Capaldo ya es fundamental para Gustavo Alfaro en Boca
El pibe de las inferiores se ha convertido en una pieza clave para Alfaro desde el comienzo del semestre. Fue de los mejores ante Liga de Quito.
Jorge Castro
As
En los últimos años ha habido pocas irrupciones en Boca Juniors tan positivas como la que está viviendo Nicolás Capaldo (20 años). El mediocampista se ha convertido en una pieza poco menos que fundamental para Gustavo Alfaro, que le ha dado la alternativa en los partidos más importantes del semestre. Ha formado dupla de pivotes junto a Iván Marcone en los últimos tres duelos de Copa Libertadores (dos ante Athletico Paranaense y uno ante Liga de Quito), y, por rendimiento mostrado, parece impensable verle salir del once para la vuelta ante LDU.
Es sorprendente como de la noche a la mañana ha pasado de ser un pieza terciaria a un fijo en el once. Debutó ante Defensa y Justicia el 25 de febrero de este año. Desde entonces hasta el parón de invierno sólo disputó 218 minutos, y la mayor parte de ellos en Copa Superliga. Sin embargo, desde el regreso de la competición, en apenas un mes ya ha jugado 270 (los 90 minutos de tres partidos). Esto contando que ha descansado en dos de ellos para llegar en plena forma a los duelos de Libertadores.
El gran valor de Capaldo está en la intensidad y recorrido que aporta en la mitad de la cancha. Tanto Marcone como De Rossi son jugadores más posicionales, que por cuestiones físicas ya no pueden abarcar tanto terreno de juego como antes. Ante LDU volvió a dar una clase magistral tanto en el aspecto táctico como técnico, jugando de forma aseada y anticipando muchos de los pases rivales. A esto hay que sumarle la capacidad para llegar al último tercio de campo con peligro. El jugador formado en las inferiores xeneizes le ha ganado el puesto a Jorman Campuzano y repetirá en el once para la vuelta en La Bombonera.
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En los últimos años ha habido pocas irrupciones en Boca Juniors tan positivas como la que está viviendo Nicolás Capaldo (20 años). El mediocampista se ha convertido en una pieza poco menos que fundamental para Gustavo Alfaro, que le ha dado la alternativa en los partidos más importantes del semestre. Ha formado dupla de pivotes junto a Iván Marcone en los últimos tres duelos de Copa Libertadores (dos ante Athletico Paranaense y uno ante Liga de Quito), y, por rendimiento mostrado, parece impensable verle salir del once para la vuelta ante LDU.
Es sorprendente como de la noche a la mañana ha pasado de ser un pieza terciaria a un fijo en el once. Debutó ante Defensa y Justicia el 25 de febrero de este año. Desde entonces hasta el parón de invierno sólo disputó 218 minutos, y la mayor parte de ellos en Copa Superliga. Sin embargo, desde el regreso de la competición, en apenas un mes ya ha jugado 270 (los 90 minutos de tres partidos). Esto contando que ha descansado en dos de ellos para llegar en plena forma a los duelos de Libertadores.
El gran valor de Capaldo está en la intensidad y recorrido que aporta en la mitad de la cancha. Tanto Marcone como De Rossi son jugadores más posicionales, que por cuestiones físicas ya no pueden abarcar tanto terreno de juego como antes. Ante LDU volvió a dar una clase magistral tanto en el aspecto táctico como técnico, jugando de forma aseada y anticipando muchos de los pases rivales. A esto hay que sumarle la capacidad para llegar al último tercio de campo con peligro. El jugador formado en las inferiores xeneizes le ha ganado el puesto a Jorman Campuzano y repetirá en el once para la vuelta en La Bombonera.
