Zidane solo cumple en casa
El entrenador del Real Madrid ha registrado un pleno de victorias en el Santiago Bernabéu, pero fuera no conoce la victoria. No siempre se le dio mal viajar.
Jaime Candil
As
La segunda etapa de Zinedine Zidane en el Real Madrid no ha comenzado tan bien como desearía el entrenador. En los siete partidos que se ha sentado en el banquillo este curso, se ha dejado siete puntos por el camino, es decir, que ha dejado de sumar una media de un punto por encuentro.
Sin embargo, el equipo tiene dos caras: la que muestra en el Santiago Bernabéu y la que enseña cuando viaja. Y es que en casa ha hecho pleno, pero fuera se ve desbordado. Cuatro victorias de cuatro (Celta, Eibar, Huesca y Athletic de Bilbao) con un balance goleador de 10 a 3 en el Santiago Bernabéu frente a cero victorias, dos empates y una derrota como visitante.
Es cierto que no han sido viajes largos, pero hasta el momento, Zidane ha acusado el jugar en otro estadio. Primero fue el Valencia, que le ganó 2-1 (Guedes, Garay y Benzema), aunque podrían haber llegado más goles al contragolpe. Solamente Odriozola demostró estar a la altura ese día. Ante el Leganés, hicieron una primera parte bastante mala y encajaron un gol de Jonathan Silva antes de irse al descanso. Por suerte, Karim Benzema empató en la reanudación pare evitar la catástrofe (0-0). Finalmente ante el Getafe no tiró nadie del carro en un partido trabado por las faltas (0-0). El juego no pudo fluir debido a las interrupciones, pero el conjunto blanco tampoco tuvo demasiadas ocasiones. Solamente Brahim brilló, además de Keylor Navas, que estuvo muy acertado las veces que se plantaron en su área evitando un resultado peor.
En cuanto a las estadísticas de esos encuentros, llama la atención que de los siete que ha dirigido Zidane, los tres en los que ha tropezado fuera de casa son el segundo (70,6% ante el Leganés), tercero (68,1% ante el Valencia) y cuarto (67,3% ante el Getafe) partido con más posesión de la pelota. Por otro lado, en los tiros a puerta sí se ha notado, ya que los partidos en los que menos ha disparado entre los tres palos son contra el Athletic de Bilbao (4), el Getafe (4), el Valencia (5) y el Leganés (6), siendo el del Athletic de Bilbao el único que se disputó en casa. En resumen, que cuando el Real Madrid de Zidane pincha suele tener más le pelota, pero también dispara menos entre los tres palos.
A pesar de la mala racha fuera de casa durante el presente curso, lo cierto es que los viajes nunca se le han dado mal en la Liga Santander. La temporada pasada le fue mejor en casa, con un balance de 46 puntos a 36, cosechando diez victorias, seis empates y tres derrotas en las salidas del equipo. En cualquier caso, sufrió las mismas derrotas tanto en su campo como en el del rival.
En la campaña 2016-2017 registró más puntos fuera que en el Santiago Bernabéu (46 en casas y 47 fuera), logrando a domicilio quince victorias, dos empates y dos derrotas. Y en la 2015-2016, cuando cogió las riendas del equipo tras la destitución de Rafa Benítez, también se le dio mejor lejos de su estadio. Logró 27 puntos en casa y 29 fuera. Aquel curso no perdió ningún partido de liga lejos del Bernabéu, cosechando solamente dos empates.
Jaime Candil
As
La segunda etapa de Zinedine Zidane en el Real Madrid no ha comenzado tan bien como desearía el entrenador. En los siete partidos que se ha sentado en el banquillo este curso, se ha dejado siete puntos por el camino, es decir, que ha dejado de sumar una media de un punto por encuentro.
Sin embargo, el equipo tiene dos caras: la que muestra en el Santiago Bernabéu y la que enseña cuando viaja. Y es que en casa ha hecho pleno, pero fuera se ve desbordado. Cuatro victorias de cuatro (Celta, Eibar, Huesca y Athletic de Bilbao) con un balance goleador de 10 a 3 en el Santiago Bernabéu frente a cero victorias, dos empates y una derrota como visitante.
Es cierto que no han sido viajes largos, pero hasta el momento, Zidane ha acusado el jugar en otro estadio. Primero fue el Valencia, que le ganó 2-1 (Guedes, Garay y Benzema), aunque podrían haber llegado más goles al contragolpe. Solamente Odriozola demostró estar a la altura ese día. Ante el Leganés, hicieron una primera parte bastante mala y encajaron un gol de Jonathan Silva antes de irse al descanso. Por suerte, Karim Benzema empató en la reanudación pare evitar la catástrofe (0-0). Finalmente ante el Getafe no tiró nadie del carro en un partido trabado por las faltas (0-0). El juego no pudo fluir debido a las interrupciones, pero el conjunto blanco tampoco tuvo demasiadas ocasiones. Solamente Brahim brilló, además de Keylor Navas, que estuvo muy acertado las veces que se plantaron en su área evitando un resultado peor.
En cuanto a las estadísticas de esos encuentros, llama la atención que de los siete que ha dirigido Zidane, los tres en los que ha tropezado fuera de casa son el segundo (70,6% ante el Leganés), tercero (68,1% ante el Valencia) y cuarto (67,3% ante el Getafe) partido con más posesión de la pelota. Por otro lado, en los tiros a puerta sí se ha notado, ya que los partidos en los que menos ha disparado entre los tres palos son contra el Athletic de Bilbao (4), el Getafe (4), el Valencia (5) y el Leganés (6), siendo el del Athletic de Bilbao el único que se disputó en casa. En resumen, que cuando el Real Madrid de Zidane pincha suele tener más le pelota, pero también dispara menos entre los tres palos.
A pesar de la mala racha fuera de casa durante el presente curso, lo cierto es que los viajes nunca se le han dado mal en la Liga Santander. La temporada pasada le fue mejor en casa, con un balance de 46 puntos a 36, cosechando diez victorias, seis empates y tres derrotas en las salidas del equipo. En cualquier caso, sufrió las mismas derrotas tanto en su campo como en el del rival.
En la campaña 2016-2017 registró más puntos fuera que en el Santiago Bernabéu (46 en casas y 47 fuera), logrando a domicilio quince victorias, dos empates y dos derrotas. Y en la 2015-2016, cuando cogió las riendas del equipo tras la destitución de Rafa Benítez, también se le dio mejor lejos de su estadio. Logró 27 puntos en casa y 29 fuera. Aquel curso no perdió ningún partido de liga lejos del Bernabéu, cosechando solamente dos empates.