Athletic y Eibar se quedan secos en un derbi nefasto
Los rojiblancos cierran con un partido pésimo su gran 2019 en casa. Al Eibar le faltó un poco más de valentía para rematar a un enemigo inerte.
Alfonso Herrán
As
Cerró el año el Athletic en casa cantando villancicos. Acurrucado, cerca de la portería de Unai Simón, se dedicó a emborronar una hoja de servicios preciosa durante este 2019 que agoniza. Aquel muerto de diciembre de 2018 con Berizzo se levantó de la tumba y se dio un paseo por San Mamés para soplar una vela de cumpleaños. ¡Menudo bodrio! Esta versión del Athletic, capaz de vencerse solo, no se conocía por Bilbao desde tiempo atrás. Un equipo raquítico que celebró un Eibar en paños menores por las bajas en la parcela defensiva. No acabó de creerse el cuadro de Mendilibar semejante enemigo ramplón, porque si no lo normal habría sido salir al cuello a darle una tunda para dibujar aún un adversario más deprimente. Pero ante la nadería local, apenas hubo respuesta, quizá por falta de herramientas.
Garitano arrancó con Unai López de mediapunta, con San José poniendo cemento por medio y Raúl García de vuelta al ‘nueve’ tras la ausencia en Sevilla por lesión. Ahí residió el error: no había trama por medio, el balón viajaba como un zombi por las botas de todos. El cambio de perfiles en el centro del campo influyó en la falta de fluidez. No había juego entre líneas y no se vio a Unai López cogerla, girarse y activar algo potable. Se esperaba el torbellino de costumbre pero apareció en escena un ‘que se besen’. El Eibar lanzó la presión alta, solidaria, con compromiso de todos, y los leones estaban parados, con la mirada ausente. Se confirma: con viento sur, no se puede jugar en San Mamés. El fútbol hace huelga. Llevaba tanto tiempo jugando los domingos a las dos, que tal vez este sábado por la tarde se le hizo muy pastoso. La lesión de Bigas a los 20 minutos, tras un salto con Raúl García, aún contribuyó más a dibujar un compromiso muy extraño. El bravo centrocampista navarro estaba en todas las peleas. Un salto con Burgos, que entró por Bigas, dejó al argentino con el pómulo y la nariz averiados, hasta el punto de que se planteó marcharse tras solo diez minutos en el verde. . El balón no se jugaba y el ritmo era armero. Un gol de Córdoba fue anulado por claro fuera de juego.
El despropósito no paraba de crecer. El Athletic necesitaba con urgencia una sacudida. No lo aportaron los cambios, desde luego. Córdoba siguió la tradición de ser sacrificado en el descanso y salió Ibai. Al menos, los rojiblancos tuvieron un par de arranques valerosos. Una jugada de autor, la habitual de Williams, montado en moto GP y dejando rivales atrás, pero el remate de Ibai no fue preciso y paró Dmitrovic. El Athletic al fin estaba más cerca de la portería contraria y se activaba con las segundas jugadas. Un gol de Oliveira en propia puerta también fue tachado tras revisión del VAR, por posición antirreglamentaria previa. El derbi se fue por la alcantarilla del olvido. Nadie le echará de menos.
Mendilibar
El entrenador del Eibar, José Luis Mendilibar, valoró positivamente el punto sumado por su equipo en San Mamés con el empate sin goles frente al Athletic que rompió una racha de cuatro derrotas consecutivas del conjunto armero.
"Las ocasiones igual han sido más del Athletic y nosotros en el aspecto defensivo hemos estado bien. Aunque nos ha faltado generar algo de miedo y, por el juego o por el VAR, no hemos podido hacer ocasiones. Está bien el empate", explicó el técnico.
Mendilibar explicó que su idea inicial era que los locales "no salieran jugando con comodidad desde atrás" y "evitar los golpeos en largo para Raúl García y las prolongaciones a la carrera de Williams". "Ese ha sido su juego y en jugada les ha costado mucho y no han tenido la facilidad para salir. Les hemos tapado bien esa jugada", añadió.
