Lewandowski liquida al Leipzig y lidera el doblete del Bayern
El delantero polaco marcó dos de los tres goles del equipo bávaro, que consigue el segundo título de la temporada después de hacerse con la Bundesliga.
José Carlos Menzel
As
Una semana después de coronarse campeón de la Bundesliga por séptima temporada consecutiva, el Bayern se impuso por 3-0 al RB Leipzig en la finalísima de la Pokal y alzó un doblete que le garantiza la continuidad al cuestionadísimo Niko Kovac en el banquillo muniqués. Después de finalizar la primera vuelta de la temporada a nueve puntos del Borussia Dortmund, el croata logró remontar, levantar la ensaladera y ponerle el broche de oro a la temporada con el doblete. Es más: Después de Thomas Schaaf con el Bremen, Kovac es el segundo entrenador que consigue ganar la Pokal como jugador y entrenador de un mismo club.
Dos semanas atrás, el Bayern no logró poner en evidencia a la zaga del Leipzig durante el empate a cero en la Bundesliga y hoy no fue diferente. Al menos al principio. Los pupilos de Ralf Rangnick, que disputaron la primera final en la historia del RB Leipzig, comenzaron mejor y dispusieron de numerosas ocasiones que no lograron materializar. La más clara fue para Poulsen, que se topó con los reflejos del recién recuperado Neuer en el marco del Bayern.
La ocasión para el conjunto de la Red Bull despertó a la bestia. Se hicieron los bávaros con el esférico, embotellaron al Leipzig y le fusilaron. Coman le filtró el cuero a Alaba, el austriaco la colgó al corazón del área y Lewandwski no perdonó de cabeza. Pudo aumentar la renta el flamante campeón alemán en los compases finales de la primera mitad, pero dejó con vida al tercer clasificado de la máxima competición germana.
El comienzo del segundo periodo fue una copia del primero. Mandaba el cuadro del este de Alemania, eso sí, se chocó una y otra vez con el imperial Neuer. Supo reaccionar el Bayern, que volvió a desplegar su juego de posición justo cuando peor lo estaba pasando. Ya pudo ampliar el marcador Thiago, pero finalmente fueron Coman y una vez más el killer Lewandowski los que sentenciaron un encuentro que fue el mejor adiós para Robben y Ribéry, leyendas muniquesas que disfrutaron de sus últimos minutos con la indumentaria bávara.
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Una semana después de coronarse campeón de la Bundesliga por séptima temporada consecutiva, el Bayern se impuso por 3-0 al RB Leipzig en la finalísima de la Pokal y alzó un doblete que le garantiza la continuidad al cuestionadísimo Niko Kovac en el banquillo muniqués. Después de finalizar la primera vuelta de la temporada a nueve puntos del Borussia Dortmund, el croata logró remontar, levantar la ensaladera y ponerle el broche de oro a la temporada con el doblete. Es más: Después de Thomas Schaaf con el Bremen, Kovac es el segundo entrenador que consigue ganar la Pokal como jugador y entrenador de un mismo club.
Dos semanas atrás, el Bayern no logró poner en evidencia a la zaga del Leipzig durante el empate a cero en la Bundesliga y hoy no fue diferente. Al menos al principio. Los pupilos de Ralf Rangnick, que disputaron la primera final en la historia del RB Leipzig, comenzaron mejor y dispusieron de numerosas ocasiones que no lograron materializar. La más clara fue para Poulsen, que se topó con los reflejos del recién recuperado Neuer en el marco del Bayern.
La ocasión para el conjunto de la Red Bull despertó a la bestia. Se hicieron los bávaros con el esférico, embotellaron al Leipzig y le fusilaron. Coman le filtró el cuero a Alaba, el austriaco la colgó al corazón del área y Lewandwski no perdonó de cabeza. Pudo aumentar la renta el flamante campeón alemán en los compases finales de la primera mitad, pero dejó con vida al tercer clasificado de la máxima competición germana.
El comienzo del segundo periodo fue una copia del primero. Mandaba el cuadro del este de Alemania, eso sí, se chocó una y otra vez con el imperial Neuer. Supo reaccionar el Bayern, que volvió a desplegar su juego de posición justo cuando peor lo estaba pasando. Ya pudo ampliar el marcador Thiago, pero finalmente fueron Coman y una vez más el killer Lewandowski los que sentenciaron un encuentro que fue el mejor adiós para Robben y Ribéry, leyendas muniquesas que disfrutaron de sus últimos minutos con la indumentaria bávara.
