F1 / Verstappen cambia la historia en un duelo memorable con Leclerc
Gran triunfo del holandés en casa de Red Bull por delante del Ferrari. Bottas completó el podio. Enorme remontada de Carlos Sainz, del 19º al 8º.
Jesús Balseiro
Spielberg, As
Choque de colosos. Cuando cualquiera pensaba que Leclerc y Verstappen se encontrarían en la primera curva, con los semáforos recién apagados, la F1 más impredecible se guardó para el final de un inolvidable GP de Austria la lucha de gigantes, los dos mayores talentos de futuro que tiene esta parrilla dieron un grandioso espectáculo en el imponente escenario de Red Bull Ring. El holandés quería culminar su remontada tras una pésima salida, a cada paso por meta recortaba la desventaja tras merendarse antes a Vettel y Bottas como si fueran debutantes. La afición naranja enloquecía, y a tres vueltas del final los jóvenes pistoleros se medían en un duelo salvaje.
Lo intentó tres veces 'Mad Max', una primera sin éxito, una segunda que Leclerc le devolvió y una tercera, definitiva, en la Curva 3 de la antepenúltima vuelta, con una precisión implacable, dureza al límite, para dejar sin espacio al Ferrari que terminó trazando por la escapatoria, fuera del piano. Se quejó Charles, se le marchaba la victoria, como en Bahréin, en una acción contundente que de momento investiga la FIA. Pero Verstappen cruzaba primero bajo la bandera de cuadros una carrera espectacular que es también el primer triunfo para Red Bull Honda. Segundo puesto de la otra estrella del día, tercero de Bottas. Y cuarto de Vettel, adelantando en el tiempo de descuento a su archienemigo, Lewis Hamilton.
Pero mejor volver al principio... porque el inicio de Max difícilmente pudo ser peor: se quedó clavado al arrancar y le pasó hasta Gasly mientras se marchaba la cabeza de carrera. Norris llegó a inquietar brevemente a Hamilton, pero rápidamente se establecieron los dos Mercedes por detrás de Leclerc. Adelantando la parada de Bottas buscaron el error de Ferrari en la estrategia y afortunadamente para Maranello llegó con el coche ‘no prioritario’: los mecánicos no escucharon la llamada por radio y Vettel entró en el ‘pit’ sin que sus neumáticos estuvieran preparados. El ensayo general salió fatal, pero una vuelta más tarde el coche '16' paraba sin la menor incidencia, saliendo delante del finlandés.
Se quedó liderando al pelotón un Hamilton fuera de sí, intentó ser rápido pero destrozó las ruedas y su alerón delantero saltando por todos los pianos hasta el punto de tener que sustituirlo en su posterior paso por boxes, despidiéndose de todas sus opciones de podio. El monegasco dijo ‘hasta luego', parecía que estaba hecho, pero en el último tercio de la prueba comenzó el ‘show’ de Verstappen. Primero se comió en la pista a todo un tetracampeón, Vettel, que marchaba tercero virtual tras los problemas de Lewis. Necesitó un par de vueltas para clavar su maniobra en la Curva 4 y secar al alemán, que al momento se fue a boxes para montar gomas blandas y cambiar la estrategia. Unos minutos más tarde, ‘Mad Max’ encendía a la numerosísima grada 'oranje' arrasando a Bottas en la Curva 3, su favorita del día. De su penoso comienzo a la segunda posición, y aún faltaba la caza a Leclerc. Qué dos pilotos.
Por detrás, un buen Lando Norris acabó sexto para comandar la zona media y algo más, porque Gasly volvió a quedar en evidencia a un mundo de su compañero de Red Bull, incapaz de superar a un humilde McLaren. Detrás del coche ‘energético’, octavo, el otro piloto que más se divirtió este domingo en Red Bull Ring: Carlos Sainz. Grandísima remontada del madrileño de once puestos, desde el 19º en parrilla, superando a los Haas, los Williams, los Toro Rosso, los Renault y los Racing Point en la pista, uno por uno, dando un fuerte puñetazo en la mesa de la zona media el día que debía perder puntos por la penalización. Emoción constante, protagonistas en todas las filas... la Fórmula 1 tiene estas cosas.
