La Juve gana con gol de Cristiano y sufrimiento al final
El Bolonia de Mihajlovic dio la cara en Turín, y rozó el empate en el descuento con un testarazo y una tijera de Santander, neutralizados por el larguero y un paradón de Buffon. Ronaldo (diana número 701), Danilo y Pjanic marcaron los goles del partido.
Mirko Calemme
As
La Juventus defendió su liderato tumbando en el Allianz Stadium ante un Bolonia que mostró en Turín el hambre de su técnico, Sinisa Mihajlovic, presente en el banquillo a pesar de estar combatiendo con una leucemia. Antes del comienzo del enfrentamiento, el presidente Andrea Agnelli le entregó a Cristiano Ronaldo una camiseta con el dorsal 700, para celebrar la cifra de goles alcanzada por el exmadridista. Eso sí, el luso tardó muy poco en lograr el número 701: en el minuto 20, aprovechó un fallo de Krejci y con un derechazo batió a Skorupski en su palo.
Los rossoblú, sin embargo, reaccionaron enseguida y poco después pusieron las tablas: Mbaye peinó un centro de Orsolini y Danilo firmó el 1-1 con un potente disparo imparable para Buffon. El Bolonia creció tras el empate, pero en el arranque de la reanudación su zaga le puso en bandeja el 2-1 al campeón de Italia.
Orsolini y Mbaye chocaron y el balón llegó a Cristiano, cuyo remate desviado por Bani se convirtió en una asistencia para Pjanic, que en el corazón del área no falló. Ahí, la Juve empujó para rematar la faena, pero Skorupski neutralizó varios intentos de Higuaín, Ronaldo y Khedira, dejando con vida a los suyos, que hicieron temblar a los bianconeri en los últimos diez minutos.
Orsolini desperdició una enorme ocasión no golpeando el balón en un intento de volea, los de Mihajlovic pidieron un penalti por una mano de De Ligt y, en el descuento, Santander cabeceó al larguero e, instantes después, Buffon neutralizó milagrosamente su tijera, que cerró el partido. Justo como ante el Verona, la Juventus se fue al vestuario salvada por la madera… Pero ahí sigue, una jornada más, en la cima de la Serie A.
Mirko Calemme
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La Juventus defendió su liderato tumbando en el Allianz Stadium ante un Bolonia que mostró en Turín el hambre de su técnico, Sinisa Mihajlovic, presente en el banquillo a pesar de estar combatiendo con una leucemia. Antes del comienzo del enfrentamiento, el presidente Andrea Agnelli le entregó a Cristiano Ronaldo una camiseta con el dorsal 700, para celebrar la cifra de goles alcanzada por el exmadridista. Eso sí, el luso tardó muy poco en lograr el número 701: en el minuto 20, aprovechó un fallo de Krejci y con un derechazo batió a Skorupski en su palo.
Los rossoblú, sin embargo, reaccionaron enseguida y poco después pusieron las tablas: Mbaye peinó un centro de Orsolini y Danilo firmó el 1-1 con un potente disparo imparable para Buffon. El Bolonia creció tras el empate, pero en el arranque de la reanudación su zaga le puso en bandeja el 2-1 al campeón de Italia.
Orsolini y Mbaye chocaron y el balón llegó a Cristiano, cuyo remate desviado por Bani se convirtió en una asistencia para Pjanic, que en el corazón del área no falló. Ahí, la Juve empujó para rematar la faena, pero Skorupski neutralizó varios intentos de Higuaín, Ronaldo y Khedira, dejando con vida a los suyos, que hicieron temblar a los bianconeri en los últimos diez minutos.
Orsolini desperdició una enorme ocasión no golpeando el balón en un intento de volea, los de Mihajlovic pidieron un penalti por una mano de De Ligt y, en el descuento, Santander cabeceó al larguero e, instantes después, Buffon neutralizó milagrosamente su tijera, que cerró el partido. Justo como ante el Verona, la Juventus se fue al vestuario salvada por la madera… Pero ahí sigue, una jornada más, en la cima de la Serie A.