Mark Zuckerberg habló sobre la libertad de expresión y la desinformación en Facebook
“No verificamos los anuncios políticos, porque creemos que las personas deberían poder ver por sí mismas lo que dicen los políticos”, declaró el empresario en un discurso en la Universidad de Georgetown. En los últimos días, la red social se vio envuelta en una nueva polémica porque decidió no quitar un anuncio que lanzó la campaña de Trump donde se hace una acusación a Biden sobre la cual no hay evidencia concluyente
Infobae
“La gente se preocupa, y yo también me preocupo profundamente por la erosión de la verdad”, dijo Mark Zuckerberg a The Washington Post este jueves, en el marco de una entrevista que tuvo con el medio, antes de ofrecer un discurso en la Universidad de Georgetown. Y añadió: "Al mismo tiempo, no creo que las personas quieran vivir en un mundo donde solo se puede decir cosas que las compañías tecnológicas deciden que son 100 por ciento verdaderas. Y creo que esas tensiones son algo con lo que tenemos que vivir ”.
Esta afirmación llega en medio de un conflicto en relación a la decisión de Facebook así como otras plataforma de no quitar un anuncio que hizo la campaña de Trump donde se hace una acusación sobre Joe Biden sobre la cual no hay evidencia concluyente. Todo esto, en el marco de una crisis que podría derivar en un juicio político a Donald Trump.
El conflicto que despertó, una vez más, la polémica sobre el rol de las redes sociales:
El contenido en cuestión es un video de 30 segundos en el que se acusa al ex vicepresidente Joe Biden de prometerle al gobierno de Ucrania “mil millones de dólares por despedir a un fiscal” que investiga a una empresa vinculada a su hijo, Hunter Biden. CNN se negó a transmitir el anuncio porque no hay evidencia que sustente esa acusación. Sin embargo Facebook y otras plataformas o medios como Twitter o YouTube, MSNBC y Fox lo transmitieron.
Desde la campaña de Biden se les pidió a los medios y redes sociales que dejaran de transmitir anuncios políticos con información que consideran falsa o engañosa. La carta donde solicita esto que y publicó The Verge la semana pasada, decía lo siguiente:
“Ninguna compañía debe permitirse ser una herramienta para engañar al público en cualquier tema, y mucho menos en uno tan importante como la salud de nuestra democracia. Una cosa es permitirle al presidente Trump la plataforma para difundir falsedades de su propia cuenta; otra muy distinta es beneficiarse de los anuncios pagados que hacen eco de las mismas mentiras”.
Tanto Twitter como Facebook se negaron a quitar el anuncio. La semana pasada, Katie Harbath, directora del departamento de Política pública para las elecciones globales de Facebook dijo que "cuando un político habla o hace un anuncio, no lo enviamos a verificadores de hechos de terceros”.
Hoy, Mark Zuckerberg dio un discurso en la Universidad de Georgetown donde habló sobre la importancia de proteger la libertad de expresión y en ese contexto abordó el tema de los anuncios políticos que circula en la red social.
"Creemos que las personas deberían poder ver por sí mismas lo que dicen los políticos", dijo Zuckerberg (Photo by ANDREW CABALLERO-REYNOLDS / AFP)
“No verificamos los anuncios políticos. No hacemos esto para ayudar a los políticos, sino porque creemos que las personas deberían poder ver por sí mismas lo que dicen los políticos. Y si el contenido es de interés periodístico, tampoco lo eliminaremos, incluso si entrara en conflicto con muchos de nuestros estándares”, subrayó en la charla.
Su discurso va en sintonía con una publicación que hizo hace menos de un mes Facebook en su blog oficial aclarando las reglas que implementa la plataforma respecto del contenido que publican los políticos en esta red social.
La compañía explicó que, desde hace un tiempo, trabajan con verificadores de datos para ayudar a reducir la propagación de noticias falsas y otros tipos de información errónea que se viraliza, como memes o fotos y videos manipulados.
Pero aclararon que los contenidos que publican los políticos en las redes no son verificados por estos chequeadores de datos porque, argumentan, no es algo que les corresponda hacer a ellos.
En el discurso que dio hoy, Zuckerberg volvió a sostener esta idea. “Sé que muchas personas no están de acuerdo, pero, en general, no creo que sea correcto que una empresa privada censure a los políticos o las noticias, en una democracia. Y no somos un caso atípico aquí. Las otras principales plataformas de Internet y la gran mayoría de los medios también publican estos mismos anuncios”, dijo el creador de la red social.
Zuckerberg testificará ante el Congreso el 23 de octubre para responder preguntas en relación a Libra, la moneda digital que planea lanzar la red social, en asociación con unas cuantas entidades financieras y que Francia ya anunció que bloqueará por considerar que amenaza la “soberanía monetaria de los estados”.
