Todo sobre el lío Icardi: Juve y Nápoles, a la espera
El Inter quiere desprenderse del argentino, que le interesa a la Vecchia Signora y a los azzurri. Conte ya tiene listos los reemplazos: Lukaku y Dzeko.
Mirko Calemme
As
Desde que el Inter, en febrero, decidió quitarle el brazalete de capitán, el futuro de Mauro Icardi es todo un misterio. El punta estuvo casi dos meses sin jugar por aquel ‘castigo’ (debido a supuestos problemas en el vestuario) y luego volvió al campo, marcando solo dos goles en nueve partidos.
Antonio Conte quiere que sean sus últimos de nerazzurro: el nuevo técnico tiene prisa para desprenderse del argentino, que remplazaría con Dzeko y Lukaku. En teoría, hasta el 15 de julio, los clubes extranjeros podrían utilizar una cláusula de rescisión de 115 millones, pero va a ser muy difícil que llegue una oferta de este tipo.
Todo el mundo sabe que la prioridad del Inter es vender al punta y su precio podría bajar casi de la mitad, con la Juventus que lleva tiempo estando muy interesada a la situación. Paratici reconoció hace meses haber pensado en el argentino antes de fichar a Cristiano y el director deportivo bianconero hace dos días estuvo en Ibiza, coincidiendo con Wanda Nara. No hay certezas sobre un encuentro entre la mujer y agente del delantero y el directivo, pero la “coincidencia”, obviamente, disparó los rumores.
Icardi, por su parte, preferiría quedarse en el Inter y lo ha manifestado varias veces: su idea es que quede muy claro que todo lo que ocurra con su futuro haya sido por decisión del club y no suya. Seguir en Italia es una posibilidad que le interesa y la Vecchia Signora, pronto, podría ofrecérsela.
Antes de comenzar una verdadera negociación, no obstante, la Juve tiene que vender a Higuaín y Mandžukic, y al Nápoles le pasa algo parecido. Ya hace tres años De Laurentiis intentó hacerse con ‘Maurito’ y mantuvo varios contactos con Wanda Nara: en estas semanas los azzurri están cerrando la operación James Rodríguez con el Real Madrid, pero también piensan en fichar a un punta como alternativa a Milik.
Icardi le gusta a la directiva y a Ancelotti, pero para hacerle hueco debería marcharse otro delantero. Podría ser el capitán, Lorenzo Insigne, que antes de la llegada de Conte le interesaba justo al Inter y por el que, a día de hoy, no han llegado ofertas concretas (aunque el Atlético de Madrid también manifestó su interés).
Dentro de dos días, mientras tanto, los nerazzurri comenzarán la pretemporada en Lugano y el argentino tendrá que acudir como todos sus compañeros: va a ser una situación extraña, complicada y es imposible excluir sorpresas. El final de un culebrón comenzado hace cinco meses todavía no está cerca.
Mirko Calemme
As
Desde que el Inter, en febrero, decidió quitarle el brazalete de capitán, el futuro de Mauro Icardi es todo un misterio. El punta estuvo casi dos meses sin jugar por aquel ‘castigo’ (debido a supuestos problemas en el vestuario) y luego volvió al campo, marcando solo dos goles en nueve partidos.
Antonio Conte quiere que sean sus últimos de nerazzurro: el nuevo técnico tiene prisa para desprenderse del argentino, que remplazaría con Dzeko y Lukaku. En teoría, hasta el 15 de julio, los clubes extranjeros podrían utilizar una cláusula de rescisión de 115 millones, pero va a ser muy difícil que llegue una oferta de este tipo.
Todo el mundo sabe que la prioridad del Inter es vender al punta y su precio podría bajar casi de la mitad, con la Juventus que lleva tiempo estando muy interesada a la situación. Paratici reconoció hace meses haber pensado en el argentino antes de fichar a Cristiano y el director deportivo bianconero hace dos días estuvo en Ibiza, coincidiendo con Wanda Nara. No hay certezas sobre un encuentro entre la mujer y agente del delantero y el directivo, pero la “coincidencia”, obviamente, disparó los rumores.
Icardi, por su parte, preferiría quedarse en el Inter y lo ha manifestado varias veces: su idea es que quede muy claro que todo lo que ocurra con su futuro haya sido por decisión del club y no suya. Seguir en Italia es una posibilidad que le interesa y la Vecchia Signora, pronto, podría ofrecérsela.
Antes de comenzar una verdadera negociación, no obstante, la Juve tiene que vender a Higuaín y Mandžukic, y al Nápoles le pasa algo parecido. Ya hace tres años De Laurentiis intentó hacerse con ‘Maurito’ y mantuvo varios contactos con Wanda Nara: en estas semanas los azzurri están cerrando la operación James Rodríguez con el Real Madrid, pero también piensan en fichar a un punta como alternativa a Milik.
Icardi le gusta a la directiva y a Ancelotti, pero para hacerle hueco debería marcharse otro delantero. Podría ser el capitán, Lorenzo Insigne, que antes de la llegada de Conte le interesaba justo al Inter y por el que, a día de hoy, no han llegado ofertas concretas (aunque el Atlético de Madrid también manifestó su interés).
Dentro de dos días, mientras tanto, los nerazzurri comenzarán la pretemporada en Lugano y el argentino tendrá que acudir como todos sus compañeros: va a ser una situación extraña, complicada y es imposible excluir sorpresas. El final de un culebrón comenzado hace cinco meses todavía no está cerca.