El entrenador vizcaíno, además, destacó que sus futbolistas, "muchos de ellos con pocos minutos", demostraron un "compromiso muy grande" de sus futbolistas. "Se han comportado como grandes tipos, en ese sentido hemos estado muy bien", apostilló.
Mendilibar puso como ejemplo de ese compromiso al argentino Esteban Burgos, que debutó oficialmente como jugador del Eibar sustituyendo al lesionado Pedro Bigas a los 20 minutos de partido.
El central jugó el resto del encuentro con "una fractura" en el rostro que sufrió poco después de entrar en el campo después de un choque fortuito con Raúl García.
"Tiene algo roto. Iba a estar el primer tiempo, pero en el descanso ha dicho que aguantaría y ha aguantado. No era fácil y ha hecho un buen partido. Es un ejemplo de ese compromiso, un tío que debutaba hoy, que con una fractura se podía haber marchado y ha peleado hasta el final como el resto", destacó.
Garitano
El entrenador del Athletic, Gaizka Garitano, admitió que no ha acabado "satisfecho" con el punto sumado tras el empate sin goles frente al Eibar porque su objetivo era ganar y lamentó que, a pesar de no haber concedido "ninguna ocasión" al rival, les "faltó fútbol para desbordar" a su rival.
"En el primer tiempo el Eibar nos exponía al juego directo. Porque no nos han dejado o no hemos sabido, no tuvimos ideas para salir y el balón no se jugaba. Se ha jugado más al ritmo que querían ellos y han sido mejores. No han hecho ocasiones, pero estábamos lejos de la portería", explicó el técnico del equipo rojiblanco.
PUBLICIDAD
inRead invented by Teads
"En el segundo tiempo estuvimos más cerca de la portería rival y las tres ocasiones claras del partido han sido nuestras", añadió Garitano antes de reconocer las dificultades que encontró Unai López en su nueva posición de medio punta porque "cualquier balón por dentro era imposible de jugar".
"Hemos intentado a ver si Unai enganchaba alguna, pero no había juego entre líneas para que recibiera el balón. No lo hemos encontrado por mérito de ellos. Han estado muy juntitos y agresivos en el juego directo. Nadie tiene la posibilidad de dar tres pases seguidos contra el Eibar", destacó.
Alfonso Herrán
As
Cerró el año el Athletic en casa cantando villancicos. Acurrucado, cerca de la portería de Unai Simón, se dedicó a emborronar una hoja de servicios preciosa durante este 2019 que agoniza. Aquel muerto de diciembre de 2018 con Berizzo se levantó de la tumba y se dio un paseo por San Mamés para soplar una vela de cumpleaños. ¡Menudo bodrio! Esta versión del Athletic, capaz de vencerse solo, no se conocía por Bilbao desde tiempo atrás. Un equipo raquítico que celebró un Eibar en paños menores por las bajas en la parcela defensiva. No acabó de creerse el cuadro de Mendilibar semejante enemigo ramplón, porque si no lo normal habría sido salir al cuello a darle una tunda para dibujar aún un adversario más deprimente. Pero ante la nadería local, apenas hubo respuesta, quizá por falta de herramientas.
Garitano arrancó con Unai López de mediapunta, con San José poniendo cemento por medio y Raúl García de vuelta al ‘nueve’ tras la ausencia en Sevilla por lesión. Ahí residió el error: no había trama por medio, el balón viajaba como un zombi por las botas de todos. El cambio de perfiles en el centro del campo influyó en la falta de fluidez. No había juego entre líneas y no se vio a Unai López cogerla, girarse y activar algo potable. Se esperaba el torbellino de costumbre pero apareció en escena un ‘que se besen’. El Eibar lanzó la presión alta, solidaria, con compromiso de todos, y los leones estaban parados, con la mirada ausente. Se confirma: con viento sur, no se puede jugar en San Mamés. El fútbol hace huelga. Llevaba tanto tiempo jugando los domingos a las dos, que tal vez este sábado por la tarde se le hizo muy pastoso. La lesión de Bigas a los 20 minutos, tras un salto con Raúl García, aún contribuyó más a dibujar un compromiso muy extraño. El bravo centrocampista navarro estaba en todas las peleas. Un salto con Burgos, que entró por Bigas, dejó al argentino con el pómulo y la nariz averiados, hasta el punto de que se planteó marcharse tras solo diez minutos en el verde. . El balón no se jugaba y el ritmo era armero. Un gol de Córdoba fue anulado por claro fuera de juego.
