El rey de Jordania toma partido y apoya a su hermana, la princesa Haya
Abdalá II ha dado un cargo en la embajada de Londres a la exesposa del emir de Dubái
Rafa de Miguel
Londres, El País
El rey Abdalá de Jordania ha nombrado a su hermana, la princesa Haya Bint Al Hussein, jefa adjunta de la misión de la embajada jordana en el Reino Unido, según ha publicado Al Quds, el medio árabe radicado en Londres. La decisión del monarca, firmada el pasado 2 de septiembre, proporcionaría a la princesa una relativa cobertura una vez que se ha conocido el rechazo de las autoridades británicas a concederle asilo. Según la citada página web, la decisión de Abdalá de Jordania se enfrentó a las reticencias del ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi, que consideró que un movimiento así dañaría los intereses de la monarquía hachemita en el Reino Unido.
El Gobierno británico retiene el derecho a aceptar o denegar el nombramiento de la princesa. En el caso de que le diera el visto bueno, Haya gozaría como diplomática de la inmunidad y la protección que garantiza la Convención de Ginebra.
Fue a principios de julio cuando los medios británicos se hicieron eco del caso de la princesa Haya. Lo que empezó como una misteriosa desaparición ha acabado en un juicio en el que están en juego la custodia de sus dos hijos, muchos millones y un posible conflicto diplomático que puede enfrentar a Jordania y a los Emiratos Árabes, con el Reino Unido como escenario. Y es que Haya, nacida princesa jordana, se enfrenta al que ha sido su esposo Mohamed Bin Rashid Al-Maktoum, emir de Dubái.
El proceso también ha vuelto a sacar a la luz los casos de las princesas Latifa y Shamsa, hijas del emir, que intentaron huir del país con años de diferencia. La princesa Haya supuestamente tomó la misma decisión porque conoció detalles inquietantes sobre el tratamiento a la hija de su esposo, Latifa, ahora de 33 años. La marcha de Haya se produjo nueve meses después de la rocambolesca huida de Latifa el pasado marzo, quien denunció en un libro que se escapaba de su casa y de su país porque no tenía libertad para moverse y porque ella y alguna de sus hermanas habían sido víctimas de malos tratos. Su barco fue interceptado cuando se hallaba en aguas internacionales, cerca de India, y fue devuelta a su domicilio.
Haya se marchó del emirato junto a sus dos hijos, Jalila, de 11 años, y Zayed, de siete, y una cantidad aproximada de 35 millones de euros, según informó entonces el diario The Guardian. Decidió refugiarse en Londres, donde posee una residencia valorada en 90 millones de euros cerca del palacio de Kensington en la que se alojaba con frecuencia. Haya y su todavía esposo son grandes aficionados a las carreras de caballos. Fue precisamente el hipódromo de Ascot uno de los últimos escenarios donde se vio junta a la pareja.
Haya de Dubái y Mohamed Bin Rashid Al-Maktoum, con los reyes Abdalá y Rania de Jordania, en 2007. ampliar foto
Haya de Dubái y Mohamed Bin Rashid Al-Maktoum, con los reyes Abdalá y Rania de Jordania, en 2007. CORDON PRESS
Tras semanas escondida, la princesa de 45 años, sexta esposa del emir, fue vista por primera vez tras su separación el 31 de julio en los tribunales de justicia de Londres acompañada de su abogada Fiona Shackleton, que en el pasado se encargó de otros importantes divorcios como el del príncipe Carlos de Inglaterra con Diana Spencer y el del príncipe Andrés con Sarah Ferguson. Por su parte, la afamada y discreta Helen Ward ha sido contratada por el mandatario dubaití.
Una de las primeras peticiones de Haya a la corte ha sido solicitar una orden de alejamiento por violencia machista, también que se proteja a sus hijos para que no se casen en uniones pactadas por su marido. Si el tribunal accede se impedirá que los hijos del matrimonio puedan permanecer con su padre. El emir tiene un total de 23 hijos de sus diferentes esposas.
El emir de Dubái intenta desacreditar a su mujer con un supuesto romance con su guardaespaldas, Russell Flowers, un antiguo soldado de infantería británico de 36 años. Según esta versión Haya habría huido para iniciar una nueva vida junto a este hombre que la acompaña en Londres. Para algunos medios británicos esa relación era un secreto a voces entre el equipo de seguridad de la familia real de la península Arábiga, del que Flowers ha formado parte durante cinco años. Cuando los medios le preguntaron sobre la cercana amistad que le une a la princesa desde hace tres años, y la creencia de que se le nombraría durante el proceso de divorcio, solo dijo que no tenía nada que decir al respecto.
Jordania se había mantenido hasta ahora al margen del conflicto pese a que Haya es hermana del rey jordano. La misma actitud que mantiene Emiratos Árabes Unidos (EAU). Uno de sus oficiales en la embajada de Londres declaró a la agencia Reuters durante el juicio: “El Gobierno de los EAU no tiene la intención de comentar las denuncias sobre la vida privada de las personas”.
