Orozco hace el ridículo: hace la señal del VAR y pita penalti en un torneo en el que no hay VAR
Bolivia deja una de las imágenes más curiosas vistas en torno al uso del VAR en el partido entre Always Ready y Bolívar. Los locales fallaron el lanzamiento.
Juan Lopesino
As
Bolivia deja una de las imágenes más curiosas vistas en torno al uso del VAR se vio en el partido entre Always Ready y Bolívar. Los locales fallaron el lanzamiento.
Raúl Orosco, colegiado que dirigía el partido entre Always Ready y Bolívar, en el campeonato boliviano, dejó una imagen curiosa y polémica a partes iguales cuando señaló un penalti después de realizar el gesto del VAR. Algo insólito porque en Bolivia aún no se usa el videoarbitraje para corregir este tipo de situaciones.
Se alcanzaba el minuto 95 de partido cuando un lance en el área de Bolívar fue reclamado por el conjunto local como posible penalti. El colegiado Orosco acudió a la banda y después de realizar algunas consultas regresó para mostrar el gesto del VAR, llevarse la mano a la oreja y señalar el punto de penalti.
Los jugadores y el cuerpo técnico de Bolívar no lo podían creer pero para satisfacción suya el lanzamiento fue al poste y acto seguido se señaló el pitido final. Tras ello, una multitudinaria tangana se formó en la cancha entre los dos equipos.
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Bolivia deja una de las imágenes más curiosas vistas en torno al uso del VAR se vio en el partido entre Always Ready y Bolívar. Los locales fallaron el lanzamiento.
Raúl Orosco, colegiado que dirigía el partido entre Always Ready y Bolívar, en el campeonato boliviano, dejó una imagen curiosa y polémica a partes iguales cuando señaló un penalti después de realizar el gesto del VAR. Algo insólito porque en Bolivia aún no se usa el videoarbitraje para corregir este tipo de situaciones.
Se alcanzaba el minuto 95 de partido cuando un lance en el área de Bolívar fue reclamado por el conjunto local como posible penalti. El colegiado Orosco acudió a la banda y después de realizar algunas consultas regresó para mostrar el gesto del VAR, llevarse la mano a la oreja y señalar el punto de penalti.
Los jugadores y el cuerpo técnico de Bolívar no lo podían creer pero para satisfacción suya el lanzamiento fue al poste y acto seguido se señaló el pitido final. Tras ello, una multitudinaria tangana se formó en la cancha entre los dos equipos.
