Sterling sigue como una bala
El 7 de los cityzens abrió la lata al poco de la reanudación. De Bruyne y Gundogan también marcaron para dejar los tres puntos en el Etihad Stadium.
Alberto Muñoz
As
El Manchester City sigue sin mostrar su mejor versión, pero tiene una plantilla tan profunda, tan llena de individualidades y de estrellas, que sus goleadas parecen casi inevitables. Una vez más fue Sterling, que ya lleva 13 goles y 5 asistencias en 14 partidos, quien se encargó de abrir el marcador ante un Aston Villa que se resistió hasta el primer gol. Los de Pep, que se colocan momentáneamente a tres puntos del líder, completan una buena semana en la que han marcado 10 goles y apenas han recibido uno en tres partidos.
Tras una primera mitad en la que dio la impresión que el Aston Villa estaba abusando de su suerte para mantener el empate a cero, bastó prácticamente con que el árbitro pitase el comienzo de la segunda mitad para que se viese que la concentración de los de Dean Smith no era la misma. Un balón bombeado y fácil que parecía que iba a despejar sin más problemas Mings fue prolongado de cabeza por Gabriel Jesús para la carrera de Sterling, que no falló en la definición. El inglés, que está de dulce tras su hat-trick al Atalanta, lleva seis goles y tres asistencias en los últimos cuatro partidos.
Poco después, el propio Mings se redimió sacándole un balón bajo palos en la misma línea al delantero brasileño, que no se lo podía creer por lo claro que había sido su mano a mano. A pesar de que los cityzens no llegaron a estar completamente cómodos en muchas fases del encuentro, se notaba en sus jugadores que sabían de la importancia de ganar hoy. El Liverpool juega mañana contra el Tottenham, que levantó la cabeza en Champions, y era necesario que sintiese la presión de su principal perseguidor.
La mantuvo, además, con autoridad, ya que una vez que abrieron la lata de los ‘villanos’, no tardaron en llegar el resto de goles. El segundo, en un centro chut enmarañado de De Bruyne que fue revisando a fondo por el VAR, que finalmente terminó declarando que no hubo fuera de juego de Sterling en una jugada de lo más complicada. El tercero, en otro córner con mucho rebote que finalmente terminó rematando a gol Gündogan con un remate muy plástico.
En el 87, con el partido resuelto y en su encuentro número 200, Fernandinho fue expulsado tras una doble amarilla totalmente innecesaria. El City, sin hacer un partido brillante y con goles más fruto del pundonor y de la suerte que del buen juego, se coloca provisionalmente a tres puntos del líder, que deberá imponerse mañana en Anfield a los spurs si quiere conservar su cómoda ventaja.
Alberto Muñoz
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El Manchester City sigue sin mostrar su mejor versión, pero tiene una plantilla tan profunda, tan llena de individualidades y de estrellas, que sus goleadas parecen casi inevitables. Una vez más fue Sterling, que ya lleva 13 goles y 5 asistencias en 14 partidos, quien se encargó de abrir el marcador ante un Aston Villa que se resistió hasta el primer gol. Los de Pep, que se colocan momentáneamente a tres puntos del líder, completan una buena semana en la que han marcado 10 goles y apenas han recibido uno en tres partidos.
Tras una primera mitad en la que dio la impresión que el Aston Villa estaba abusando de su suerte para mantener el empate a cero, bastó prácticamente con que el árbitro pitase el comienzo de la segunda mitad para que se viese que la concentración de los de Dean Smith no era la misma. Un balón bombeado y fácil que parecía que iba a despejar sin más problemas Mings fue prolongado de cabeza por Gabriel Jesús para la carrera de Sterling, que no falló en la definición. El inglés, que está de dulce tras su hat-trick al Atalanta, lleva seis goles y tres asistencias en los últimos cuatro partidos.
Poco después, el propio Mings se redimió sacándole un balón bajo palos en la misma línea al delantero brasileño, que no se lo podía creer por lo claro que había sido su mano a mano. A pesar de que los cityzens no llegaron a estar completamente cómodos en muchas fases del encuentro, se notaba en sus jugadores que sabían de la importancia de ganar hoy. El Liverpool juega mañana contra el Tottenham, que levantó la cabeza en Champions, y era necesario que sintiese la presión de su principal perseguidor.
La mantuvo, además, con autoridad, ya que una vez que abrieron la lata de los ‘villanos’, no tardaron en llegar el resto de goles. El segundo, en un centro chut enmarañado de De Bruyne que fue revisando a fondo por el VAR, que finalmente terminó declarando que no hubo fuera de juego de Sterling en una jugada de lo más complicada. El tercero, en otro córner con mucho rebote que finalmente terminó rematando a gol Gündogan con un remate muy plástico.
En el 87, con el partido resuelto y en su encuentro número 200, Fernandinho fue expulsado tras una doble amarilla totalmente innecesaria. El City, sin hacer un partido brillante y con goles más fruto del pundonor y de la suerte que del buen juego, se coloca provisionalmente a tres puntos del líder, que deberá imponerse mañana en Anfield a los spurs si quiere conservar su cómoda ventaja.