1x1 del Atlético: dos zarpazos de Joao Félix, delante de Cristiano
El portugués se exhibió ante su compatriota en un ejercicio de calidad y de precisón. El Atlético gestionó los momentos de agobio para salir victorioso en Solna.
Jorge García
As
Oblak. Respondió de forma felina a un remate de Chiellini a la salida de un córner. En el tanto de Khedira poco pudo hacer, sin visión y a contrapié. Respondió sin errores al dominio aéreo italiano en varios saques de esquina bien sacados. Los postes le echaron una mano en dos ocasiones, antes de que Dybala la pusiera a prueba dos veces.
Trippier. Cristiano salió con la intención de hacerle sufrir con su envergadura, pero el primer golpe lo asestó el inglés con un centro sobre Félix que terminó en gol. Las acometidas del 7 bianconero no le ponían nervioso, aguantando cada bicicleta con serenidad. En los centros laterales sí acusó cierta debilidad.
Savic. Se encargó de Higuaín y no le amenazo en exceso. La nueva regla en el saque de puerta le da un respiro a la hora de sacar el balón con menos apreturas. Parece que partirá como titular, pero debe crecer en consistencia para mantener ese estatus.
Giménez. Intuitivo y bien colocado para desarmar varios centros laterales con peligro. El Atlético sufrió por arriba, pero nada queda en su debe ante un rival cuya estatura media pasa del 1,80. Le puede costar adaptarse al perfil izquierdo, pero tira de jerarquía. Poco a poco tiene que ir cogiendo el ritmo, pero no fue una mala puesta en escena la suya.
Lodi. Instalado en campo rival desde el inicio, buscando el centro a la primera ocasión. Buen control, asegurando el balón en la salida, recordando a esas progresiones de Filipe con pelota que servían para hacer salir al equipo. Por el contrario, la Juventus buscaba su espalda para armar las contras.
Koke. En el 22’ tuvo el gol en sus botas, pero Alex Sandro se cruzó salvador en la línea. Hasta entonces le había costado descifrar a Douglas Costa, que se instalaba con éxito en el intervalo entre él y Saúl para hacer daño. Simeone le fue moviendo por toda la medular para ayudar donde veía debilidad en las fases de mayor agobio y poco a poco fue serenando al equipo.
Llorente. Alguna entrega errática elevó el nivel de tensión en el banquillo rojiblanco durante el primer tiempo, debe cuidarlo, sobre todo ante equipos que castigan los errores y cuyo control de la pelota no da posibilidad para el respiro, como es la Juventus.
Saúl. Douglas Costa le buscó las vueltas a su espalda en el primer tiempo y sufrió mucho también con la habilidad en corto del brasileño. En el segundo tiempo entendió bien el juego de ayudas a Lodi, para cerrarle la salida por dentro, y padeció menos, lo que le permitió expresarse más con balón sin tanto agobio.
Lemar. Arrancó como segundo punta y mejoró cuando aumentó su relación con la pelota. Para eso bajó unos metros a recibir y así fue como conectó con Joao Félix con un pase delicioso por encima de De Ligt y de Chiellini. Ya tiene la verticalidad metida en la cabeza y se le ve muy implicado.
Joao Félix. Dio en la diana en prácticamente el primer balón que recibió para hacer daño. Llegó al área con personalidad y remató como un nueve. De crack. Un rato después se superó al ajustar su carrera al centro vertical de Lemar y rematar sobre la marcha para hacer el segundo. Dos puñaladas ante un gigante como la Juventus.
Morata. Solidario en la presión pero sin apenas opciones de remate en el primer tiempo. Chiellini le controló bien de espaldas a portería sin darle margen para que permitiera la salida de su equipo.
Sustituciones
Thomas. Entró al descanso por Marcos Llorente. Certero al quite, oportuno a la hora de frenar alguna contra peligrosa. En posesión interpretó el juego sin urgencias y con sentido.
Diego Costa. Entró frío, como si le faltara la chispa para activarse. La refriega con Demiral pudo activarle, pero también costarle caro. Fue sustituido.
Correa. Si su futuro está en el aire, no lo parece. El argentino se entrega de forma encomiable. La madrugó un balón a Bonucci que pudo sentenciar el choque.
Arias. Debutaba también. El colombiano vuelve a comenzar como la temporada pasada. Tiene que ganarse el puesto porque Trippier está por delante. Parece que le va a costar.
Herrera. Trabajador, sabe que parte en desventaja y se aplica mucho en cada minuto que juega. Era la primera vez que jugaba junto a Thomas y deben adaptarse.
Hermoso. Atento a Bernardeschi por el costado izquierdo.
Felipe. Le dio más vigor al Atlético en el juego aéreo y se las tuvo con Mandzukic.
Vitolo. Correoso, pero con menor acierto que en partidos anteriores. Vio la tarjeta por una dura entrada sobre Dybala.
Manu Sánchez. Con desparpajo, moviéndose muy bien pegado a la línea de fondo y jugando con categoría ante Bernardeschi. El Cholo lo celebraba.
Riquelme. Casi se la arma a Buffon con un derechazo que buscaba la escuadra. Conducción y disparo como si llevara 50 partidos en Primera.