El año pasado, el directivo de Facebook también tuvo que rendir cuentas ante el Congreso de Estados Unidos, a raíz del escándalo de Cambridge Analytica. La red social quedó en la mira luego de que en las elecciones de 2016 se convirtiera en escenario de varias campañas de desinformación. Si bien luego de estos incidentes, la compañía comenzó a implementar varias técnicas para combatir la difusión de fake news (como fue, por ejemplo, la incorporación de verificadores de datos), muchos aún cuestionan la red social porque creen que se necesita instrumentar mayores controles.
La llegada de los deep fakes o simplemente la manipulación de videos como ocurrió con el video de Nancy Pelosi. El clip en cuestión fue ralentizado para que pareciera que estaba borracha. El contenido se viralizó en Facebook y otras redes y volvió a poner sobre el tapete el rol que cumple estos sitios en la difusión de contenido falso o engañoso.
En aquel entonces, la red social se negó a eliminar el video, aunque más tarde agregó una anotación aclarando que era falso. Cuando en la previa de su discurso, el Washington Post le preguntó si el incidente de Pelosi ilustraba una brecha importante en Facebook, Zuckerberg estuvo de acuerdo. “Si algo se convierte en un gran problema, y aún no nos hemos preparado para eso, entonces eso significa que nos demoramos demasiado en prepararnos”, dijo. Y mencionó la importancia de entender las futuras amenazas para poder, eventualmente también ser capaz de responder a ellas a tiempo.
De todos modos, en relación a los anuncios políticos volvió a decir lo que luego mencionó en su discurso y ya se explicó hace un mes en el blog oficial: “En general, en una democracia, creo que las personas deberían poder escuchar por sí mismas lo que dicen los políticos”.
Para muchos demócratas, esta situación podría ser utilizada para difundir información errónea que podría iniciar en las elecciones, tal como los rusos usaron Facebook y otras redes para difundir datos falsos y sembrar disturbios sociales y políticos que llegaron a perjudicar, en su momento, a la candidata Hillary Clinton.
En los últimos meses, Facebook dio a conocer que identificó campañas de desinformación provenientes de países como Irán y China. En este sentido, Zuckerberg mencionó la falta de respuesta inicial del gobierno de Estados Unidos como parte de la razón por la cual el problema ha empeorado desde las últimas elecciones presidenciales.
"Desafortunadamente, Estados Unidos no tuvo una respuesta particularmente fuerte con Rusia después de 2016”. dijo, según cita el Washington Post. Y añadió: “por lo que envió la señal a otros países de que ellos también podrían participar en esto”.
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“La gente se preocupa, y yo también me preocupo profundamente por la erosión de la verdad”, dijo Mark Zuckerberg a The Washington Post este jueves, en el marco de una entrevista que tuvo con el medio, antes de ofrecer un discurso en la Universidad de Georgetown. Y añadió: "Al mismo tiempo, no creo que las personas quieran vivir en un mundo donde solo se puede decir cosas que las compañías tecnológicas deciden que son 100 por ciento verdaderas. Y creo que esas tensiones son algo con lo que tenemos que vivir ”.
Esta afirmación llega en medio de un conflicto en relación a la decisión de Facebook así como otras plataforma de no quitar un anuncio que hizo la campaña de Trump donde se hace una acusación sobre Joe Biden sobre la cual no hay evidencia concluyente. Todo esto, en el marco de una crisis que podría derivar en un juicio político a Donald Trump.
El conflicto que despertó, una vez más, la polémica sobre el rol de las redes sociales:
El contenido en cuestión es un video de 30 segundos en el que se acusa al ex vicepresidente Joe Biden de prometerle al gobierno de Ucrania “mil millones de dólares por despedir a un fiscal” que investiga a una empresa vinculada a su hijo, Hunter Biden. CNN se negó a transmitir el anuncio porque no hay evidencia que sustente esa acusación. Sin embargo Facebook y otras plataformas o medios como Twitter o YouTube, MSNBC y Fox lo transmitieron.
Desde la campaña de Biden se les pidió a los medios y redes sociales que dejaran de transmitir anuncios políticos con información que consideran falsa o engañosa. La carta donde solicita esto que y publicó The Verge la semana pasada, decía lo siguiente:
“Ninguna compañía debe permitirse ser una herramienta para engañar al público en cualquier tema, y mucho menos en uno tan importante como la salud de nuestra democracia. Una cosa es permitirle al presidente Trump la plataforma para difundir falsedades de su propia cuenta; otra muy distinta es beneficiarse de los anuncios pagados que hacen eco de las mismas mentiras”.
