De Rossi resucita al Roma en Génova
Un tanto del capitán valió la victoria ante el Sampdoria: ahora el equipo de Ranieri marcha a un punto del Milán y vuelve a creer en la clasificación para la Champions.
Mirko Calemme
As
Tenía que ser Daniele De Rossi, el que heredó el brazalete de Francesco Totti, a levantar el Roma de una de las crisis más profundas de los últimos años: tras haber logrado apenas un punto en los últimos tres partidos, los giallorossi triunfaron 1-0 en el difícil campo del Sampdoria y vuelven a acercarse al cuarto puesto.
Los de Giampaolo en la primera mitad tuvieron las mejores ocasiones: una bonita volea del eterno Quagliarella y un latigazo de Defrel, que Mirante (sustituyo a Olsen tras sus actuaciones negativas), desvió fuera, amenazaron a los capitalinos, que tardaban en reaccionar.
En la segunda mitad Ranieri, que perdió por lesión a Karsdorp y lo cambió con Juan Jesus, decidió ir a por el rival con atrevimiento, sacando a Dzeko y El Shaarawy y dejando en el campo a Schick y Zaniolo. Los giallorossi crecieron y en el 75’ el gol llegó: tras un córner, Audero paró un testarazo del punta checo y De Rossi aprovechó el rechace con el muslo, empujando el balón en la portería para un tanto fundamental.
Los doriani buscaron el empate hasta el último segundo (Gabbiadini cabeceó fuera una buena oportunidad y Quagliarella pidió un penalti), pero sin éxito: el Roma, a pesar de su momento de depresión, tiene todavía opciones para clasificarse a la Champions. Se jugará todo en las próximas jornadas.
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Tenía que ser Daniele De Rossi, el que heredó el brazalete de Francesco Totti, a levantar el Roma de una de las crisis más profundas de los últimos años: tras haber logrado apenas un punto en los últimos tres partidos, los giallorossi triunfaron 1-0 en el difícil campo del Sampdoria y vuelven a acercarse al cuarto puesto.
Los de Giampaolo en la primera mitad tuvieron las mejores ocasiones: una bonita volea del eterno Quagliarella y un latigazo de Defrel, que Mirante (sustituyo a Olsen tras sus actuaciones negativas), desvió fuera, amenazaron a los capitalinos, que tardaban en reaccionar.
En la segunda mitad Ranieri, que perdió por lesión a Karsdorp y lo cambió con Juan Jesus, decidió ir a por el rival con atrevimiento, sacando a Dzeko y El Shaarawy y dejando en el campo a Schick y Zaniolo. Los giallorossi crecieron y en el 75’ el gol llegó: tras un córner, Audero paró un testarazo del punta checo y De Rossi aprovechó el rechace con el muslo, empujando el balón en la portería para un tanto fundamental.
Los doriani buscaron el empate hasta el último segundo (Gabbiadini cabeceó fuera una buena oportunidad y Quagliarella pidió un penalti), pero sin éxito: el Roma, a pesar de su momento de depresión, tiene todavía opciones para clasificarse a la Champions. Se jugará todo en las próximas jornadas.
