Murillo anuncia que los narcoterroristas 'están escapando del país’
El ministro de Gobierno detalló que el narcoterrorismo afecta al país y lo comparó con “un animal de dos cabezas” que es financiado "por el narcotráfico, para hacer terrorismo”.
La Razón Digital / Rubén Ariñez / La Paz
Durante la presentación del Grupo Antiterrorista (GAT) que opera desde este martes en La Paz, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, anunció que los narcoterroristas que operaban en Bolivia, tal como denunció en los días precedentes, “están saliendo, están escapando del país”.
La autoridad del sector denunció que grupos irregulares operan en Bolivia desde hace mucho tiempo y son, entre otros actores, los que promovieron las jornadas de violencia en varios puntos del país tras la renuncia de Evo Morales y luego de la asunción a la Presidencia de Jeanine Áñez.
Los sectores afines al exmandatario bloquearon varios puntos del país, pero la violencia se centró en Sacaba (Cochabamba) y Senkata (El Alto). En este último punto, según el Gobierno, las movilizaciones pretendían hacer estallar la planta de carburantes que se encuentra en la zona poniendo en riesgo a la población.
“Es importante que todos en conjunto trabajemos para liberar a Bolivia de esos narcoterroristas que se han instalado en el país durante estos 14 años. Están saliendo por todas las fronteras, están escapando del país, me parece muy bien”, dijo Murillo en el acto realizado en la Academia Nacional de Policía (Anapol), donde formaron los 70 efectivos del GAT armados con implemento moderno.
Los efectivos del GAT.
Murillo denunció el lunes que existe un plan de desestabilización que es operado por el gobierno del venezolano Nicolás Maduro y que afecta al menos a cinco países, entre ellos Bolivia.
Señaló a exguerrilleros del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) del Perú, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y de los venezolanos Tupamaro.
Este martes detalló que el flagelo “es un animal de dos cabezas” debido a que los sujetos están “financiados por el narcotráfico para hacer terrorismo”.
Gobierno denuncia que hay un plan de desestabilización que se maneja desde Venezuela
“No queremos narcoterroristas aquí, no queremos gente que le haga daño a nuestra patria, gente que mienta a nuestros hermanos más humildes y más pobres, que los lleve con engaños a la muerte como lo han hecho en las manifestaciones pasadas, que los saquen al frente y por detrás les den (disparos) en la nuca”, afirmó el titular de Gobierno.
Dijo que “los cobardes" actúan así y que "los valientes actúan como la Policía Boliviana", a cuyos miembros agradeció a nombre de la presidenta Jeanine Áñez "y de cada uno de los bolivianos”.
Tras las denuncias de fraude en las elecciones del 20 de octubre, las movilizaciones de cívicos y políticos se marcaron con la quema de seis tribunales departamentales, el amotinamiento de la Policía, y el pedido de renuncia que planteó el entonces comandante de las Fuerzas Armadas Willams Kaliman, lo que derivó en la renuncia de Morales.
Murillo destacó lo “orgullosa que se ha sentido nuestra patria los últimos días, cuando con la dura labor que ha hecho la Policía Boliviana en operaciones conjuntas han salvado a la patria de un secuestro de 14 años que estaba sometida a un partido de gobierno”.
Aseguró que “la Policía Boliviana, el Ejército y la ciudadanía, todos unidos, han liberado al país del dictador”.
Para Morales, su salida del poder se debe a un golpe cívico-político-policial al que luego sumaron a los militares e incluso la Organización de Estados Americanos (OEA).
Durante la presentación del Grupo Antiterrorista (GAT) que opera desde este martes en La Paz, el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, anunció que los narcoterroristas que operaban en Bolivia, tal como denunció en los días precedentes, “están saliendo, están escapando del país”.
La autoridad del sector denunció que grupos irregulares operan en Bolivia desde hace mucho tiempo y son, entre otros actores, los que promovieron las jornadas de violencia en varios puntos del país tras la renuncia de Evo Morales y luego de la asunción a la Presidencia de Jeanine Áñez.
Los sectores afines al exmandatario bloquearon varios puntos del país, pero la violencia se centró en Sacaba (Cochabamba) y Senkata (El Alto). En este último punto, según el Gobierno, las movilizaciones pretendían hacer estallar la planta de carburantes que se encuentra en la zona poniendo en riesgo a la población.
“Es importante que todos en conjunto trabajemos para liberar a Bolivia de esos narcoterroristas que se han instalado en el país durante estos 14 años. Están saliendo por todas las fronteras, están escapando del país, me parece muy bien”, dijo Murillo en el acto realizado en la Academia Nacional de Policía (Anapol), donde formaron los 70 efectivos del GAT armados con implemento moderno.
Los efectivos del GAT.
Murillo denunció el lunes que existe un plan de desestabilización que es operado por el gobierno del venezolano Nicolás Maduro y que afecta al menos a cinco países, entre ellos Bolivia.
Señaló a exguerrilleros del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) del Perú, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), y de los venezolanos Tupamaro.
Este martes detalló que el flagelo “es un animal de dos cabezas” debido a que los sujetos están “financiados por el narcotráfico para hacer terrorismo”.
Gobierno denuncia que hay un plan de desestabilización que se maneja desde Venezuela
“No queremos narcoterroristas aquí, no queremos gente que le haga daño a nuestra patria, gente que mienta a nuestros hermanos más humildes y más pobres, que los lleve con engaños a la muerte como lo han hecho en las manifestaciones pasadas, que los saquen al frente y por detrás les den (disparos) en la nuca”, afirmó el titular de Gobierno.
Dijo que “los cobardes" actúan así y que "los valientes actúan como la Policía Boliviana", a cuyos miembros agradeció a nombre de la presidenta Jeanine Áñez "y de cada uno de los bolivianos”.
Tras las denuncias de fraude en las elecciones del 20 de octubre, las movilizaciones de cívicos y políticos se marcaron con la quema de seis tribunales departamentales, el amotinamiento de la Policía, y el pedido de renuncia que planteó el entonces comandante de las Fuerzas Armadas Willams Kaliman, lo que derivó en la renuncia de Morales.
Murillo destacó lo “orgullosa que se ha sentido nuestra patria los últimos días, cuando con la dura labor que ha hecho la Policía Boliviana en operaciones conjuntas han salvado a la patria de un secuestro de 14 años que estaba sometida a un partido de gobierno”.
Aseguró que “la Policía Boliviana, el Ejército y la ciudadanía, todos unidos, han liberado al país del dictador”.
Para Morales, su salida del poder se debe a un golpe cívico-político-policial al que luego sumaron a los militares e incluso la Organización de Estados Americanos (OEA).
