Hazard sigue en punto muerto
El belga aún no ha marcado y ni chutó a puerta en el derbi. La temporada pasada, a estas alturas, llevaba seis goles. Zidane sale en su defensa: "Hay que estar con él".
Mario Cortegana
As
El Real Madrid sigue esperando a Eden Hazard. El gran fichaje del verano blanco ha entrado en el otoño sin ser él mismo. El derbi volvió a mostrar su faceta más discreta, sin apenas incidencia relevante en el juego ofensivo madridista: en 77 minutos, ni disparó. Un síntoma preocupante con el belga. En París pasó inadvertido, en el Pizjuán ofreció brotes verdes, pero el segundo gran partido de la temporada, en el Metropolitano, más de lo visto ante el PSG. Ni siquiera el estímulo del duelo contra João Félix le sacó de su atonía.
De hecho, Zidane empieza a tener que acostumbrarse a salir en defensa de Hazard en cada conferencia de Prensa. Tras el derbi, volvió a hacerlo. ¿Qué le falta a Hazard?, se le preguntó. "Le falta poca cosa", respondió el galo. "Hay que estar con él. Ha hecho un buen trabajo. No tuvimos muchas ocasiones pero hay que seguir en esta línea".
El caso es que Hazard no transmite buenas sensaciones. Sólo ha disparado cuatro veces en partido oficial y pierde un balón cada cuatro minutos que juega. Un inicio en punto muerto. Como comparación, a estas alturas de la temporada pasada ya había marcado seis goles en la Premier con el Chelsea, incluido un hat-trick al Cardiff City en el 4-1 de los Blues al equipo galés.
Muy flojo en el derbi
El primer derbi madrileño de Hazard no será recordado por su brillantez. En un partido de dos equipos con más miedo a fallar que ganas de acertar, el belga no llegó a sentirse cómodo en ningún momento con el balón, su especialidad. Ante ese difícil contexto para desplegar su fútbol, respondió ayudando en defensa a Nacho, recuperando en esas misiones dos balones.
En ataque se ofreció, en la primera mitad tratando de conectar mucho con Benzema, pero su voluntad no fue seguida por acierto, lo que le llevó a perder 17 balones. En los 77 minutos que disputó hasta ser cambiado, no chutó ni a puerta ni fuera. Dio 40 pases, con un 77,5% de acierto en ellos, un 78,1% si se mira sólo los que dio en campo contrario. Tuvo nueve duelos por la pelota, de los que salió victorioso en el 44,4%. Se le fichó para este tipo de partidos, pero no para este tipo de actuaciones. Se puso el mono de trabajo, pero se espera más de él. Como en realidad está pasando durante toda la temporada. Hazard sigue en la pista, pero no despega y el Madrid le echa de menos.
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El Real Madrid sigue esperando a Eden Hazard. El gran fichaje del verano blanco ha entrado en el otoño sin ser él mismo. El derbi volvió a mostrar su faceta más discreta, sin apenas incidencia relevante en el juego ofensivo madridista: en 77 minutos, ni disparó. Un síntoma preocupante con el belga. En París pasó inadvertido, en el Pizjuán ofreció brotes verdes, pero el segundo gran partido de la temporada, en el Metropolitano, más de lo visto ante el PSG. Ni siquiera el estímulo del duelo contra João Félix le sacó de su atonía.
De hecho, Zidane empieza a tener que acostumbrarse a salir en defensa de Hazard en cada conferencia de Prensa. Tras el derbi, volvió a hacerlo. ¿Qué le falta a Hazard?, se le preguntó. "Le falta poca cosa", respondió el galo. "Hay que estar con él. Ha hecho un buen trabajo. No tuvimos muchas ocasiones pero hay que seguir en esta línea".
El caso es que Hazard no transmite buenas sensaciones. Sólo ha disparado cuatro veces en partido oficial y pierde un balón cada cuatro minutos que juega. Un inicio en punto muerto. Como comparación, a estas alturas de la temporada pasada ya había marcado seis goles en la Premier con el Chelsea, incluido un hat-trick al Cardiff City en el 4-1 de los Blues al equipo galés.
Muy flojo en el derbi
El primer derbi madrileño de Hazard no será recordado por su brillantez. En un partido de dos equipos con más miedo a fallar que ganas de acertar, el belga no llegó a sentirse cómodo en ningún momento con el balón, su especialidad. Ante ese difícil contexto para desplegar su fútbol, respondió ayudando en defensa a Nacho, recuperando en esas misiones dos balones.
En ataque se ofreció, en la primera mitad tratando de conectar mucho con Benzema, pero su voluntad no fue seguida por acierto, lo que le llevó a perder 17 balones. En los 77 minutos que disputó hasta ser cambiado, no chutó ni a puerta ni fuera. Dio 40 pases, con un 77,5% de acierto en ellos, un 78,1% si se mira sólo los que dio en campo contrario. Tuvo nueve duelos por la pelota, de los que salió victorioso en el 44,4%. Se le fichó para este tipo de partidos, pero no para este tipo de actuaciones. Se puso el mono de trabajo, pero se espera más de él. Como en realidad está pasando durante toda la temporada. Hazard sigue en la pista, pero no despega y el Madrid le echa de menos.
