Messi: precaución en el abductor derecho

Es una zona históricamente castigada en el argentino y se extremarán los cuidados esta semana. En marzo del año pasado también sufrió problemas en la zona.

Juan Jiménez
As
Después de una primera parte en la que pareció con todas las luces puestas, se acercó al gol un par de veces y estuvo mucho más participativo que en el partido de Copa el pasado miércoles, Messi volvió a tocarse la zona del abductor derecho en la segunda. Su vocabulario gestual, además, permitió intuirle algo más incómodo y alternó jugadas en las que se exprimió con otras en las que jugó al paso.


El abductor derecho lleva ya tres años dándole la lata a Messi. En septiembre de 2016 se rompió ante el Atlético de Madrid y estuvo casi un mes de baja. La lesión fue consecuencia indirecta de sus movimientos para proteger el pubis de la pierna izquierda. En un acto reflejo, los dolores pasaron a la derecha y, desde entonces, ha sido una zona históricamente castigada en el argentino.

La temporada pasada, Messi volvió a sufrir problemas en el aductor derecho entrado ya el mes de marzo. Con el Mundial en la mente, el jugador no llegó en su mejor momento, por ejemplo, a la famosa eliminatoria ante la Roma. Es lo que va a intentar mejorar este año el Barça. Messi seguirá un programa de cuidados especiales esta semana y no podría descartarse incluso que se ahorrase algunos minutos ante el Rayo Vallecano porque el Barça tiene partido el 13 de marzo ante el Olympique de Lyon y ahí Valverde va a necesitar a Messi al cien por cien.

Lejos del desgaste de otros años, Messi todavía no llega a los 3.000 minutos esta temporada. Ha jugado 2.751 en 34 partidos (33 goles y 18 asistencias) y se ha ahorrado los viajes con la selección Argentina, que por cierto, está a horas de ofrecer a través de la AFA y Scaloni la lista de convocados para los amistosos ante Venezuela en el Wanda y Marruecos en Tánger. El presidente de la AFA, Claudio Chiqui Tapia, anunció en febrero que no tenía "dudas" de que Messi volvería en esta lista. Es difícil saber, sin embargo, qué pasa por la cabeza del jugador argentino con los tres títulos en juego. Puede que su intención de ir con Argentina (con la que este viernes se cumplieron 13 años de su primer gol) a la próxima Copa América se mantenga en pie pero estos dos amistosos podrían suponer un trastorno en la preparación del final de temporada.

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