Nicolas Pépé no arranca: un gol en 614 minutos con el Arsenal
El fichaje más caro de la historia del club 'gunner' no ha alcanzado el nivel de forma que le sacó del Lille por 80 millones de euros este verano.
Fernando S. Tavero
As
El gol se paga, y se paga caro. Sino que le pregunten al Arsenal y a los 80 millones de euros que pagaron por Nicolas Pépé este verano - fichaje récord de los londinenses. Sin embargo, el proceso de adaptación del marfileño al fútbol de las islas está siendo más largo de los esperado. Diez partidos y 614 minutos después, un gol (en la victoria por 3-2 frente al Aston Villa) es el bagaje que acumula el delantero procedente del Lille.
El conjunto gunner se encuentra tercero de la Premier League con 15 puntos, a uno del City de Guardiola (el Liverpool tiraniza la clasificación con 23). Sin embargo, aun siendo parte fundamental del once tipo de Emery y de la buena racha del equipo: ha sido titular en los últimos seis partidos, de los cuales sólo perdieron el primero de ellos, en Anfiel frente a los hombres de Klopp (3-1); se espera más de un jugador que viene de anotar 22 goles y repartir 11 asistencias en la pasada Ligue 1.
Si bien es cierto que Pépé se trata de un extremo derecho con gran desborde y velocidad, su explosión en el apartado goleador fue la que le hizo llegar a la capital. Unos números tan pobres como los deslizados hasta ahora son insuficientes teniendo en cuenta el precio pagado por él. Además, Alexander Lacazette lleva lesionado más de un mes y sus tantos deberían recaer sobre los hombros del jugador más caro de la historia del club.
Sorprende que no haya conseguido aterrizar con el pie correcto en una liga con el perfil de la Premier. Sus características se entienden idóneas para un fútbol vertiginoso como el inglés. Así como tener un jugador como Aubameyang a su lado le descarga gran parte de la presión que supone el fuerte desembolso.
El buen rumbo que lleva el equipo por el momento y la mala racha de otros conjuntos como el Manchester United o el Tottenham están atrayendo la mayoría de los focos, por lo que la mala racha de Pépé está en un segundo plano. Sin embargo, como no comience a perforar porterías rivales, la losa de los millones será cada vez más pesada.
Fernando S. Tavero
As
El gol se paga, y se paga caro. Sino que le pregunten al Arsenal y a los 80 millones de euros que pagaron por Nicolas Pépé este verano - fichaje récord de los londinenses. Sin embargo, el proceso de adaptación del marfileño al fútbol de las islas está siendo más largo de los esperado. Diez partidos y 614 minutos después, un gol (en la victoria por 3-2 frente al Aston Villa) es el bagaje que acumula el delantero procedente del Lille.
El conjunto gunner se encuentra tercero de la Premier League con 15 puntos, a uno del City de Guardiola (el Liverpool tiraniza la clasificación con 23). Sin embargo, aun siendo parte fundamental del once tipo de Emery y de la buena racha del equipo: ha sido titular en los últimos seis partidos, de los cuales sólo perdieron el primero de ellos, en Anfiel frente a los hombres de Klopp (3-1); se espera más de un jugador que viene de anotar 22 goles y repartir 11 asistencias en la pasada Ligue 1.
Si bien es cierto que Pépé se trata de un extremo derecho con gran desborde y velocidad, su explosión en el apartado goleador fue la que le hizo llegar a la capital. Unos números tan pobres como los deslizados hasta ahora son insuficientes teniendo en cuenta el precio pagado por él. Además, Alexander Lacazette lleva lesionado más de un mes y sus tantos deberían recaer sobre los hombros del jugador más caro de la historia del club.
Sorprende que no haya conseguido aterrizar con el pie correcto en una liga con el perfil de la Premier. Sus características se entienden idóneas para un fútbol vertiginoso como el inglés. Así como tener un jugador como Aubameyang a su lado le descarga gran parte de la presión que supone el fuerte desembolso.
El buen rumbo que lleva el equipo por el momento y la mala racha de otros conjuntos como el Manchester United o el Tottenham están atrayendo la mayoría de los focos, por lo que la mala racha de Pépé está en un segundo plano. Sin embargo, como no comience a perforar porterías rivales, la losa de los millones será cada vez más pesada.