“Mal gobierno, loco y mañoso”: las palabras que el EZLN uso para definir a López Obrador en 2019
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional ha dicho en diversas ocasiones que AMLO quiere destruir a los pueblos originarios
Infobae
Hablar de la relación entre Andrés Manuel López Obrador, el subcomandante Marcos (hoy Galeano) y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), es sinónimo de desencuentros. Los líderes indígenas se han desmarcado del tabasqueño desde su campaña presidencial en 2018, incluso cuando éste hizo un llamado a la alianza después de que María de Jesús Patricio “Marichuy”, la aspirante independiente indígena no alcanzara las firmas necesarias para lograr su candidatura.
Tras la elección del 1 de julio, en la que salió ganador Obrador, el EZLN publicó un desplegado firmado por los subcomandantes Galeano y Moisés, en el que aseguraban que el nuevo gobierno traería decepción. “Podrán cambiar de capataz, los mayordomos y caporales, pero el finquero sigue siendo el mismo (…) al menos la ilusión actual alivia esa historia de fracasos a la que luego se sumará la desilusión prevista", decía el mensaje.
El texto no mencionaba explícitamente el nombre del tabasqueño, pero comparaba la llegada del nuevo gobierno con un partido de fútbol. “La gran final tan esperada y temida concluyó y el equipo vencedor recibe, con falsa modestia, los clamores de los espectadores”, decía.
El subcomandante Galeano aseguraba en el texto que al nuevo presidente le faltaba "madurar y reconocer sus errores y tropiezos”. Incluso aseguró que su discurso era más cercano al de Gaby Vargas y Cuauhtémoc Sánchez que al de Alfonso Reyes. “No, nosotras, nosotros, zapatistas, NO nos sumamos a la campaña (…) por el bien de todos, primero los huesos”, se leía en referencia a uno de los lemas favoritos de Obrador.
En respuesta, el mandatario mexicano se limitó a decir que no caería en provocaciones; “amor y paz", dijo.
Ya en enero de 2019 se dio un nuevo desencuentro entre el EZLN y AMLO. En la ceremonia para festejar el 25 aniversario del inicio de su insurrección en el estado de Chiapas, el subcomandante Moisés advirtió que combatirían al “mal gobierno”; “loco” y “mañoso”, fueron algunas de las palabras que usaron para definir a Obrador.
“Ese que está en el poder (López Obrador) va a destruir al pueblo de México, principalmente a los pueblos originarios… vienen por nosotros, especialmente por el EZLN” aseguró el comandante Moisés. “Vamos a pelear y lo vamos a enfrentar”.
Agregó que el EZLN no le tiene miedo al gobierno; “vamos a pelear… no vamos a permitir su proyecto de destrucción, no le tenemos miedo a su Guardia Nacional, que le cambio de nombre al Ejército y son los mismos”. Dijo finalmente que le demostrarían al pueblo de México y al mundo entero que son los pueblos indígenas los que están construyendo un futuro diferente.
El presidente respondió a estas críticas en su habitual tono, diciendo frente a los periodistas en su conferencia de prensa matutina que no se enfrentaría con ningún grupo. “Nadie me va a cucar”, sentenció. "Nosotros queremos la paz y la reconciliación. Puede haber diferencias, las hay, pero eso no significa que se vaya a caer en una confrontación o en un pleito. Últimamente se comentaba ‘eso sí calienta’. Pues no, hay mucho frío ahorita. No vamos a caer en ninguna provocación, esa es mi respuesta”.
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional también ha rechazado en diversas ocasiones los proyectos de Obrador, sobretodo la construcción del Tren Maya, obra insignia de su administración que cubriría la zona de Palenque, en Chiapas, y la Riviera Maya, en Quintana Roo.
Sobre la obra, el subcomandante Moisés le ha advertido a la población que la consulta lanzada por el presidente es una treta para que las comunidades indígenas sean sometidas. "Le están pidiendo permiso con votos para que nos ataquen. Están consultando para que vengan a enfrentarnos con esa porquería del Tren Maya”, señaló. “No vamos a permitir que alguien venga a cobijarse en este territorio de rebeldía”.
En agosto el EZLN volvió a criticar los megaproyectos que Obrador pretende hacer en el sureste del país, señalando que la Cuarta Transformación mantiene una política que atenta contra la naturaleza y las comunidades indígenas.
