Manillas electrónicas para reos llegan en mayo y se activará su uso a mediados de año en Cochabamba
Se eligió a Cochabamba para estrenar la “salida alternativa” a la detención preventiva por efecto de un compromiso gubernamental que se generó en respuesta a las primeras gestiones efectuadas por las autoridades judiciales.
La Razón Digital / Angélica Melgarejo, Rubén Ariñez / La Paz
Las manillas electrónicas con las que se busca descongestionar el sistema carcelario del país llegarán en mayo y su uso está previsto para mediados de año, anunció el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilfredo Chavez, tras precisar que Cochabamba será el primer departamento en estrenarlos.
“Las manillas están llegando en mayo, tenemos que hacer un trámite de desaduanización y otros más, estimamos que a medio año, por junio o julio estemos en Cochabamba probando los artefactos y de esta manera dar respuesta a la Justicia”, señaló la autoridad del sector.
Se eligió a Cochabamba para estrenar la “salida alternativa” a la detención preventiva por efecto de un compromiso gubernamental que se generó en respuesta a las primeras gestiones efectuadas por las autoridades judiciales.
Más de 15.000 presos viven en condiciones de hacinamiento en las cárceles bolivianas que apenas tienen capacidad para unos 4.000.
El Gobierno impulsa una Ley de Abreviación Procesal Penal que, entre otros aspectos, limita la aplicación de la detención preventiva.
En ese marco, el pasado fin de semana se realizó un inédito censo carcelario para, precisamente, revisar la situación de los reclusos.
Las manillas electrónicas con las que se busca descongestionar el sistema carcelario del país llegarán en mayo y su uso está previsto para mediados de año, anunció el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilfredo Chavez, tras precisar que Cochabamba será el primer departamento en estrenarlos.
“Las manillas están llegando en mayo, tenemos que hacer un trámite de desaduanización y otros más, estimamos que a medio año, por junio o julio estemos en Cochabamba probando los artefactos y de esta manera dar respuesta a la Justicia”, señaló la autoridad del sector.
Se eligió a Cochabamba para estrenar la “salida alternativa” a la detención preventiva por efecto de un compromiso gubernamental que se generó en respuesta a las primeras gestiones efectuadas por las autoridades judiciales.
Más de 15.000 presos viven en condiciones de hacinamiento en las cárceles bolivianas que apenas tienen capacidad para unos 4.000.
El Gobierno impulsa una Ley de Abreviación Procesal Penal que, entre otros aspectos, limita la aplicación de la detención preventiva.
En ese marco, el pasado fin de semana se realizó un inédito censo carcelario para, precisamente, revisar la situación de los reclusos.