Jesús Balseiro
Spielberg, As
Choque de colosos. Cuando cualquiera pensaba que Leclerc y Verstappen se encontrarían en la primera curva, con los semáforos recién apagados, la F1 más impredecible se guardó para el final de un inolvidable GP de Austria la lucha de gigantes, los dos mayores talentos de futuro que tiene esta parrilla dieron un grandioso espectáculo en el imponente escenario de Red Bull Ring. El holandés quería culminar su remontada tras una pésima salida, a cada paso por meta recortaba la desventaja tras merendarse antes a Vettel y Bottas como si fueran debutantes. La afición naranja enloquecía, y a tres vueltas del final los jóvenes pistoleros se medían en un duelo salvaje.
Lo intentó tres veces 'Mad Max', una primera sin éxito, una segunda que Leclerc le devolvió y una tercera, definitiva, en la Curva 3 de la antepenúltima vuelta, con una precisión implacable, dureza al límite, para dejar sin espacio al Ferrari que terminó trazando por la escapatoria, fuera del piano. Se quejó Charles, se le marchaba la victoria, como en Bahréin, en una acción contundente que de momento investiga la FIA. Pero Verstappen cruzaba primero bajo la bandera de cuadros una carrera espectacular que es también el primer triunfo para Red Bull Honda. Segundo puesto de la otra estrella del día, tercero de Bottas. Y cuarto de Vettel, adelantando en el tiempo de descuento a su archienemigo, Lewis Hamilton.
Pero mejor volver al principio... porque el inicio de Max difícilmente pudo ser peor: se quedó clavado al arrancar y le pasó hasta Gasly mientras se marchaba la cabeza de carrera. Norris llegó a inquietar brevemente a Hamilton, pero rápidamente se establecieron los dos Mercedes por detrás de Leclerc. Adelantando la parada de Bottas buscaron el error de Ferrari en la estrategia y afortunadamente para Maranello llegó con el coche ‘no prioritario’: los mecánicos no escucharon la llamada por radio y Vettel entró en el ‘pit’ sin que sus neumáticos estuvieran preparados. El ensayo general salió fatal, pero una vuelta más tarde el coche '16' paraba sin la menor incidencia, saliendo delante del finlandés.
Se quedó liderando al pelotón un Hamilton fuera de sí, intentó ser rápido pero destrozó las ruedas y su alerón delantero saltando por todos los pianos hasta el punto de tener que sustituirlo en su posterior paso por boxes, despidiéndose de todas sus opciones de podio. El monegasco dijo ‘hasta luego', parecía que estaba hecho, pero en el último tercio de la prueba comenzó el ‘show’ de Verstappen. Primero se comió en la pista a todo un tetracampeón, Vettel, que marchaba tercero virtual tras los problemas de Lewis. Necesitó un par de vueltas para clavar su maniobra en la Curva 4 y secar al alemán, que al momento se fue a boxes para montar gomas blandas y cambiar la estrategia. Unos minutos más tarde, ‘Mad Max’ encendía a la numerosísima grada 'oranje' arrasando a Bottas en la Curva 3, su favorita del día. De su penoso comienzo a la segunda posición, y aún faltaba la caza a Leclerc. Qué dos pilotos.
Por detrás, un buen Lando Norris acabó sexto para comandar la zona media y algo más, porque Gasly volvió a quedar en evidencia a un mundo de su compañero de Red Bull, incapaz de superar a un humilde McLaren. Detrás del coche ‘energético’, octavo, el otro piloto que más se divirtió este domingo en Red Bull Ring: Carlos Sainz. Grandísima remontada del madrileño de once puestos, desde el 19º en parrilla, superando a los Haas, los Williams, los Toro Rosso, los Renault y los Racing Point en la pista, uno por uno, dando un fuerte puñetazo en la mesa de la zona media el día que debía perder puntos por la penalización. Emoción constante, protagonistas en todas las filas... la Fórmula 1 tiene estas cosas.