Neymar: empieza el juego del despiste
Brasil, AS
Una de las máximas en las negociaciones futbolísticas es la que reza que si hay confusión es que algo pasa. Y con Neymar y el Barça hace tiempo que se cuece algo, otra cosa es que llegue a buen puerto, y que la ceremonia de la confusión está llegando a su punto de ebullición. El despiste de los rumores y desmentidos ya se ha instalado en el día a día.
De hecho, comenzó la noche del martes cuando la web brasileña Esporte Interactivo, tradicionalmente muy bien informada sobre las actividades de la estrella, anunció que para hoy martes estaba convocada una reunión en Barcelona entre representantes del club blaugrana, el padre del jugador (persona no demasiado bien vista en los despachos del Camp Nou) y André Cury, el empleado que cuida al mismo tiempo de los intereses del Barcelona en Brasil y de los Neymar por todo el mundo, además de amigo personal de la familia.
Horas después de este anuncio, el padre del jugador desmintió esta información asegurando que no pensaba estar en Barcelona sino que estaría en Brasil y que únicamente regresaría a Europa cuando tuviera que acompañar a su hijo a París para incorporarse de nuevo a los entrenamientos del PSG. Así de paso desmentía la noticia que algunos medios adelantaban respecto a la intención del delantero de declararse en rebeldía y dejar plantado a su equipo el primer día de trabajo en la capital francesa.
Por si fuera poco, el propio jugador aseguró que esta madrugada (hora española) estará en las gradas del Mineirao para apoyar a sus compañeros en la semifinal del partido semifinal de la Copa América que le enfrenta a Argentina.
No descarten que, según como vaya el resultado, también se encuentre con su amigo Leo Messi, uno de los principales bastiones en su intento de volver a Barcelona. Abróchense los cinturones que se pueden marear.
Una de las máximas en las negociaciones futbolísticas es la que reza que si hay confusión es que algo pasa. Y con Neymar y el Barça hace tiempo que se cuece algo, otra cosa es que llegue a buen puerto, y que la ceremonia de la confusión está llegando a su punto de ebullición. El despiste de los rumores y desmentidos ya se ha instalado en el día a día.
De hecho, comenzó la noche del martes cuando la web brasileña Esporte Interactivo, tradicionalmente muy bien informada sobre las actividades de la estrella, anunció que para hoy martes estaba convocada una reunión en Barcelona entre representantes del club blaugrana, el padre del jugador (persona no demasiado bien vista en los despachos del Camp Nou) y André Cury, el empleado que cuida al mismo tiempo de los intereses del Barcelona en Brasil y de los Neymar por todo el mundo, además de amigo personal de la familia.
Horas después de este anuncio, el padre del jugador desmintió esta información asegurando que no pensaba estar en Barcelona sino que estaría en Brasil y que únicamente regresaría a Europa cuando tuviera que acompañar a su hijo a París para incorporarse de nuevo a los entrenamientos del PSG. Así de paso desmentía la noticia que algunos medios adelantaban respecto a la intención del delantero de declararse en rebeldía y dejar plantado a su equipo el primer día de trabajo en la capital francesa.
Por si fuera poco, el propio jugador aseguró que esta madrugada (hora española) estará en las gradas del Mineirao para apoyar a sus compañeros en la semifinal del partido semifinal de la Copa América que le enfrenta a Argentina.
No descarten que, según como vaya el resultado, también se encuentre con su amigo Leo Messi, uno de los principales bastiones en su intento de volver a Barcelona. Abróchense los cinturones que se pueden marear.