“Entendemos que el actual capataz se formó en el PRI y en la concepción ‘indigenista’ en la que los originarios anhelan vender su dignidad y dejar de ser lo que son, y que el indígena es pieza de museo, artesanía multicolor para que el poderoso oculte lo gris de su corazón”, señaló el movimiento indigenista.
Hace poco menos de una semana el EZLN denunció que la consulta ciudadana para la aprobación del Tren Maya, que conectará varias localidades del sureste, fue una “simulación”.
En un comunicado el EZLN, el Congreso Nacional Indígena (CNI) y el Concejo Indígena de Gobierno (CIG) aseguraron que el gobierno “entrega los territorios indígenas al gran capital industrial y turístico” encargado de reconfigurar el país para dejarlo a merced del capital multinacional.
Entre otras cosas señalan que “el mal gobierno” quiere desmantelar los espacios comunitarios, esto porque fomentan los conflictos internos entre los que defienden la vida y los que quisieron “ponerle precio” para obtener beneficios millonarios.
Ante las constantes criticas del EZLN a su gobierno, el presidente ha hecho un llamado a las comunidades zapatistas a “no dividir al país” y a trabajar juntos para sacar adelante a México.
“Ayer me regalaron esta foto que fue tomada en 1994 en Guadalupe Tepeyac, Las Margaritas, Chiapas. En esa ocasión el tema fue conseguir la paz. Yo solo recuerdo que ‘una imagen vale más que mil palabras’”, escribió en un mensaje que acompañó de una fotografía tomada en 1994, en la que aparece junto al subcomandante Marcos.
Los desencuentros entre el movimiento libertador y el mandatario no concluyen. Este 21 y 22 de diciembre, durante el Foro en Defensa del Territorio y la Madre Tierra celebrado en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, los zapatistas advirtieron que esta “Cuarta Aniquilación” va a destruirlo todo, por lo que urge fortalecer la autonomía de los pueblos originarios.
“La ‘Cuarta Aniquilación’ va a destruir con todo, va a haber mucha tristeza, pero a nosotros nos da coraje y rabia ver cómo siguen engañando a nuestros hermanos; la situación que viene con el nuevo gobierno que es de despojo. Por eso, ante esto, sólo nos queda resistir y enfrentar la guerra de la Cuarta Aniquilación”, dijo uno de los asistentes al foro.
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Hablar de la relación entre Andrés Manuel López Obrador, el subcomandante Marcos (hoy Galeano) y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), es sinónimo de desencuentros. Los líderes indígenas se han desmarcado del tabasqueño desde su campaña presidencial en 2018, incluso cuando éste hizo un llamado a la alianza después de que María de Jesús Patricio “Marichuy”, la aspirante independiente indígena no alcanzara las firmas necesarias para lograr su candidatura.
Tras la elección del 1 de julio, en la que salió ganador Obrador, el EZLN publicó un desplegado firmado por los subcomandantes Galeano y Moisés, en el que aseguraban que el nuevo gobierno traería decepción. “Podrán cambiar de capataz, los mayordomos y caporales, pero el finquero sigue siendo el mismo (…) al menos la ilusión actual alivia esa historia de fracasos a la que luego se sumará la desilusión prevista", decía el mensaje.
El texto no mencionaba explícitamente el nombre del tabasqueño, pero comparaba la llegada del nuevo gobierno con un partido de fútbol. “La gran final tan esperada y temida concluyó y el equipo vencedor recibe, con falsa modestia, los clamores de los espectadores”, decía.
El subcomandante Galeano aseguraba en el texto que al nuevo presidente le faltaba "madurar y reconocer sus errores y tropiezos”. Incluso aseguró que su discurso era más cercano al de Gaby Vargas y Cuauhtémoc Sánchez que al de Alfonso Reyes. “No, nosotras, nosotros, zapatistas, NO nos sumamos a la campaña (…) por el bien de todos, primero los huesos”, se leía en referencia a uno de los lemas favoritos de Obrador.
En respuesta, el mandatario mexicano se limitó a decir que no caería en provocaciones; “amor y paz", dijo.
Ya en enero de 2019 se dio un nuevo desencuentro entre el EZLN y AMLO. En la ceremonia para festejar el 25 aniversario del inicio de su insurrección en el estado de Chiapas, el subcomandante Moisés advirtió que combatirían al “mal gobierno”; “loco” y “mañoso”, fueron algunas de las palabras que usaron para definir a Obrador.
