¿De dónde ha salido este Ferrari?
La pole en Singapur era inesperada, pero el SF90 tenía posibilidades desde sus primeros kilómetros. De viernes a sábado encontraron décimas de 'set-up'.
Jesús Balseiro
As
Que Ferrari estuviese delante en Spa y Monza, pistas de baja carga aerodinámica y muy alta velocidad, entraba dentro de los esquemas en la temporada del Mercedes imbatible, aquel de las ocho primeras carreras. El SF90 fue así desde Bahréin: muy eficiente al aire y con el mejor motor de la parrilla, en línea recta no tiene rival. En curvas rápidas se defiende, pero en las lentas (Albert Park, tercer sector de Barcelona, Hungaroring…) pierde toda su ventaja y se ve superado por Mercedes y Red Bull. Hasta llegar a Singapur.
En Marina Bay, Leclerc firmó una pole altamente inesperada y también Vettel cumplió con la tercera posición, dejando detrás a los dos Red Bull y uno de los Mercedes. ¿Es una sorpresa? No del todo. Porque si bien es cierto que Ferrari ha protagonizado decepciones importantes en circuitos como este (acabaron a media vuelta de los líderes en Hungría), también lo es que en modo clasificación suelen estar a la altura, y en los circuitos urbanos, más. En Bakú, Leclerc aspiraba a todo cuando se estrelló con los muros. En Mónaco, también apuntaba alto el piloto local, pero su equipo le dejó eliminado en Q1 por confiarse con el primer tiempo.
También Vettel se ha encontrado con situaciones similares: su pole en Canadá llegó en una pista de pura potencia, pero en Alemania también se le vio muy cómodo en los entrenamientos libres, capaz de ganar a Mercedes a una vuelta, hasta que sufrió un problema mecánico que le dejó sin intento final. Entonces Leclerc tampoco tuvo al motor de su parte. En resumen: muchos infortunios, errores y problemas en un coche capaz de lograr poles en casi cualquier sitio.
En cualquier caso, los progresos de Maranello también tienen efecto. "En Hungría, en clasificación, nos faltó equilibrio. En unas curvas éramos muy buenos y en otras perdíamos muchísimo. Parece que aquí no estamos perdiendo esas décimas, estamos extrayendo más prestaciones de todo el coche y eso es bueno", opina Vettel. Leclerc, autor de la pole, reconoce que le cuesta mucho "comparar el rendimiento en dos circuitos". El viernes sufrieron con los neumáticos delanteros y se reforzaron desde el alerón. Con la bajada de las temperaturas para el sábado, el rendimiento que han encontrado ha sido satisfactorio. Aunque "hasta la Q2" no se vieron con opciones reales de luchar por una pole position en territorio enemigo.
Todo eso resume una tendencia que ya se ha tratado anteriormente, y que se desliza desde dentro del garaje rojo: las décimas que va encontrando Ferrari durante la temporada suelen venir del 'set-up', del conocimiento sobre los neumáticos y de la gestión del 'pack' que tienen, pero no necesariamente de las mejoras aerodinámicas que pueden implementar. El coche que asombró a todos en Barcelona tenía mucho potencial, no en vano el concepto de su alerón delantero, entonces innovador, se ha ido contagiando en todos los coches de la parrilla, incluido Mercedes. Acertaron, iban por el buen camino. Y poco a poco se está demostrando.
Jesús Balseiro
As
Que Ferrari estuviese delante en Spa y Monza, pistas de baja carga aerodinámica y muy alta velocidad, entraba dentro de los esquemas en la temporada del Mercedes imbatible, aquel de las ocho primeras carreras. El SF90 fue así desde Bahréin: muy eficiente al aire y con el mejor motor de la parrilla, en línea recta no tiene rival. En curvas rápidas se defiende, pero en las lentas (Albert Park, tercer sector de Barcelona, Hungaroring…) pierde toda su ventaja y se ve superado por Mercedes y Red Bull. Hasta llegar a Singapur.
En Marina Bay, Leclerc firmó una pole altamente inesperada y también Vettel cumplió con la tercera posición, dejando detrás a los dos Red Bull y uno de los Mercedes. ¿Es una sorpresa? No del todo. Porque si bien es cierto que Ferrari ha protagonizado decepciones importantes en circuitos como este (acabaron a media vuelta de los líderes en Hungría), también lo es que en modo clasificación suelen estar a la altura, y en los circuitos urbanos, más. En Bakú, Leclerc aspiraba a todo cuando se estrelló con los muros. En Mónaco, también apuntaba alto el piloto local, pero su equipo le dejó eliminado en Q1 por confiarse con el primer tiempo.
También Vettel se ha encontrado con situaciones similares: su pole en Canadá llegó en una pista de pura potencia, pero en Alemania también se le vio muy cómodo en los entrenamientos libres, capaz de ganar a Mercedes a una vuelta, hasta que sufrió un problema mecánico que le dejó sin intento final. Entonces Leclerc tampoco tuvo al motor de su parte. En resumen: muchos infortunios, errores y problemas en un coche capaz de lograr poles en casi cualquier sitio.
En cualquier caso, los progresos de Maranello también tienen efecto. "En Hungría, en clasificación, nos faltó equilibrio. En unas curvas éramos muy buenos y en otras perdíamos muchísimo. Parece que aquí no estamos perdiendo esas décimas, estamos extrayendo más prestaciones de todo el coche y eso es bueno", opina Vettel. Leclerc, autor de la pole, reconoce que le cuesta mucho "comparar el rendimiento en dos circuitos". El viernes sufrieron con los neumáticos delanteros y se reforzaron desde el alerón. Con la bajada de las temperaturas para el sábado, el rendimiento que han encontrado ha sido satisfactorio. Aunque "hasta la Q2" no se vieron con opciones reales de luchar por una pole position en territorio enemigo.
Todo eso resume una tendencia que ya se ha tratado anteriormente, y que se desliza desde dentro del garaje rojo: las décimas que va encontrando Ferrari durante la temporada suelen venir del 'set-up', del conocimiento sobre los neumáticos y de la gestión del 'pack' que tienen, pero no necesariamente de las mejoras aerodinámicas que pueden implementar. El coche que asombró a todos en Barcelona tenía mucho potencial, no en vano el concepto de su alerón delantero, entonces innovador, se ha ido contagiando en todos los coches de la parrilla, incluido Mercedes. Acertaron, iban por el buen camino. Y poco a poco se está demostrando.