Renault se acerca al colapso
Acabaron el viernes con el penúltimo coche por mejoras que no funcionaron. El cuarto presupuesto no tiene resultados y se quedan sin equipos clientes.
Jesús Balseiro
As
Renault tuvo por momentos el cuarto coche más rápido de 2019, era ese el puesto que defendía por su clasificación final el año pasado, pero este viernes en Suzuka se quedó estancado con el penúltimo monoplaza de la parrilla, sólo por delante de Williams. Las mejoras introducidas no funcionaron o no llegaron a afinarse correctamente con el ‘set up’: probaban un alerón delantero hacia el que podrían dirigir sus intenciones en el RS20 del año que viene, pero los primeros resultados no han sido nada alentadores, con Ricciardo, 18º y Hulkenberg, 19º.
De confirmarse su paso atrás en este final de curso no es una enfermedad, sino otro síntoma: la firma francesa está sufriendo esta temporada sin encontrar el camino ni con el chasis, ni en su motor, ni desde la dirección de la escudería. Superados por un equipo cliente, McLaren, que hace un año ni peleaba por los puntos, el cuarto mayor presupuesto de la F1 (cerca de 250 millones con la división de motores incluidas) no tiene resultados proporcionales a su inversión.
En tres años habrán dejado de suministrar unidades de potencia a Toro Rosso, Red Bull y McLaren, con la consiguiente reducción de ingresos (unos 25 millones por escudería) y sin resultados, por el 'paddock' ya se comenta que, sin un cambio de resultados su panel directivo puede empezar a reconsiderar la presencia en el ‘Gran circo’, como ya hicieron en el pasado. "Nos centraremos en nosotros mismos, una distracción menos, y económicamente no tiene impacto porque vendemos a coste de producción", opina Cyril Abiteboul sobre su desvinculación de McLaren en 2021. El dirigente es otro señalado por su gestión, necesitada de un punto de inflexión cuanto antes.
Ese motor es el tercero en discordia, incluso Honda admitía a AS que está por encima en prestaciones, pero con problemas de fiabilidad que han degenerado en sanciones en parrilla para todos los pilotos que lo montan. Precisamente en Suzuka, McLaren acusa falta de velocidad punta en el último sector del circuito, y no es descartable que antes de final de año tanto los de Woking como los dos Renault oficiales asuman nuevas penalizaciones por otro cambio de unidad. Y en el apartado de los pilotos, se junta Ricciardo, el tercer mejor pagado de la parrilla (27 millones de euros) con un coche que no está a su altura de su palmarés, con Hulkenberg, que de líder del proyecto ha pasado a descarte en favor del francés Ocon. Demasiadas curvas, y cambios de rumbo en una escudería que hace 15 años tenía a Alonso y Fisichella, sus dos pilotos, 1º y 3º en Suzuka.
As
Renault tuvo por momentos el cuarto coche más rápido de 2019, era ese el puesto que defendía por su clasificación final el año pasado, pero este viernes en Suzuka se quedó estancado con el penúltimo monoplaza de la parrilla, sólo por delante de Williams. Las mejoras introducidas no funcionaron o no llegaron a afinarse correctamente con el ‘set up’: probaban un alerón delantero hacia el que podrían dirigir sus intenciones en el RS20 del año que viene, pero los primeros resultados no han sido nada alentadores, con Ricciardo, 18º y Hulkenberg, 19º.
De confirmarse su paso atrás en este final de curso no es una enfermedad, sino otro síntoma: la firma francesa está sufriendo esta temporada sin encontrar el camino ni con el chasis, ni en su motor, ni desde la dirección de la escudería. Superados por un equipo cliente, McLaren, que hace un año ni peleaba por los puntos, el cuarto mayor presupuesto de la F1 (cerca de 250 millones con la división de motores incluidas) no tiene resultados proporcionales a su inversión.
En tres años habrán dejado de suministrar unidades de potencia a Toro Rosso, Red Bull y McLaren, con la consiguiente reducción de ingresos (unos 25 millones por escudería) y sin resultados, por el 'paddock' ya se comenta que, sin un cambio de resultados su panel directivo puede empezar a reconsiderar la presencia en el ‘Gran circo’, como ya hicieron en el pasado. "Nos centraremos en nosotros mismos, una distracción menos, y económicamente no tiene impacto porque vendemos a coste de producción", opina Cyril Abiteboul sobre su desvinculación de McLaren en 2021. El dirigente es otro señalado por su gestión, necesitada de un punto de inflexión cuanto antes.
Ese motor es el tercero en discordia, incluso Honda admitía a AS que está por encima en prestaciones, pero con problemas de fiabilidad que han degenerado en sanciones en parrilla para todos los pilotos que lo montan. Precisamente en Suzuka, McLaren acusa falta de velocidad punta en el último sector del circuito, y no es descartable que antes de final de año tanto los de Woking como los dos Renault oficiales asuman nuevas penalizaciones por otro cambio de unidad. Y en el apartado de los pilotos, se junta Ricciardo, el tercer mejor pagado de la parrilla (27 millones de euros) con un coche que no está a su altura de su palmarés, con Hulkenberg, que de líder del proyecto ha pasado a descarte en favor del francés Ocon. Demasiadas curvas, y cambios de rumbo en una escudería que hace 15 años tenía a Alonso y Fisichella, sus dos pilotos, 1º y 3º en Suzuka.
