Lavarse las manos: el método más eficaz para prevenir enfermedades
Las manos son las principales portadoras de gérmenes por entrar en contacto diario con diferentes objetos. Lavarlas con agua y jabón puede evitar el desarrollo de infecciones graves
Víctor Ingrassia
vingrassia@infobae.com
Los seres humanos entramos en contacto con el mundo la mayor parte del tiempo a través de nuestras manos. A través de ellas se toca y se aprende; se escribe, se come, se juega; se da afecto; y se manipula todo tipo de objetos. Esto también las convierte en las principales portadoras de gérmenes, que pueden causar enfermedades.
Es por ello que el hábito del lavado de manos debe naturalizarse e incorporarse como una necesidad constante y una buena práctica para cuidar la salud individual y de la comunidad: la higiene de manos es una de las maneras más efectivas para prevenir y reducir las infecciones asociadas a la atención sanitaria.
“Es importante que todas las personas de todas las edades se laven las manos y que los niños incorporen desde pequeños estas acciones. La escuela juega un rol importante en el cambio cultural, allí los chicos aprenden, toman conciencia y luego transmiten lo aprendido en su hogar y en su comunidad”, sostuvo en diálogo con Infobae --en el Día Mundial del Lavado de Manos la licenciada Mirian Hinojosa, supervisora en Control de Infecciones de la Clínica Olivos.
Enfermedades que se previenen
“Infecciones como la diarrea, la neumonía, las infecciones cutáneas, infecciones a los ojos o parásitos intestinales se pueden evitar por medio de una buena higiene de manos, ya que la flora microbiana cutánea transitoria de la piel contamina las manos por el contacto con los objetos, secreciones y material fecal”, precisó la licenciada.
Entre los microorganismos patógenos que nombró la experta, se puede mencionar a Escherichia coli, Salmonella spp., Shigella spp., Clostridium perfringens, Giardia lamblia, huevos de Taenia, Norovirus, y el virus de la hepatitis A.
Además, según estudios, el acto de lavarse las manos con agua y jabón puede reducir la incidencia de las tasas de diarrea entre niños menores de 5 años a casi 50% y las infecciones respiratorias a cerca del 25%. Estas enfermedades son la tercera y cuarta causa de muerte en niños menores de 5 años en las Américas y causan el 9,5% de los fallecimientos.
“Una correcta higiene de manos debe demandar 30 segundos si utilizamos alcohol en gel y unos 60 segundos si usamos agua y jabón. No es suficiente lavarse sólo con agua, el jabón, cualquiera sea, es el que permite eliminar la suciedad que contiene los gérmenes”, explicó el doctor Manuel Molina Pico, Director Médico de Vittal.
Y agregó: “Cuando una acción cotidiana se convierte en un hábito generalizado, a nivel global, su poder se multiplica. Eso sucede con el lavado de manos, un gesto simple que puede ser clave para la supervivencia de millones de personas, ya que constituye la manera más efectiva de evitar la propagación de enfermedades y, a su vez, de proteger la salud personal de cada uno. Es por eso que todos debemos generar conciencia: Las manos limpias salvan vidas”.
Molina Pico resaltó que esta rutina es el método más fácil, rápido y económico para prevenir enfermedades diarreicas e infecciones respiratorias agudas, infecciones cutáneas, parásitos que causan la muerte de 3,5 millones de niños y niñas cada año y afectan la salud de millones más, tanto en países desarrollados como en vía de desarrollo.
¿Realmente sabemos cómo lavarnos las manos?
El lavado de manos debe realizarse con agua y jabón, principalmente en momentos críticos, por ejemplo antes de comer y después de usar el inodoro. También se pueden utilizar soluciones o geles alcohólicos, que son desinfectantes de primera elección.
Estos se recomiendan, en particular, en establecimientos sanitarios para los profesionales de la salud donde la higiene de manos es una obligación y no puede ser omitida por ninguna circunstancia.
A la hora de lavarse las manos, es fundamental retirar anillos, relojes y joyas, ya que la piel debajo de los mismos está más densamente colonizada por gérmenes que las áreas libres de la piel en los dedos. Representan una fuente potencial de desarrollo de microorganismos y por lo tanto pueden ser un reservorio para múltiples gérmenes.
Por este motivo, otra cuestión que es importante tener en cuenta es la higiene de los objetos que se manipulan con frecuencia, por ejemplo los teléfonos celulares, y artefactos electrónicos. Es importante adquirir el hábito de limpiarlos y desinfectarlos periódicamente ya que forman parte del entorno, se llevan con uno en todo momento, los niños los tocan e incluso, algunos bebés se los llevan a la boca. Los microorganismos no se ven, pero están ahí, imperceptibles, buscando y pueden causarnos daño.
Sondeo en Argentina sobre el lavado de manos
Un sondeo realizado por TrialPanel, en el marco del Día Mundial del Lavado de Manos, reveló los hábitos de higiene personal más comunes. El estudio fue realizado en octubre sobre una base de 690 casos, hombres y mujeres, mayores de 18 años, de todos los niveles socioeconómicos, residentes en CABA, GBA y principales plazas del país.
