argentina no ha rechazado la acreditación de los diplomáticos bolivianos, "simplemente que no ha conocido de dichas solicitudes de forma integral".
Las relaciones diplomáticas de Bolivia con Argentina y México atraviesan uno de los peores momentos, se enfriaron y están tensionadas. El Gobierno boliviano reconoció que la relación con Argentina es "delicada" por la presencia de Evo Morales en ese país y acusó a México de injerencia interna.
El internacionalista Andrés Guzmán afirma que esta tensión tiene su origen en la posición ideológica de los gobiernos que ayudan al exmandatario que ahora se encuentra en Argentina.
La Cancillería boliviana advirtió ayer que estudia la posibilidad de dejar la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) debido a la decisión del Gobierno mexicano de desconocer las atribuciones de la presidencia pro tempore de Bolivia y convocar a una reunión para el miércoles 8 de enero, para la ceremonia de traspaso de titularidad, sin la anuencia del país.
“No vamos a asistir porque era Bolivia quien debía convocar a esa reunión y en territorio boliviano, era lo que correspondía al detentar nosotros la presidencia pro tempore. Veremos si continuamos o nos apartamos”, expresó ayer en conferencia de prensa la canciller Karen Longaric.
La jefa de la diplomacia boliviana también denunció una conducta “inamistosa” de México, que se niega a reconocer a la presidenta Jeanine Añez, y facilitó el asilo a Evo Morales, quien cuando se encontraba en ese país coordinó el cerco a las ciudades para evitar el paso de comida y carburantes.
Después de la denuncia y advertencia de la Cancillería boliviana, México expresó su preocupación por la presencia “excesiva” de personal de inteligencia y de seguridad que vigilan la residencia del embajador y de la legación diplomática en La Paz.
“México confía en que se respetarán la inviolabilidad de los inmuebles diplomáticos y se llevarán a cabo las medidas correspondientes para garantizar el resguardo y la protección de la integridad física del edificio, tanto interior como exterior, así como de los agentes diplomáticos acreditados, en cumplimiento a los compromisos internacionales de los que forma parte”, señala en un comunicado y apela al artículo 22 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, que señala que los locales de una misión son inviolables.
El internacionalista Guzmán Escobari señala que "México debe comprender que fuera de los locales diplomáticos, el país receptor puede despelegar a cuantos policías o militares desee, sin ninguna restricción. La Convención de Viena de 1961 sólo protege a los locales diplomáticos, no al perimetro circundante ni a los vehículos".
En las instalaciones de la embajada de México se encuentra los exministros Juan Ramón Quintana y Wilma Alanoca, denunciados por promover actos terroristas en Bolivia y con orden de arresto, y otros funcionarios de Morales. Ayer se conoció del traslado de algunos muebles y enseres en esa legación diplomática, según registró la agencia APG.
Las tensiones con el gobierno de Manuel López Obrador comenzó después de que dio asilo político a Evo Morales después de que éste renunció a la presidencia del país cercado por movilizaciones ciudadanas que protestaron por el fraude electoral y después de que el expresidente coordinó desde país el cerco a las ciudades de Bolivia para que no pasen alimentos ni carburantes como parte de una venganza porque en las urbes solicitaron su renuncia.
Con Argentina, el panorama de las relaciones tampoco son las mejores. El gobierno de Alberto Fernández aún no acreditó a los diplomáticos enviados por Bolivia como el embajador Julio Alvarado.
Longaric estimó esta demora a la organización de la administración del nuevo gobierno argentino. "Considero que seguramente luego de los feriados de Navidad se tomará conocimiento de nuestra acreditación y se pronunciarán en consecuencias. El canciller (Felipe) Solá adelantó que las relaciones con Bolivia se sujetarán a lo establecido por la convención de Viena" dijo la canciller ayer en rueda de prensa.
Insitió en que la Cancillería argentina no ha rechazado la acreditación de los diplomáticos bolivianos, "simplemente que no ha conocido de dichas solicitudes de forma integral".