Alemania gana a la frágil Bielorrusia sin esforzarse
Victoria de la Mannschaft en un partido soso y casi con un ritmo de entrenamiento. Sané y Reus marcaron los goles del segundo triunfo alemanán en la clasificación para la Euro 2020.
Fernando Kallás
As
Alemania ganó a Bielorrusia un partido soso y casi con un ritmo de entrenamiento. La Mannschaft dio la impresión de que jugó los 90 minutos en segunda marcha ante la fragilidad del rival, colista del Grupo C de la clasificación de la Eurocopa 2020. Fue la segunda victoria en dos partidos de los alemanes, que debutaron con una victoria en Ámsterdam ante Holanda.
Sin Joachin Löw en la banda, que se recupera de un accidente sufrido mientras hacía deporte el pasado mes de mayo, una renovada Alemania, con seis titulares debajo de los 24 años, comenzó presionando al rival y marcó el primero luego a los 13 minutos, con Sané, tras una jugada individual por la diagonal derecha.
Pero después del gol los alemanes levantaron el pie del acelerador y pasaron a simplemente tocar el balón lateralmente y sin ninguna urgencia, como si con ganas de hacer el tiempo pasar. Pero la letargia germánica casi les cuesta caro, cuando Naumov, a los 32’, logró un buen remate de cabeza tras un córner desde la derecha y obligó a Neuer hacer una parada de película para salvar el que podría haber sido el gol del empate de Bielorrusia.
El partido fue al descanso con la victoria anímica de los favoritos, que llegaron a tener un 70% de posesión en la primera parte.
El dominio casi que absoluto alemán siguió en la segunda parte y Reus marcó el 0-2 en el 62’, en una jugada que parecía de pachanga de solteros contra casados. El delantero del Dortmund recibió un pase en la frontal del área y, entre tres defensa, avanzó sólo y sin oposición y fusiló el arquero rival. Tan fácil que Reus ni lo celebró.
Tras el segundo gol, Alemania volvió a jugar con el mismo ritmo y las mismas ganas de la primera parte y tocó la pelota burocráticamente ante un rival que fue incapaz de demostrar capacidad de reacción hasta que el árbitro pitara el final del partido en el minuto 95’.
Fernando Kallás
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Alemania ganó a Bielorrusia un partido soso y casi con un ritmo de entrenamiento. La Mannschaft dio la impresión de que jugó los 90 minutos en segunda marcha ante la fragilidad del rival, colista del Grupo C de la clasificación de la Eurocopa 2020. Fue la segunda victoria en dos partidos de los alemanes, que debutaron con una victoria en Ámsterdam ante Holanda.
Sin Joachin Löw en la banda, que se recupera de un accidente sufrido mientras hacía deporte el pasado mes de mayo, una renovada Alemania, con seis titulares debajo de los 24 años, comenzó presionando al rival y marcó el primero luego a los 13 minutos, con Sané, tras una jugada individual por la diagonal derecha.
Pero después del gol los alemanes levantaron el pie del acelerador y pasaron a simplemente tocar el balón lateralmente y sin ninguna urgencia, como si con ganas de hacer el tiempo pasar. Pero la letargia germánica casi les cuesta caro, cuando Naumov, a los 32’, logró un buen remate de cabeza tras un córner desde la derecha y obligó a Neuer hacer una parada de película para salvar el que podría haber sido el gol del empate de Bielorrusia.
El partido fue al descanso con la victoria anímica de los favoritos, que llegaron a tener un 70% de posesión en la primera parte.
El dominio casi que absoluto alemán siguió en la segunda parte y Reus marcó el 0-2 en el 62’, en una jugada que parecía de pachanga de solteros contra casados. El delantero del Dortmund recibió un pase en la frontal del área y, entre tres defensa, avanzó sólo y sin oposición y fusiló el arquero rival. Tan fácil que Reus ni lo celebró.
Tras el segundo gol, Alemania volvió a jugar con el mismo ritmo y las mismas ganas de la primera parte y tocó la pelota burocráticamente ante un rival que fue incapaz de demostrar capacidad de reacción hasta que el árbitro pitara el final del partido en el minuto 95’.