La suerte sonríe al Liverpool, que se reafirma en el liderato
Wijnaldum le dio la victoria con un gol de volea que se le coló entre las piernas al meta del Sheffield United Henderson. Los locales pusieron mucha resistencia.
Alberto Muñoz
As
El Liverpool consiguió sacar adelante su partido contra el Sheffield United, un recién ascendido, gracias a un gol con mucha fortuna de Giorgino Wijnaldum. Los reds, que siguen invictos en la Premier League y cosechan 7 victorias en las 7 jornadas de la competición supieron trabajar para compensar la ilusión de los jugadores del norte de Inglaterra.
Lejos de ser un partido cómodo para el líder, la visita a Sheffield hizo sudar a los de Klopp más que algunos equipos que a priori tenían un mejor cartel. Los de Chris Wilder tuvieron sus ocasiones, consiguiendo convertir el encuentro en un ida y vuelta en el que parecía que podía pasar de todo, pero fueron los reds quienes tuvieron la ocasión más clara de la primera parte con un disparo de Mané al palo.
Aun así, este equipo, que empató con el Chelsea y ganó al Everton, consiguió aguantarle al aún invicto líder de la competición hasta el minuto 70, momento en que Wijnaldum consiguió desequilibrar el marcador con un gol de volea que se le coló entre las piernas a Henderson.
El fallo del portero hizo suspirar al Liverpool, que consigue sumar 21 puntos de 21 posibles y meter, de manera provisional, 8 puntos de distancia a los citizens de Pep Guardiola, que deberá superar una visita complicada a Goodison Park.
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El Liverpool consiguió sacar adelante su partido contra el Sheffield United, un recién ascendido, gracias a un gol con mucha fortuna de Giorgino Wijnaldum. Los reds, que siguen invictos en la Premier League y cosechan 7 victorias en las 7 jornadas de la competición supieron trabajar para compensar la ilusión de los jugadores del norte de Inglaterra.
Lejos de ser un partido cómodo para el líder, la visita a Sheffield hizo sudar a los de Klopp más que algunos equipos que a priori tenían un mejor cartel. Los de Chris Wilder tuvieron sus ocasiones, consiguiendo convertir el encuentro en un ida y vuelta en el que parecía que podía pasar de todo, pero fueron los reds quienes tuvieron la ocasión más clara de la primera parte con un disparo de Mané al palo.
Aun así, este equipo, que empató con el Chelsea y ganó al Everton, consiguió aguantarle al aún invicto líder de la competición hasta el minuto 70, momento en que Wijnaldum consiguió desequilibrar el marcador con un gol de volea que se le coló entre las piernas a Henderson.
El fallo del portero hizo suspirar al Liverpool, que consigue sumar 21 puntos de 21 posibles y meter, de manera provisional, 8 puntos de distancia a los citizens de Pep Guardiola, que deberá superar una visita complicada a Goodison Park.
