Rodríguez Veltzé se abstiene de opinar sobre el 21F
La APDHB pidió ayer al candidato a la CIDH, Eduardo Rodríguez Veltzé, que se pronuncie de manera pública sobre el respeto al resultado del referendo del 21 de febrero de 2016 que puso candado a la tercera postulación continua de Evo Morales.
Página Siete Digital / La Paz
El expresidente, agente de Bolivia en La Haya y candidato a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Eduardo Rodríguez Veltzé, se abstuvo de pronunciarse de manera pública sobre el respeto al resultado del referendo del 21 de febrero de 2016, que rechazó la tercera postulación consecutiva del presidente Evo Morales.
Mediante una carta pública a la presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos (APDHB), Amparo Carvajal, Rodríguez Veltzé señala que “no siendo parte peticionante en el caso, por mi condición de candidato a la CIDH y por respeto al criterio independiente que la Comisión adopte en el tratamiento de dicho caso, me abstengo de formular una posición pública sobre el mismo, más aún si el Reglamento de la CIDH (Art. 17.2) prevé que los miembros de la Comisión no podrán participar en la discusión, investigación, deliberación o decisión de un asunto sometido a la consideración de la Comisión si fuesen nacionales del Estado objeto de consideración general o específica".
— E. Rodríguez Veltzé (@erveltze) 23 de abril de 2019
La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) pidió ayer al candidato a la CIDH que se pronuncie de manera pública sobre el resultado del referendo de 2016 que puso candado a la tercera postulación continua de Evo Morales y Álvaro García Linera.
En otra parte de su misiva señala que "como es de conocimiento público, en el curso de mi carrera profesional no he militado en partido político alguno ni tampoco guardo cercanía o relación estrecha con ellos. Mi desempeño en diversas capacidades en la administración pública ha reflejado una vocación de servicio público en favor de los intereses del país, independientemente del gobierno de turno".
El 21F, el 51% de los votantes rechazó la postulación de Morales y García Linera para el periodo 2020-2025 como pretendían los gobernantes y también frenó la modificación del artículo 168 de la Constitución Política del Estado (CPE), que establece que el Presidente Bolivia tiene derecho a una sola reelección continua.
Pese a la decisión del soberano y la Carta Magna, el partido de Morales impulsó una reforma constitucional de facto mediante el Tribunal Constitucional Plurinacional que con una sentencia "desactivó" todos los artículos de la CPE que establecen que el Presidente tiene derecho una sola reelección continua.
En otra parte de su carta, Rodríguez Veltzé señala que "entiendo que el asunto sobre el que se me solicita un pronunciamiento ha sido sometido ante la CIDH y debe seguir un procedimiento reglado que se encuentra en curso y sobre el que debe destacarse la independencia con la que deben actuar sus integrantes, al ser parte de un órgano autónomo de la Organización de los Estados Americanos y cuyo ejercicio es a título personal".
Evidentemente, en la CIDH radica una demanda de opositores bolivianos en contra de la sentencia constitucional que da luz verde a la reelección perpetua de Morales.
El expresidente, agente de Bolivia en La Haya y candidato a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Eduardo Rodríguez Veltzé, se abstuvo de pronunciarse de manera pública sobre el respeto al resultado del referendo del 21 de febrero de 2016, que rechazó la tercera postulación consecutiva del presidente Evo Morales.
Mediante una carta pública a la presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos (APDHB), Amparo Carvajal, Rodríguez Veltzé señala que “no siendo parte peticionante en el caso, por mi condición de candidato a la CIDH y por respeto al criterio independiente que la Comisión adopte en el tratamiento de dicho caso, me abstengo de formular una posición pública sobre el mismo, más aún si el Reglamento de la CIDH (Art. 17.2) prevé que los miembros de la Comisión no podrán participar en la discusión, investigación, deliberación o decisión de un asunto sometido a la consideración de la Comisión si fuesen nacionales del Estado objeto de consideración general o específica".
— E. Rodríguez Veltzé (@erveltze) 23 de abril de 2019
La Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) pidió ayer al candidato a la CIDH que se pronuncie de manera pública sobre el resultado del referendo de 2016 que puso candado a la tercera postulación continua de Evo Morales y Álvaro García Linera.
En otra parte de su misiva señala que "como es de conocimiento público, en el curso de mi carrera profesional no he militado en partido político alguno ni tampoco guardo cercanía o relación estrecha con ellos. Mi desempeño en diversas capacidades en la administración pública ha reflejado una vocación de servicio público en favor de los intereses del país, independientemente del gobierno de turno".
El 21F, el 51% de los votantes rechazó la postulación de Morales y García Linera para el periodo 2020-2025 como pretendían los gobernantes y también frenó la modificación del artículo 168 de la Constitución Política del Estado (CPE), que establece que el Presidente Bolivia tiene derecho a una sola reelección continua.
Pese a la decisión del soberano y la Carta Magna, el partido de Morales impulsó una reforma constitucional de facto mediante el Tribunal Constitucional Plurinacional que con una sentencia "desactivó" todos los artículos de la CPE que establecen que el Presidente tiene derecho una sola reelección continua.
En otra parte de su carta, Rodríguez Veltzé señala que "entiendo que el asunto sobre el que se me solicita un pronunciamiento ha sido sometido ante la CIDH y debe seguir un procedimiento reglado que se encuentra en curso y sobre el que debe destacarse la independencia con la que deben actuar sus integrantes, al ser parte de un órgano autónomo de la Organización de los Estados Americanos y cuyo ejercicio es a título personal".
Evidentemente, en la CIDH radica una demanda de opositores bolivianos en contra de la sentencia constitucional que da luz verde a la reelección perpetua de Morales.