Saponjic. Entró casi con el tiempo cumplido y derrochó ganas.
As
Oblak. Respondió de forma felina a un remate de Chiellini a la salida de un córner. En el tanto de Khedira poco pudo hacer, sin visión y a contrapié. Respondió sin errores al dominio aéreo italiano en varios saques de esquina bien sacados. Los postes le echaron una mano en dos ocasiones, antes de que Dybala la pusiera a prueba dos veces.
Trippier. Cristiano salió con la intención de hacerle sufrir con su envergadura, pero el primer golpe lo asestó el inglés con un centro sobre Félix que terminó en gol. Las acometidas del 7 bianconero no le ponían nervioso, aguantando cada bicicleta con serenidad. En los centros laterales sí acusó cierta debilidad.
Savic. Se encargó de Higuaín y no le amenazo en exceso. La nueva regla en el saque de puerta le da un respiro a la hora de sacar el balón con menos apreturas. Parece que partirá como titular, pero debe crecer en consistencia para mantener ese estatus.
Giménez. Intuitivo y bien colocado para desarmar varios centros laterales con peligro. El Atlético sufrió por arriba, pero nada queda en su debe ante un rival cuya estatura media pasa del 1,80. Le puede costar adaptarse al perfil izquierdo, pero tira de jerarquía. Poco a poco tiene que ir cogiendo el ritmo, pero no fue una mala puesta en escena la suya.
Lodi. Instalado en campo rival desde el inicio, buscando el centro a la primera ocasión. Buen control, asegurando el balón en la salida, recordando a esas progresiones de Filipe con pelota que servían para hacer salir al equipo. Por el contrario, la Juventus buscaba su espalda para armar las contras.
Koke. En el 22’ tuvo el gol en sus botas, pero Alex Sandro se cruzó salvador en la línea. Hasta entonces le había costado descifrar a Douglas Costa, que se instalaba con éxito en el intervalo entre él y Saúl para hacer daño. Simeone le fue moviendo por toda la medular para ayudar donde veía debilidad en las fases de mayor agobio y poco a poco fue serenando al equipo.
Llorente. Alguna entrega errática elevó el nivel de tensión en el banquillo rojiblanco durante el primer tiempo, debe cuidarlo, sobre todo ante equipos que castigan los errores y cuyo control de la pelota no da posibilidad para el respiro, como es la Juventus.
Saúl. Douglas Costa le buscó las vueltas a su espalda en el primer tiempo y sufrió mucho también con la habilidad en corto del brasileño. En el segundo tiempo entendió bien el juego de ayudas a Lodi, para cerrarle la salida por dentro, y padeció menos, lo que le permitió expresarse más con balón sin tanto agobio.
Lemar. Arrancó como segundo punta y mejoró cuando aumentó su relación con la pelota. Para eso bajó unos metros a recibir y así fue como conectó con Joao Félix con un pase delicioso por encima de De Ligt y de Chiellini. Ya tiene la verticalidad metida en la cabeza y se le ve muy implicado.
Joao Félix. Dio en la diana en prácticamente el primer balón que recibió para hacer daño. Llegó al área con personalidad y remató como un nueve. De crack. Un rato después se superó al ajustar su carrera al centro vertical de Lemar y rematar sobre la marcha para hacer el segundo. Dos puñaladas ante un gigante como la Juventus.
Morata. Solidario en la presión pero sin apenas opciones de remate en el primer tiempo. Chiellini le controló bien de espaldas a portería sin darle margen para que permitiera la salida de su equipo.
Sustituciones
Thomas. Entró al descanso por Marcos Llorente. Certero al quite, oportuno a la hora de frenar alguna contra peligrosa. En posesión interpretó el juego sin urgencias y con sentido.
Diego Costa. Entró frío, como si le faltara la chispa para activarse. La refriega con Demiral pudo activarle, pero también costarle caro. Fue sustituido.
Correa. Si su futuro está en el aire, no lo parece. El argentino se entrega de forma encomiable. La madrugó un balón a Bonucci que pudo sentenciar el choque.
Arias. Debutaba también. El colombiano vuelve a comenzar como la temporada pasada. Tiene que ganarse el puesto porque Trippier está por delante. Parece que le va a costar.
Herrera. Trabajador, sabe que parte en desventaja y se aplica mucho en cada minuto que juega. Era la primera vez que jugaba junto a Thomas y deben adaptarse.
Hermoso. Atento a Bernardeschi por el costado izquierdo.
Felipe. Le dio más vigor al Atlético en el juego aéreo y se las tuvo con Mandzukic.
Vitolo. Correoso, pero con menor acierto que en partidos anteriores. Vio la tarjeta por una dura entrada sobre Dybala.
Manu Sánchez. Con desparpajo, moviéndose muy bien pegado a la línea de fondo y jugando con categoría ante Bernardeschi. El Cholo lo celebraba.
Riquelme. Casi se la arma a Buffon con un derechazo que buscaba la escuadra. Conducción y disparo como si llevara 50 partidos en Primera.
Saponjic. Entró casi con el tiempo cumplido y derrochó ganas.
