Scaloni arremete de nuevo contra el estado del campo tras pasar a cuartos
Porto Alegre, EFE
El seleccionador de Argentina, Lionel Scaloni, volvió este domingo a quejarse del estado del terreno de juego en la Copa América, después de haberse clasificado para los cuartos de final con un triunfo ante Catar por 0-2, con goles de Lautaro Martínez y Sergio Agüero.
Scaloni afirmó en conferencia de prensa que la cancha del estadio Arena do Gremio, de Porto Alegre, donde ganó este domingo Argentina, estaba en malas condiciones como el Arena Fonte Nova de Salvador, donde la Albiceleste perdió por 2-0 contra Colombia en la primera jornada del campeonato.
"Recalco lo de la cancha. Cuando lo dije, me criticaron. No, no se puede jugar en esa cancha. Lo digo ahora que ganamos", señaló Scaloni.
El técnico argentino explicó que Argentina está en una etapa de transición y recordó que en este partido, donde la selección estaba obligada a ganar para no quedar eliminada en la primera fase, había muchos jugadores menores de 25 años.
Por ello pidió a los periodistas y a los aficionados que no se les someta a tanta presión a los futbolistas del combinado argentino porque cuando están relajados es cuando demuestran su mejor fútbol.
"Parece que los jugadores tienen que salir a la guerra en cada partido, pero con esa presión es complicado. El mensaje tiene que ser que mientras se juegue la Copa todos tiremos hacia el mismo lado", pidió Scaloni.
"Tiene que haber unanimidad. Es el mensaje que quisiera dar humildemente porque soy el que en este momento comanda el barco, pero no por mí, sino por los chicos. Cuando se sacan esa presión de encima es otro fútbol y otra sensación Sería bueno que durante la Copa sea todo así", deseó.
Scaloni se mostró satisfecho por los delanteros Sergio Agüero y Lautaro Martínez, los dos goleadores de Argentina ante Catar que acompañaron a Lionel Messi en la delantera. "Los tres de arriba corrieron como nunca y también los tres del centro del campo", precisó.
El seleccionador valoró el compromiso de sus jugadores y que comenzasen el partido con mucha personalidad, lo que ayudó a ponerse en ventaja a los cinco minutos de juego con el gol de Martínez. Luego destacó que supieron sacarse el miedo en el segundo tiempo de una eventual eliminación de la Copa.
"Hubo algunos momentos del partido donde Catar comenzó a dominar la pelota, propio del sistema que ellos manejan. Estamos satisfechos porque el equipo por momentos jugó bien. Lógicamente hay cosas por mejorar", apuntó Scaloni.
Sobre la tarjeta amarilla que vio en el partido, Scaloni explicó que fue amonestado porque vio que el árbitro iba a sacar la segunda tarjeta amarilla a un jugador catarí pero al darse cuenta que estaba amonestado dio marcha atrás. "Me prendí fuego y tiré una botella", dijo Scaloni, que prometió no volver a hacerlo.
Sobre Venezuela, rival de Argentinos en los cuartos de final, Scaloni apuntó que "será un contrincante difícil, un equipo interesante que tiene las cosas claras y viene trabajando bien desde hace mucho tiempo".
En ese sentido recordó el "traspié" sufrido hace poco con la Vinotinto, cuando Argentina perdió por 1-3 en un amistoso disputado en el estadio Wanda Metropolitano de Madrid.
El seleccionador de Argentina, Lionel Scaloni, volvió este domingo a quejarse del estado del terreno de juego en la Copa América, después de haberse clasificado para los cuartos de final con un triunfo ante Catar por 0-2, con goles de Lautaro Martínez y Sergio Agüero.
Scaloni afirmó en conferencia de prensa que la cancha del estadio Arena do Gremio, de Porto Alegre, donde ganó este domingo Argentina, estaba en malas condiciones como el Arena Fonte Nova de Salvador, donde la Albiceleste perdió por 2-0 contra Colombia en la primera jornada del campeonato.
"Recalco lo de la cancha. Cuando lo dije, me criticaron. No, no se puede jugar en esa cancha. Lo digo ahora que ganamos", señaló Scaloni.
El técnico argentino explicó que Argentina está en una etapa de transición y recordó que en este partido, donde la selección estaba obligada a ganar para no quedar eliminada en la primera fase, había muchos jugadores menores de 25 años.
Por ello pidió a los periodistas y a los aficionados que no se les someta a tanta presión a los futbolistas del combinado argentino porque cuando están relajados es cuando demuestran su mejor fútbol.
"Parece que los jugadores tienen que salir a la guerra en cada partido, pero con esa presión es complicado. El mensaje tiene que ser que mientras se juegue la Copa todos tiremos hacia el mismo lado", pidió Scaloni.
"Tiene que haber unanimidad. Es el mensaje que quisiera dar humildemente porque soy el que en este momento comanda el barco, pero no por mí, sino por los chicos. Cuando se sacan esa presión de encima es otro fútbol y otra sensación Sería bueno que durante la Copa sea todo así", deseó.
Scaloni se mostró satisfecho por los delanteros Sergio Agüero y Lautaro Martínez, los dos goleadores de Argentina ante Catar que acompañaron a Lionel Messi en la delantera. "Los tres de arriba corrieron como nunca y también los tres del centro del campo", precisó.
El seleccionador valoró el compromiso de sus jugadores y que comenzasen el partido con mucha personalidad, lo que ayudó a ponerse en ventaja a los cinco minutos de juego con el gol de Martínez. Luego destacó que supieron sacarse el miedo en el segundo tiempo de una eventual eliminación de la Copa.
"Hubo algunos momentos del partido donde Catar comenzó a dominar la pelota, propio del sistema que ellos manejan. Estamos satisfechos porque el equipo por momentos jugó bien. Lógicamente hay cosas por mejorar", apuntó Scaloni.
Sobre la tarjeta amarilla que vio en el partido, Scaloni explicó que fue amonestado porque vio que el árbitro iba a sacar la segunda tarjeta amarilla a un jugador catarí pero al darse cuenta que estaba amonestado dio marcha atrás. "Me prendí fuego y tiré una botella", dijo Scaloni, que prometió no volver a hacerlo.
Sobre Venezuela, rival de Argentinos en los cuartos de final, Scaloni apuntó que "será un contrincante difícil, un equipo interesante que tiene las cosas claras y viene trabajando bien desde hace mucho tiempo".
En ese sentido recordó el "traspié" sufrido hace poco con la Vinotinto, cuando Argentina perdió por 1-3 en un amistoso disputado en el estadio Wanda Metropolitano de Madrid.