“Ese que está en el poder (López Obrador) va a destruir al pueblo de México, principalmente a los pueblos originarios… vienen por nosotros, especialmente por el EZLN” aseguró el comandante Moisés. “Vamos a pelear y lo vamos a enfrentar”.
Agregó que el EZLN no le tiene miedo al gobierno; “vamos a pelear… no vamos a permitir su proyecto de destrucción, no le tenemos miedo a su Guardia Nacional, que le cambio de nombre al Ejército y son los mismos”. Dijo finalmente que le demostrarían al pueblo de México y al mundo entero que son los pueblos indígenas los que están construyendo un futuro diferente.
El presidente respondió a estas críticas en su habitual tono, diciendo frente a los periodistas en su conferencia de prensa matutina que no se enfrentaría con ningún grupo. “Nadie me va a cucar”, sentenció. "Nosotros queremos la paz y la reconciliación. Puede haber diferencias, las hay, pero eso no significa que se vaya a caer en una confrontación o en un pleito. Últimamente se comentaba ‘eso sí calienta’. Pues no, hay mucho frío ahorita. No vamos a caer en ninguna provocación, esa es mi respuesta”.
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional también ha rechazado en diversas ocasiones los proyectos de Obrador, sobretodo la construcción del Tren Maya, obra insignia de su administración que cubriría la zona de Palenque, en Chiapas, y la Riviera Maya, en Quintana Roo.
Sobre la obra, el subcomandante Moisés le ha advertido a la población que la consulta lanzada por el presidente es una treta para que las comunidades indígenas sean sometidas. "Le están pidiendo permiso con votos para que nos ataquen. Están consultando para que vengan a enfrentarnos con esa porquería del Tren Maya”, señaló. “No vamos a permitir que alguien venga a cobijarse en este territorio de rebeldía”.
En agosto el EZLN volvió a criticar los megaproyectos que Obrador pretende hacer en el sureste del país, señalando que la Cuarta Transformación mantiene una política que atenta contra la naturaleza y las comunidades indígenas.
“Entendemos que el actual capataz se formó en el PRI y en la concepción ‘indigenista’ en la que los originarios anhelan vender su dignidad y dejar de ser lo que son, y que el indígena es pieza de museo, artesanía multicolor para que el poderoso oculte lo gris de su corazón”, señaló el movimiento indigenista.
Hace poco menos de una semana el EZLN denunció que la consulta ciudadana para la aprobación del Tren Maya, que conectará varias localidades del sureste, fue una “simulación”.
En un comunicado el EZLN, el Congreso Nacional Indígena (CNI) y el Concejo Indígena de Gobierno (CIG) aseguraron que el gobierno “entrega los territorios indígenas al gran capital industrial y turístico” encargado de reconfigurar el país para dejarlo a merced del capital multinacional.
Entre otras cosas señalan que “el mal gobierno” quiere desmantelar los espacios comunitarios, esto porque fomentan los conflictos internos entre los que defienden la vida y los que quisieron “ponerle precio” para obtener beneficios millonarios.
Ante las constantes criticas del EZLN a su gobierno, el presidente ha hecho un llamado a las comunidades zapatistas a “no dividir al país” y a trabajar juntos para sacar adelante a México.
“Ayer me regalaron esta foto que fue tomada en 1994 en Guadalupe Tepeyac, Las Margaritas, Chiapas. En esa ocasión el tema fue conseguir la paz. Yo solo recuerdo que ‘una imagen vale más que mil palabras’”, escribió en un mensaje que acompañó de una fotografía tomada en 1994, en la que aparece junto al subcomandante Marcos.
Los desencuentros entre el movimiento libertador y el mandatario no concluyen. Este 21 y 22 de diciembre, durante el Foro en Defensa del Territorio y la Madre Tierra celebrado en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, los zapatistas advirtieron que esta “Cuarta Aniquilación” va a destruirlo todo, por lo que urge fortalecer la autonomía de los pueblos originarios.
“La ‘Cuarta Aniquilación’ va a destruir con todo, va a haber mucha tristeza, pero a nosotros nos da coraje y rabia ver cómo siguen engañando a nuestros hermanos; la situación que viene con el nuevo gobierno que es de despojo. Por eso, ante esto, sólo nos queda resistir y enfrentar la guerra de la Cuarta Aniquilación”, dijo uno de los asistentes al foro.