Los rebeldes hutíes anunciaron que dejarán de atacar a Arabia Saudita y esperan una respuesta similar de la coalición árabe
Infobae
Los rebeldes yemeníes chiítas hutíes anunciaron este viernes una tregua en el lanzamiento de ataques contra Arabia Saudita como un gesto de paz, aunque advirtieron de que esperan una respuesta similar de Riad y que responderán a cualquier ataque liderado por los sauditas.
"Anunciamos un alto en los ataques a los territorios del reino de Arabia Saudí con drones y con misiles crucero y balísticos así como cualquier otro ataque", indicó el jefe del Consejo Presidencial hutí, Mahdi al Mashat, en un discurso televisado.
En la intervención, con motivo del quinto aniversario de la toma de la capital del Yemen y la mayoría del noreste del país, Al Mashat indicó que espera una respuesta similar de parte de Arabia Saudita para "detener todo tipo de ataques aéreos en nuestros territorios yemeníes".
"Nos reservamos el derecho de responder en caso de falta de respuesta a esta iniciativa e insistimos que la continuidad de la guerra no le servirá a nadie sino que puede llevar a graves acontecimientos que no queremos", añadió el jefe de los rebeldes, aliados de Irán.
El anuncio de los hutíes se produce en medio de un incremento de la tensión en la región tras el ataque con drones y misiles el pasado día 14 contra dos plantas de la petrolera estatal saudita Aramco.
El ataque fue reivindicado por los hutíes pero Arabia Saudita ha descartado esa opción, asegurando que los proyectiles volaron desde el norte y responsabilizando a Irán la responsabilidad de la acción.
Hoy la coalición árabe atacó cuatro instalaciones hutíes en el norte de Al Hudeida, una zona sobre la que los hutíes y el Gobierno del presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, alcanzaron un acuerdo de tregua en diciembre pasado.
El coronel Turki al Malki, portavoz de la coalición y del Ministerio de Defensa saudí, señaló en un comunicado que las instalaciones bombardeadas eran utilizadas para fabricar embarcaciones no tripuladas y minas marítimas.
"La destrucción de estos emplazamientos hostiles contribuye a preservar la libertad de navegación marítima", indica Al Malki en el comunicado, en el que acusa a "la milicia terrorista hutí" chiíta de lanzar misiles balísticos, drones, botes con trampas explosivas y por control remoto desde esa zona.
La guerra del Yemen estalló a finales de 2014 cuando los hutíes tomaron Saná y expulsaron al presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, quien desde entonces se encuentra exiliado en Riad.
El conflicto tomó una nueva dimensión a principios de 2015 por la implicación de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos al frente de coalición internacional árabe que respalda al Gobierno de Hadi, reconocido por la comunidad internacional.
Los rebeldes yemeníes chiítas hutíes anunciaron este viernes una tregua en el lanzamiento de ataques contra Arabia Saudita como un gesto de paz, aunque advirtieron de que esperan una respuesta similar de Riad y que responderán a cualquier ataque liderado por los sauditas.
"Anunciamos un alto en los ataques a los territorios del reino de Arabia Saudí con drones y con misiles crucero y balísticos así como cualquier otro ataque", indicó el jefe del Consejo Presidencial hutí, Mahdi al Mashat, en un discurso televisado.
En la intervención, con motivo del quinto aniversario de la toma de la capital del Yemen y la mayoría del noreste del país, Al Mashat indicó que espera una respuesta similar de parte de Arabia Saudita para "detener todo tipo de ataques aéreos en nuestros territorios yemeníes".
"Nos reservamos el derecho de responder en caso de falta de respuesta a esta iniciativa e insistimos que la continuidad de la guerra no le servirá a nadie sino que puede llevar a graves acontecimientos que no queremos", añadió el jefe de los rebeldes, aliados de Irán.
El anuncio de los hutíes se produce en medio de un incremento de la tensión en la región tras el ataque con drones y misiles el pasado día 14 contra dos plantas de la petrolera estatal saudita Aramco.
El ataque fue reivindicado por los hutíes pero Arabia Saudita ha descartado esa opción, asegurando que los proyectiles volaron desde el norte y responsabilizando a Irán la responsabilidad de la acción.
Hoy la coalición árabe atacó cuatro instalaciones hutíes en el norte de Al Hudeida, una zona sobre la que los hutíes y el Gobierno del presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, alcanzaron un acuerdo de tregua en diciembre pasado.
El coronel Turki al Malki, portavoz de la coalición y del Ministerio de Defensa saudí, señaló en un comunicado que las instalaciones bombardeadas eran utilizadas para fabricar embarcaciones no tripuladas y minas marítimas.
"La destrucción de estos emplazamientos hostiles contribuye a preservar la libertad de navegación marítima", indica Al Malki en el comunicado, en el que acusa a "la milicia terrorista hutí" chiíta de lanzar misiles balísticos, drones, botes con trampas explosivas y por control remoto desde esa zona.
La guerra del Yemen estalló a finales de 2014 cuando los hutíes tomaron Saná y expulsaron al presidente yemení, Abdo Rabu Mansur Hadi, quien desde entonces se encuentra exiliado en Riad.
El conflicto tomó una nueva dimensión a principios de 2015 por la implicación de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos al frente de coalición internacional árabe que respalda al Gobierno de Hadi, reconocido por la comunidad internacional.