Mustafi: "No soy el segundo peor defensa del mundo"
El central alemán del Arsenal se defiende de sus críticos en una entrevista en Der Spiegel: "Llegó un punto donde la gente me culpaba hasta de derrotas en las que no había jugado".
Álvaro Estévez Ingelmo
As
Shkodran Mustafi no atraviesa su mejor momento como profesional. El defensa del Arsenal ha perdido su sitio en el equipo de Unai Emery, donde todavía no ha disputado un solo minuto de Premier esta temporada, y su nombre está constantemente en boca de los aficionados británicos como uno de los principales culpables cuando vienen mal dadas para los 'gunners'. "No soy el segundo peor defensa del mundo", explica el germano en una entrevista concedida a Der Spiegel en respuesta a una encuesta entre inernautas que lo sitúa como uno de los peores zagueros del planeta, "Me gustaría saber cómo habrían sido los resultados si se hubiese hecho la encuesta entre los mejores entrenadores de Europa. Recientemente he cometido varios errores y han generado un problema que nunca antes había vivido".
Esos fallos que menciona el alemán son los que protagonizó durante las pasadas Navidades, período en el que el Arsenal protagonizó varias derrotas sonadas, como la goleada por 5 a 1 sufrida en Anfield ante el Liverpool: "Me había perdido tres semanas y tuve que jugar sin haber entrenado antes porque el entrenador me necesitaba", recuerda el teutón, "Al descanso íbamos 4-1 y me había vuelto a lesionar. Tras el partido recibí muchas críticas de los aficionados a través de las redes sociales y se me criticó en muchos artículos". Meses más tarde, un penalti cometido por el alemán ante el Crystal Palace le complicaba la clasificación a Champions League a los del Norte de Londres: "Soy suficientemente crítico conmigo mismo para darme cuenta de que he cometido errores", añade el germano, "Puedo tolerar las críticas, pero se han vuelto irracionales y me han convertido en una diana. Llegó un punto donde la gente me culpaba de derrotas en las que no había jugado".
En 2016, Mustafi se convirtió en el central alemán más caro de la historia después de que el Arsenal pagara 40 millones de euros al Valencia para hacerse con sus servicios; casi tres años después, es el foco de la ira de los aficionados 'gunners', que recopilan vídeos con sus errores que llegan a los casi dos millones de reproducciones. "No, no lo he visto", explica en referencia a dicho vídeo, titulado como 'Mustafi debe irse', "Debo protegerme. Hay días que sí dudé de mí. pero hubo algo que me dijo mi mujer que me ayudó: "Si tan malo eres nunca habrías sido campeón del mundo ni habrías fichado por el Arsenal". Desde entonces lo llevo mejor".
El alemán, que en todo momento se mostró respetuoso con los aficionados, sí criticó al exjugador del Arsenal Emmanuel Petit, que cargó contra él tras una mala actuación llamándolo "el rey de los maricas": "Eso me molestó mucho. Una cosa son las críticas de aficionados y prensa, pero es distinto cuando lo hace un exjugador, que sabe lo difícil que es esto a veces". Mustafi, activo en redes sociales como casi cualquier futbolista moderno, también habló sobre el arma de doble filo que suponen dichas plataformas: "En el pasado salías un día en el periódico y la gente se olvidaba al momento. Hoy todo esta internet y esos comentarios me van a perseguir el resto de mi carrera". "Creo que el fútbol se ha vuelto más inhumano y las redes han contribuido a ello gracias al anonimato. La gente puede descargar directamente sus frustraciones en nosotros", añade el alemán.
Los únicos minutos de Mustafi esta temporada han sido en la Europa League y en la EFL Cup; en la foto, pelea por un balón con Bas Dost en la victoria por 0-3 del Arsenal sobre el Eintracht de Frankfurt en septiembre. KAI PFAFFENBACH (REUTERS)
Poco después de ser campeón del Mundial 2014 con Alemania, el alemán explicaba que "la parte más complicada de nuestro trabajo es lidiar con nuestras emociones"; hoy, el central germano sigue pensando lo mismo: "Cuando estás arriba, debes tener cuidado y no dejarte ir. Cuando estás abajo, debes procurar no volverte loco. Ahora mismo me digo: "No quiero sentarme en ese banquillo otra vez y sentirme culpable por haber defraudado a mis compañeros". Eso me motiva".
Finalmente, y ya en un plano más terrenal, Mustafi confirmó que estuvo cerca de abandonar el Arsenal este verano. "Sí, consideré cambiar de club, pero no había ninguna opción que satisficiera a todas las partes", explica, "Además, hay algo que tenía claro: el siguiente cambio es extremadamente importante si quiero tener otro capítulo positivo en el fútbol; si me voy a un sitio donde no encaje, la situación no mejoraría". Fuera de las convocatorias de Joachim Löw desde 2017, el central no descarta volver a la Mannschaft o un retorno a la Bundesliga, pero "primero he de volver a mi nivel en el Arsenal".
