Correa vuelve; otro día de clases de defensa para Lodi
Excepto Morata, Simeone pudo trabajar con los 11 futbolistas sin compromisos internacionales.
Patricia Cazón
As
Ocho días después se le quitó a Correa la fiebre y pudo volver a entrenarse con el Atleti. Será su equipo, no hay otra, una vez cerrado el mercado hace dos días y con éste la puerta que podía llevarle a Milán. Es el argentino la alta con la que el Cholo se ejercito en el Cerro por la mañana en un día de doble sesión. La primera parte de los ejercicios los hizo a medias, unos sí (equilibrio con el Profe), otros no (explosividad en carrera). La segunda parte, en cambio, la completó entera: era de sólo rodar el balón. Partidillo y remates a puerta.
El alta de Correa elevó a 11 el número de futbolistas del primer equipo con los que Simeone puede trabajar en este parón, un lujo: hace unos meses ese número era cinco, a cuatro, convirtiendo los parones en, casi, entrenamientos en la intimidad. Adán, Arias, Felipe, Lodi, Thomas, Koke, Llorente, Correa, Vitolo, Saponjic y Costa, además de Riquelme y Manu Sanchez. Trabajaron, sobre todo, la definición. En un ejercicio con disparos a puerta con una pierna u otra y, en otro, buscando la ruptura del extremo y el gol tras el centro a los delanteros. Hubo aplausos para Arias, golazo, se escuchaba alto el bramido de Costa cada vez que alertaba una ocasión.
La sesión finalizó con una clase particular: a Lodi y a Manu Sanchez, los dos únicos laterales izquierdos que tiene el Atleti en su plantilla. El brasileño no había dejado de llevarse elogios durante la sesión por sus controles y sus centros, de tan medidos, perfectos, destacó también en la media hora de clase particular impartida por el Mono Burgos, bajo la atenta mirada del Cholo. El ejercicio consistía en aguantar la jugada, robarle el balón al extremo (Riquelme), “sacarle de la pista”. Duro media hora, brilló el brasileño, un puñal en ataque y cada vez mejor en defensa. Tras tantas clases como está.
Patricia Cazón
As
Ocho días después se le quitó a Correa la fiebre y pudo volver a entrenarse con el Atleti. Será su equipo, no hay otra, una vez cerrado el mercado hace dos días y con éste la puerta que podía llevarle a Milán. Es el argentino la alta con la que el Cholo se ejercito en el Cerro por la mañana en un día de doble sesión. La primera parte de los ejercicios los hizo a medias, unos sí (equilibrio con el Profe), otros no (explosividad en carrera). La segunda parte, en cambio, la completó entera: era de sólo rodar el balón. Partidillo y remates a puerta.
El alta de Correa elevó a 11 el número de futbolistas del primer equipo con los que Simeone puede trabajar en este parón, un lujo: hace unos meses ese número era cinco, a cuatro, convirtiendo los parones en, casi, entrenamientos en la intimidad. Adán, Arias, Felipe, Lodi, Thomas, Koke, Llorente, Correa, Vitolo, Saponjic y Costa, además de Riquelme y Manu Sanchez. Trabajaron, sobre todo, la definición. En un ejercicio con disparos a puerta con una pierna u otra y, en otro, buscando la ruptura del extremo y el gol tras el centro a los delanteros. Hubo aplausos para Arias, golazo, se escuchaba alto el bramido de Costa cada vez que alertaba una ocasión.
La sesión finalizó con una clase particular: a Lodi y a Manu Sanchez, los dos únicos laterales izquierdos que tiene el Atleti en su plantilla. El brasileño no había dejado de llevarse elogios durante la sesión por sus controles y sus centros, de tan medidos, perfectos, destacó también en la media hora de clase particular impartida por el Mono Burgos, bajo la atenta mirada del Cholo. El ejercicio consistía en aguantar la jugada, robarle el balón al extremo (Riquelme), “sacarle de la pista”. Duro media hora, brilló el brasileño, un puñal en ataque y cada vez mejor en defensa. Tras tantas clases como está.