Según el sondeo, el 42% de los consultados dice lavarse las manos más de 8 veces al día, un 45% entre 4 y 8 veces al día, y un 13% de 2 a 3 veces por día. ¿En qué ocasiones? Las 3 más mencionadas fueron luego de ir al baño (67%), antes de comer (60%) y al entrar de la calle (56%).
Además, están quienes se lavan en todo momento (45%) y un porcentaje mucho menor (12%) sólo cuando están sucias. Solo 2 de cada 10 encuestados utiliza el mismo jabón para lavarse la cara, las manos y bañarse. Por el contrario, 3 de cada 10 usa uno para cada ocasión; mientras que la mitad tiene uno para la cara y las manos, y otro para bañarse.
Para el aseo de manos el preferido es el jabón líquido (53% de las menciones), seguido por el jabón en barra (38%). Sin embargo, para el momento del baño esto se invierte y el jabón en barra ocupa el primer lugar (con un 75% de las menciones), seguido por el jabón líquido (14%). El jabón blanco tanto para el lavado de manos como para el baño tiene un 5% de menciones.
Con respecto al jabón antibacterial, solo el 11% de los consultados lo usa para todo, y un 32% sólo para las manos. Un 25% manifestó que usaba este tipo de jabones, pero ya no, y entre los motivos por los que no lo hace el primero es por no tener el hábito (42%), el segundo es por el precio (al 39% le resultan caros), y un poco más alejados (15%) están quienes no creen realmente en su efectividad. Por último, (9%) se encuentran los que lo consideran dañino para la piel.
Los 11 pasos para una técnica correcta de lavado de manos con agua y jabón
1. Mojarse las manos.
2. Aplicar suficiente jabón para cubrir toda la mano.
3. Frotar las palmas entre sí.
4. Frotar la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda entrelazando los dedos, y viceversa.
5. Frotar las palmas de las manos entre sí, con los dedos entrelazados.
6. Frotar el dorso de los dedos de una mano contra la palma de la mano opuesta, manteniendo unidos los dedos.
7. Rodeando el pulgar izquierdo con la palma de la mano derecha, frotarlo con un movimiento de rotación, y viceversa.
8. Frotar la punta de los dedos de la mano derecha contra la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación, y viceversa.
9. Enjuagar las manos.
10. Secarlas con una toalla de un solo uso.
11. Utilizar la toalla de papel para cerrar la canilla.
Víctor Ingrassia
vingrassia@infobae.com
Los seres humanos entramos en contacto con el mundo la mayor parte del tiempo a través de nuestras manos. A través de ellas se toca y se aprende; se escribe, se come, se juega; se da afecto; y se manipula todo tipo de objetos. Esto también las convierte en las principales portadoras de gérmenes, que pueden causar enfermedades.
Es por ello que el hábito del lavado de manos debe naturalizarse e incorporarse como una necesidad constante y una buena práctica para cuidar la salud individual y de la comunidad: la higiene de manos es una de las maneras más efectivas para prevenir y reducir las infecciones asociadas a la atención sanitaria.
“Es importante que todas las personas de todas las edades se laven las manos y que los niños incorporen desde pequeños estas acciones. La escuela juega un rol importante en el cambio cultural, allí los chicos aprenden, toman conciencia y luego transmiten lo aprendido en su hogar y en su comunidad”, sostuvo en diálogo con Infobae --en el Día Mundial del Lavado de Manos la licenciada Mirian Hinojosa, supervisora en Control de Infecciones de la Clínica Olivos.
Enfermedades que se previenen
“Infecciones como la diarrea, la neumonía, las infecciones cutáneas, infecciones a los ojos o parásitos intestinales se pueden evitar por medio de una buena higiene de manos, ya que la flora microbiana cutánea transitoria de la piel contamina las manos por el contacto con los objetos, secreciones y material fecal”, precisó la licenciada.
Entre los microorganismos patógenos que nombró la experta, se puede mencionar a Escherichia coli, Salmonella spp., Shigella spp., Clostridium perfringens, Giardia lamblia, huevos de Taenia, Norovirus, y el virus de la hepatitis A.
Además, según estudios, el acto de lavarse las manos con agua y jabón puede reducir la incidencia de las tasas de diarrea entre niños menores de 5 años a casi 50% y las infecciones respiratorias a cerca del 25%. Estas enfermedades son la tercera y cuarta causa de muerte en niños menores de 5 años en las Américas y causan el 9,5% de los fallecimientos.
“Una correcta higiene de manos debe demandar 30 segundos si utilizamos alcohol en gel y unos 60 segundos si usamos agua y jabón. No es suficiente lavarse sólo con agua, el jabón, cualquiera sea, es el que permite eliminar la suciedad que contiene los gérmenes”, explicó el doctor Manuel Molina Pico, Director Médico de Vittal.