Álvaro Estévez Ingelmo
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Shkodran Mustafi no atraviesa su mejor momento como profesional. El defensa del Arsenal ha perdido su sitio en el equipo de Unai Emery, donde todavía no ha disputado un solo minuto de Premier esta temporada, y su nombre está constantemente en boca de los aficionados británicos como uno de los principales culpables cuando vienen mal dadas para los 'gunners'. "No soy el segundo peor defensa del mundo", explica el germano en una entrevista concedida a Der Spiegel en respuesta a una encuesta entre inernautas que lo sitúa como uno de los peores zagueros del planeta, "Me gustaría saber cómo habrían sido los resultados si se hubiese hecho la encuesta entre los mejores entrenadores de Europa. Recientemente he cometido varios errores y han generado un problema que nunca antes había vivido".
Esos fallos que menciona el alemán son los que protagonizó durante las pasadas Navidades, período en el que el Arsenal protagonizó varias derrotas sonadas, como la goleada por 5 a 1 sufrida en Anfield ante el Liverpool: "Me había perdido tres semanas y tuve que jugar sin haber entrenado antes porque el entrenador me necesitaba", recuerda el teutón, "Al descanso íbamos 4-1 y me había vuelto a lesionar. Tras el partido recibí muchas críticas de los aficionados a través de las redes sociales y se me criticó en muchos artículos". Meses más tarde, un penalti cometido por el alemán ante el Crystal Palace le complicaba la clasificación a Champions League a los del Norte de Londres: "Soy suficientemente crítico conmigo mismo para darme cuenta de que he cometido errores", añade el germano, "Puedo tolerar las críticas, pero se han vuelto irracionales y me han convertido en una diana. Llegó un punto donde la gente me culpaba de derrotas en las que no había jugado".
En 2016, Mustafi se convirtió en el central alemán más caro de la historia después de que el Arsenal pagara 40 millones de euros al Valencia para hacerse con sus servicios; casi tres años después, es el foco de la ira de los aficionados 'gunners', que recopilan vídeos con sus errores que llegan a los casi dos millones de reproducciones. "No, no lo he visto", explica en referencia a dicho vídeo, titulado como 'Mustafi debe irse', "Debo protegerme. Hay días que sí dudé de mí. pero hubo algo que me dijo mi mujer que me ayudó: "Si tan malo eres nunca habrías sido campeón del mundo ni habrías fichado por el Arsenal". Desde entonces lo llevo mejor".
El alemán, que en todo momento se mostró respetuoso con los aficionados, sí criticó al exjugador del Arsenal Emmanuel Petit, que cargó contra él tras una mala actuación llamándolo "el rey de los maricas": "Eso me molestó mucho. Una cosa son las críticas de aficionados y prensa, pero es distinto cuando lo hace un exjugador, que sabe lo difícil que es esto a veces". Mustafi, activo en redes sociales como casi cualquier futbolista moderno, también habló sobre el arma de doble filo que suponen dichas plataformas: "En el pasado salías un día en el periódico y la gente se olvidaba al momento. Hoy todo esta internet y esos comentarios me van a perseguir el resto de mi carrera". "Creo que el fútbol se ha vuelto más inhumano y las redes han contribuido a ello gracias al anonimato. La gente puede descargar directamente sus frustraciones en nosotros", añade el alemán.
Los únicos minutos de Mustafi esta temporada han sido en la Europa League y en la EFL Cup; en la foto, pelea por un balón con Bas Dost en la victoria por 0-3 del Arsenal sobre el Eintracht de Frankfurt en septiembre. KAI PFAFFENBACH (REUTERS)
Poco después de ser campeón del Mundial 2014 con Alemania, el alemán explicaba que "la parte más complicada de nuestro trabajo es lidiar con nuestras emociones"; hoy, el central germano sigue pensando lo mismo: "Cuando estás arriba, debes tener cuidado y no dejarte ir. Cuando estás abajo, debes procurar no volverte loco. Ahora mismo me digo: "No quiero sentarme en ese banquillo otra vez y sentirme culpable por haber defraudado a mis compañeros". Eso me motiva".
Finalmente, y ya en un plano más terrenal, Mustafi confirmó que estuvo cerca de abandonar el Arsenal este verano. "Sí, consideré cambiar de club, pero no había ninguna opción que satisficiera a todas las partes", explica, "Además, hay algo que tenía claro: el siguiente cambio es extremadamente importante si quiero tener otro capítulo positivo en el fútbol; si me voy a un sitio donde no encaje, la situación no mejoraría". Fuera de las convocatorias de Joachim Löw desde 2017, el central no descarta volver a la Mannschaft o un retorno a la Bundesliga, pero "primero he de volver a mi nivel en el Arsenal".