Patinazo y locura en el empate del Chelsea en Stamford Bridge
Se adelantó el Burnley por medio de Hendrick, remontó Kanté e Higuaín para el Chelsea y Barnes sentenció el empate final.
Alberto Muñoz
As
Patinazo del Chelsea en casa ante el Burnley con un empate que da alas a Arsenal y Manchester United, que perdieron la pasada jornada. Los de Sarri fueron incapaces de hacerse con un encuentro en el que lo intentaron de todas las maneras pero en el que Heaton se mostró inexpugnable.
A los ocho minutos, el Burnley daba el pistoletazo de salida a un inicio de partido de auténtica locura adelantándose en el marcador con una volea maravillosa de Hendrick, que aprovechó el despeje de Azpilicueta con la cabeza a la frontal del área para perforar la portería de Kepa. El tanto, lejos de amilanar a los locales, les espoleó, y la reacción de los londinenses no se hizo esperar.
Tan solo cuatro minutos después, la conexión Hazard-Kanté volvió a dar sus frutos con una maravillosa jugada del belga, que aguantó bien el balón esperando el momento preciso para poner un balón perfecto al francés en el punto de penalti, desde donde marcó el empate. Tan solo dos minutos después, Higuaín reventaba el larguero de Heaton con un disparo potentísimo que se coló en el fondo de las redes.
El problema es que el Burnley no solo empataría diez minutos después por medio de Barnes, sino que fue capaz de resistir un asedio que duró el resto del partido para sacar un punto de Stamford Bridge. Una tangana al final del partido, motivada por las continuas pérdidas de tiempo de los jugadores del Burnley, terminó con Sarri expulsado y con Kovacic amonestado después de que el aún jugador del Real Madrid perdiese los papeles.
Alberto Muñoz
As
Patinazo del Chelsea en casa ante el Burnley con un empate que da alas a Arsenal y Manchester United, que perdieron la pasada jornada. Los de Sarri fueron incapaces de hacerse con un encuentro en el que lo intentaron de todas las maneras pero en el que Heaton se mostró inexpugnable.
A los ocho minutos, el Burnley daba el pistoletazo de salida a un inicio de partido de auténtica locura adelantándose en el marcador con una volea maravillosa de Hendrick, que aprovechó el despeje de Azpilicueta con la cabeza a la frontal del área para perforar la portería de Kepa. El tanto, lejos de amilanar a los locales, les espoleó, y la reacción de los londinenses no se hizo esperar.
Tan solo cuatro minutos después, la conexión Hazard-Kanté volvió a dar sus frutos con una maravillosa jugada del belga, que aguantó bien el balón esperando el momento preciso para poner un balón perfecto al francés en el punto de penalti, desde donde marcó el empate. Tan solo dos minutos después, Higuaín reventaba el larguero de Heaton con un disparo potentísimo que se coló en el fondo de las redes.
El problema es que el Burnley no solo empataría diez minutos después por medio de Barnes, sino que fue capaz de resistir un asedio que duró el resto del partido para sacar un punto de Stamford Bridge. Una tangana al final del partido, motivada por las continuas pérdidas de tiempo de los jugadores del Burnley, terminó con Sarri expulsado y con Kovacic amonestado después de que el aún jugador del Real Madrid perdiese los papeles.