Y agregó: “Cuando una acción cotidiana se convierte en un hábito generalizado, a nivel global, su poder se multiplica. Eso sucede con el lavado de manos, un gesto simple que puede ser clave para la supervivencia de millones de personas, ya que constituye la manera más efectiva de evitar la propagación de enfermedades y, a su vez, de proteger la salud personal de cada uno. Es por eso que todos debemos generar conciencia: Las manos limpias salvan vidas”.
Molina Pico resaltó que esta rutina es el método más fácil, rápido y económico para prevenir enfermedades diarreicas e infecciones respiratorias agudas, infecciones cutáneas, parásitos que causan la muerte de 3,5 millones de niños y niñas cada año y afectan la salud de millones más, tanto en países desarrollados como en vía de desarrollo.
¿Realmente sabemos cómo lavarnos las manos?
El lavado de manos debe realizarse con agua y jabón, principalmente en momentos críticos, por ejemplo antes de comer y después de usar el inodoro. También se pueden utilizar soluciones o geles alcohólicos, que son desinfectantes de primera elección.
Estos se recomiendan, en particular, en establecimientos sanitarios para los profesionales de la salud donde la higiene de manos es una obligación y no puede ser omitida por ninguna circunstancia.
A la hora de lavarse las manos, es fundamental retirar anillos, relojes y joyas, ya que la piel debajo de los mismos está más densamente colonizada por gérmenes que las áreas libres de la piel en los dedos. Representan una fuente potencial de desarrollo de microorganismos y por lo tanto pueden ser un reservorio para múltiples gérmenes.
Por este motivo, otra cuestión que es importante tener en cuenta es la higiene de los objetos que se manipulan con frecuencia, por ejemplo los teléfonos celulares, y artefactos electrónicos. Es importante adquirir el hábito de limpiarlos y desinfectarlos periódicamente ya que forman parte del entorno, se llevan con uno en todo momento, los niños los tocan e incluso, algunos bebés se los llevan a la boca. Los microorganismos no se ven, pero están ahí, imperceptibles, buscando y pueden causarnos daño.
Sondeo en Argentina sobre el lavado de manos
Un sondeo realizado por TrialPanel, en el marco del Día Mundial del Lavado de Manos, reveló los hábitos de higiene personal más comunes. El estudio fue realizado en octubre sobre una base de 690 casos, hombres y mujeres, mayores de 18 años, de todos los niveles socioeconómicos, residentes en CABA, GBA y principales plazas del país.
Según el sondeo, el 42% de los consultados dice lavarse las manos más de 8 veces al día, un 45% entre 4 y 8 veces al día, y un 13% de 2 a 3 veces por día. ¿En qué ocasiones? Las 3 más mencionadas fueron luego de ir al baño (67%), antes de comer (60%) y al entrar de la calle (56%).
Además, están quienes se lavan en todo momento (45%) y un porcentaje mucho menor (12%) sólo cuando están sucias. Solo 2 de cada 10 encuestados utiliza el mismo jabón para lavarse la cara, las manos y bañarse. Por el contrario, 3 de cada 10 usa uno para cada ocasión; mientras que la mitad tiene uno para la cara y las manos, y otro para bañarse.
Para el aseo de manos el preferido es el jabón líquido (53% de las menciones), seguido por el jabón en barra (38%). Sin embargo, para el momento del baño esto se invierte y el jabón en barra ocupa el primer lugar (con un 75% de las menciones), seguido por el jabón líquido (14%). El jabón blanco tanto para el lavado de manos como para el baño tiene un 5% de menciones.
Con respecto al jabón antibacterial, solo el 11% de los consultados lo usa para todo, y un 32% sólo para las manos. Un 25% manifestó que usaba este tipo de jabones, pero ya no, y entre los motivos por los que no lo hace el primero es por no tener el hábito (42%), el segundo es por el precio (al 39% le resultan caros), y un poco más alejados (15%) están quienes no creen realmente en su efectividad. Por último, (9%) se encuentran los que lo consideran dañino para la piel.
Los 11 pasos para una técnica correcta de lavado de manos con agua y jabón
1. Mojarse las manos.
2. Aplicar suficiente jabón para cubrir toda la mano.
3. Frotar las palmas entre sí.
4. Frotar la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda entrelazando los dedos, y viceversa.
5. Frotar las palmas de las manos entre sí, con los dedos entrelazados.
6. Frotar el dorso de los dedos de una mano contra la palma de la mano opuesta, manteniendo unidos los dedos.
7. Rodeando el pulgar izquierdo con la palma de la mano derecha, frotarlo con un movimiento de rotación, y viceversa.
8. Frotar la punta de los dedos de la mano derecha contra la palma de la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación, y viceversa.
9. Enjuagar las manos.
10. Secarlas con una toalla de un solo uso.
11. Utilizar la toalla de papel para cerrar la canilla.