Rafa de Miguel
Londres, El País
El rey Abdalá de Jordania ha nombrado a su hermana, la princesa Haya Bint Al Hussein, jefa adjunta de la misión de la embajada jordana en el Reino Unido, según ha publicado Al Quds, el medio árabe radicado en Londres. La decisión del monarca, firmada el pasado 2 de septiembre, proporcionaría a la princesa una relativa cobertura una vez que se ha conocido el rechazo de las autoridades británicas a concederle asilo. Según la citada página web, la decisión de Abdalá de Jordania se enfrentó a las reticencias del ministro de Exteriores jordano, Ayman Safadi, que consideró que un movimiento así dañaría los intereses de la monarquía hachemita en el Reino Unido.
El Gobierno británico retiene el derecho a aceptar o denegar el nombramiento de la princesa. En el caso de que le diera el visto bueno, Haya gozaría como diplomática de la inmunidad y la protección que garantiza la Convención de Ginebra.
Fue a principios de julio cuando los medios británicos se hicieron eco del caso de la princesa Haya. Lo que empezó como una misteriosa desaparición ha acabado en un juicio en el que están en juego la custodia de sus dos hijos, muchos millones y un posible conflicto diplomático que puede enfrentar a Jordania y a los Emiratos Árabes, con el Reino Unido como escenario. Y es que Haya, nacida princesa jordana, se enfrenta al que ha sido su esposo Mohamed Bin Rashid Al-Maktoum, emir de Dubái.
El proceso también ha vuelto a sacar a la luz los casos de las princesas Latifa y Shamsa, hijas del emir, que intentaron huir del país con años de diferencia. La princesa Haya supuestamente tomó la misma decisión porque conoció detalles inquietantes sobre el tratamiento a la hija de su esposo, Latifa, ahora de 33 años. La marcha de Haya se produjo nueve meses después de la rocambolesca huida de Latifa el pasado marzo, quien denunció en un libro que se escapaba de su casa y de su país porque no tenía libertad para moverse y porque ella y alguna de sus hermanas habían sido víctimas de malos tratos. Su barco fue interceptado cuando se hallaba en aguas internacionales, cerca de India, y fue devuelta a su domicilio.
Haya se marchó del emirato junto a sus dos hijos, Jalila, de 11 años, y Zayed, de siete, y una cantidad aproximada de 35 millones de euros, según informó entonces el diario The Guardian. Decidió refugiarse en Londres, donde posee una residencia valorada en 90 millones de euros cerca del palacio de Kensington en la que se alojaba con frecuencia. Haya y su todavía esposo son grandes aficionados a las carreras de caballos. Fue precisamente el hipódromo de Ascot uno de los últimos escenarios donde se vio junta a la pareja.
Haya de Dubái y Mohamed Bin Rashid Al-Maktoum, con los reyes Abdalá y Rania de Jordania, en 2007. ampliar foto
Haya de Dubái y Mohamed Bin Rashid Al-Maktoum, con los reyes Abdalá y Rania de Jordania, en 2007. CORDON PRESS
Tras semanas escondida, la princesa de 45 años, sexta esposa del emir, fue vista por primera vez tras su separación el 31 de julio en los tribunales de justicia de Londres acompañada de su abogada Fiona Shackleton, que en el pasado se encargó de otros importantes divorcios como el del príncipe Carlos de Inglaterra con Diana Spencer y el del príncipe Andrés con Sarah Ferguson. Por su parte, la afamada y discreta Helen Ward ha sido contratada por el mandatario dubaití.
Una de las primeras peticiones de Haya a la corte ha sido solicitar una orden de alejamiento por violencia machista, también que se proteja a sus hijos para que no se casen en uniones pactadas por su marido. Si el tribunal accede se impedirá que los hijos del matrimonio puedan permanecer con su padre. El emir tiene un total de 23 hijos de sus diferentes esposas.
El emir de Dubái intenta desacreditar a su mujer con un supuesto romance con su guardaespaldas, Russell Flowers, un antiguo soldado de infantería británico de 36 años. Según esta versión Haya habría huido para iniciar una nueva vida junto a este hombre que la acompaña en Londres. Para algunos medios británicos esa relación era un secreto a voces entre el equipo de seguridad de la familia real de la península Arábiga, del que Flowers ha formado parte durante cinco años. Cuando los medios le preguntaron sobre la cercana amistad que le une a la princesa desde hace tres años, y la creencia de que se le nombraría durante el proceso de divorcio, solo dijo que no tenía nada que decir al respecto.
Jordania se había mantenido hasta ahora al margen del conflicto pese a que Haya es hermana del rey jordano. La misma actitud que mantiene Emiratos Árabes Unidos (EAU). Uno de sus oficiales en la embajada de Londres declaró a la agencia Reuters durante el juicio: “El Gobierno de los EAU no tiene la intención de comentar las denuncias sobre la vida privada de las personas”.