Tanto Twitter como Facebook se negaron a quitar el anuncio. La semana pasada, Katie Harbath, directora del departamento de Política pública para las elecciones globales de Facebook dijo que "cuando un político habla o hace un anuncio, no lo enviamos a verificadores de hechos de terceros”.
Hoy, Mark Zuckerberg dio un discurso en la Universidad de Georgetown donde habló sobre la importancia de proteger la libertad de expresión y en ese contexto abordó el tema de los anuncios políticos que circula en la red social.
"Creemos que las personas deberían poder ver por sí mismas lo que dicen los políticos", dijo Zuckerberg (Photo by ANDREW CABALLERO-REYNOLDS / AFP)
“No verificamos los anuncios políticos. No hacemos esto para ayudar a los políticos, sino porque creemos que las personas deberían poder ver por sí mismas lo que dicen los políticos. Y si el contenido es de interés periodístico, tampoco lo eliminaremos, incluso si entrara en conflicto con muchos de nuestros estándares”, subrayó en la charla.
Su discurso va en sintonía con una publicación que hizo hace menos de un mes Facebook en su blog oficial aclarando las reglas que implementa la plataforma respecto del contenido que publican los políticos en esta red social.
La compañía explicó que, desde hace un tiempo, trabajan con verificadores de datos para ayudar a reducir la propagación de noticias falsas y otros tipos de información errónea que se viraliza, como memes o fotos y videos manipulados.
Pero aclararon que los contenidos que publican los políticos en las redes no son verificados por estos chequeadores de datos porque, argumentan, no es algo que les corresponda hacer a ellos.
En el discurso que dio hoy, Zuckerberg volvió a sostener esta idea. “Sé que muchas personas no están de acuerdo, pero, en general, no creo que sea correcto que una empresa privada censure a los políticos o las noticias, en una democracia. Y no somos un caso atípico aquí. Las otras principales plataformas de Internet y la gran mayoría de los medios también publican estos mismos anuncios”, dijo el creador de la red social.
Zuckerberg testificará ante el Congreso el 23 de octubre para responder preguntas en relación a Libra, la moneda digital que planea lanzar la red social, en asociación con unas cuantas entidades financieras y que Francia ya anunció que bloqueará por considerar que amenaza la “soberanía monetaria de los estados”.
El año pasado, el directivo de Facebook también tuvo que rendir cuentas ante el Congreso de Estados Unidos, a raíz del escándalo de Cambridge Analytica. La red social quedó en la mira luego de que en las elecciones de 2016 se convirtiera en escenario de varias campañas de desinformación. Si bien luego de estos incidentes, la compañía comenzó a implementar varias técnicas para combatir la difusión de fake news (como fue, por ejemplo, la incorporación de verificadores de datos), muchos aún cuestionan la red social porque creen que se necesita instrumentar mayores controles.
La llegada de los deep fakes o simplemente la manipulación de videos como ocurrió con el video de Nancy Pelosi. El clip en cuestión fue ralentizado para que pareciera que estaba borracha. El contenido se viralizó en Facebook y otras redes y volvió a poner sobre el tapete el rol que cumple estos sitios en la difusión de contenido falso o engañoso.
En aquel entonces, la red social se negó a eliminar el video, aunque más tarde agregó una anotación aclarando que era falso. Cuando en la previa de su discurso, el Washington Post le preguntó si el incidente de Pelosi ilustraba una brecha importante en Facebook, Zuckerberg estuvo de acuerdo. “Si algo se convierte en un gran problema, y aún no nos hemos preparado para eso, entonces eso significa que nos demoramos demasiado en prepararnos”, dijo. Y mencionó la importancia de entender las futuras amenazas para poder, eventualmente también ser capaz de responder a ellas a tiempo.
De todos modos, en relación a los anuncios políticos volvió a decir lo que luego mencionó en su discurso y ya se explicó hace un mes en el blog oficial: “En general, en una democracia, creo que las personas deberían poder escuchar por sí mismas lo que dicen los políticos”.
Para muchos demócratas, esta situación podría ser utilizada para difundir información errónea que podría iniciar en las elecciones, tal como los rusos usaron Facebook y otras redes para difundir datos falsos y sembrar disturbios sociales y políticos que llegaron a perjudicar, en su momento, a la candidata Hillary Clinton.
En los últimos meses, Facebook dio a conocer que identificó campañas de desinformación provenientes de países como Irán y China. En este sentido, Zuckerberg mencionó la falta de respuesta inicial del gobierno de Estados Unidos como parte de la razón por la cual el problema ha empeorado desde las últimas elecciones presidenciales.
"Desafortunadamente, Estados Unidos no tuvo una respuesta particularmente fuerte con Rusia después de 2016”. dijo, según cita el Washington Post. Y añadió: “por lo que envió la señal a otros países de que ellos también podrían participar en esto”.