El despropósito no paraba de crecer. El Athletic necesitaba con urgencia una sacudida. No lo aportaron los cambios, desde luego. Córdoba siguió la tradición de ser sacrificado en el descanso y salió Ibai. Al menos, los rojiblancos tuvieron un par de arranques valerosos. Una jugada de autor, la habitual de Williams, montado en moto GP y dejando rivales atrás, pero el remate de Ibai no fue preciso y paró Dmitrovic. El Athletic al fin estaba más cerca de la portería contraria y se activaba con las segundas jugadas. Un gol de Oliveira en propia puerta también fue tachado tras revisión del VAR, por posición antirreglamentaria previa. El derbi se fue por la alcantarilla del olvido. Nadie le echará de menos.
Mendilibar
El entrenador del Eibar, José Luis Mendilibar, valoró positivamente el punto sumado por su equipo en San Mamés con el empate sin goles frente al Athletic que rompió una racha de cuatro derrotas consecutivas del conjunto armero.
"Las ocasiones igual han sido más del Athletic y nosotros en el aspecto defensivo hemos estado bien. Aunque nos ha faltado generar algo de miedo y, por el juego o por el VAR, no hemos podido hacer ocasiones. Está bien el empate", explicó el técnico.
Mendilibar explicó que su idea inicial era que los locales "no salieran jugando con comodidad desde atrás" y "evitar los golpeos en largo para Raúl García y las prolongaciones a la carrera de Williams". "Ese ha sido su juego y en jugada les ha costado mucho y no han tenido la facilidad para salir. Les hemos tapado bien esa jugada", añadió.
El entrenador vizcaíno, además, destacó que sus futbolistas, "muchos de ellos con pocos minutos", demostraron un "compromiso muy grande" de sus futbolistas. "Se han comportado como grandes tipos, en ese sentido hemos estado muy bien", apostilló.
Mendilibar puso como ejemplo de ese compromiso al argentino Esteban Burgos, que debutó oficialmente como jugador del Eibar sustituyendo al lesionado Pedro Bigas a los 20 minutos de partido.
El central jugó el resto del encuentro con "una fractura" en el rostro que sufrió poco después de entrar en el campo después de un choque fortuito con Raúl García.
"Tiene algo roto. Iba a estar el primer tiempo, pero en el descanso ha dicho que aguantaría y ha aguantado. No era fácil y ha hecho un buen partido. Es un ejemplo de ese compromiso, un tío que debutaba hoy, que con una fractura se podía haber marchado y ha peleado hasta el final como el resto", destacó.
Garitano
El entrenador del Athletic, Gaizka Garitano, admitió que no ha acabado "satisfecho" con el punto sumado tras el empate sin goles frente al Eibar porque su objetivo era ganar y lamentó que, a pesar de no haber concedido "ninguna ocasión" al rival, les "faltó fútbol para desbordar" a su rival.
"En el primer tiempo el Eibar nos exponía al juego directo. Porque no nos han dejado o no hemos sabido, no tuvimos ideas para salir y el balón no se jugaba. Se ha jugado más al ritmo que querían ellos y han sido mejores. No han hecho ocasiones, pero estábamos lejos de la portería", explicó el técnico del equipo rojiblanco.
PUBLICIDAD
inRead invented by Teads
"En el segundo tiempo estuvimos más cerca de la portería rival y las tres ocasiones claras del partido han sido nuestras", añadió Garitano antes de reconocer las dificultades que encontró Unai López en su nueva posición de medio punta porque "cualquier balón por dentro era imposible de jugar".
"Hemos intentado a ver si Unai enganchaba alguna, pero no había juego entre líneas para que recibiera el balón. No lo hemos encontrado por mérito de ellos. Han estado muy juntitos y agresivos en el juego directo. Nadie tiene la posibilidad de dar tres pases seguidos contra el Eibar", destacó.