Jefe policial: “Hay mucho poder, por encima de la Policía”
Página Siete / La Paz
A mediados de febrero, el dirigente cocalero del Chapare Leonardo Loza advirtió al candidato presidencial por Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, y a otros opositores que los cocaleros no garantizarían su seguridad en el trópico durante la campaña electoral.
Un jefe policial que trabaja en esa región aseguró que los dirigentes cocaleros y los mismos comunarios tienen “mucho poder, incluso por encima de la Policía”.
“Como dirigentes es nuestra responsabilidad alertarle, nosotros podemos abrir las puertas, pero cuando hay reacción de nuestros propios compañeros de la zona nosotros no nos responsabilizamos ni garantizamos de Carlos Mesa o de otro partido político o personaje político neoliberal”, sostuvo el líder cocalero del Chapare hace casi un mes.
Esa advertencia se plasma en que hasta la fecha el candidato presidencial por CC no llegó todavía a regiones del trópico.
Para el oficial de la Policía que trabaja en una unidad policial en el Chapare esa advertencia es completamente real. “Aquí los policías tenemos toda la ley a nuestro favor para actuar, pero eso no ocurre, ellos tienen más poder, ellos dirigen no solo sus sindicatos cocaleros, sino a todas las comunidades, controlan qué movilidades pasan por los caminos, qué llevan y también qué traen”, contó.
El jefe policial no quiso identificarse porque teme que los líderes cocaleros tomen acciones en su contra. “Nosotros nos mantenemos al margen, muchas veces, de algunos acontecimientos. Cuando hay celebraciones en las poblaciones hacemos un control minucioso, pero no siempre es lo que esperamos, porque hay consumo de bebidas alcohólicas y a veces los arrestados no cumplen las ocho horas”, comentó.
En febrero, Loza manifestó que todos los ciudadanos, sean políticos o no, tienen derecho a circular por todos los departamentos y visitar el trópico de Cochabamba; sin embargo, señaló que es responsabilidad de los dirigentes “alertar” sobre posibles reacciones de los pobladores de la zona.
El oficial de la Policía señaló que mientras no haya sucesos que vayan en contra de su oficio (cultivos de coca) “no se meten en problemas”, Sin embargo, cuando ocurren hecho de violencia entre cocaleros “casi siempre derivan en hechos violentos, heridos y hasta muertos”.
Punto de vista
RENÉ CALLA, vicepresidente de los policías pasivos.
“No permitamos territorios sin ley”
De un tiempo a esta parte, el servicio pasivo se convirtió en el vigía de que no se dañe más a la institución policial, que ha sido descuartizada y vapuleada por actos que siempre son responsabilidad de otros. El tráfico de droga es un delito de lesa humanidad y la Policía cumplía su labor y hacía su trabajo. En Bolivia no debemos permitir territorios sin ley. Los miembros del sindicato San Rafael, por ejemplo, no tienen consciencia de que son parte de un país y que la institución llamada por ley a hacer cumplir ese sentido es la Policía, y que no pueden coartar su trabajo.
Es un trabajo, una lucha que tiene la Policía con base en información, en seguimiento y que se planifica hasta en el más mínimo detalle, pero cuando no hay garantías, sólo por capricho de unas cuantas personas, no sirve de nada.
Nosotros tenemos el orgullo de decir que ingresamos al Chapare con Umopar, porque era ese territorio era tierra de nadie: se vendía alegremente la droga, no se ejercía ningún derecho, la Policía no podía identificarse porque era asesinada.
Nuestro pronunciamiento no es político, pero exigimos al Gobierno que nos dé muestras claras de que luchará contra el narcotráfico y que protegerá el trabajo de la Policía. Si en el futuro no lo hace, todos sabremos quién es el responsable de la violencia, porque la violencia genera violencia, venga de donde venga. En los años 83, 84 y 85 ingresamos a esas zonas, dormimos en carpas, en el monte, por varios días, y nunca tuvimos un opositor (al trabajo) como ahora.
A mediados de febrero, el dirigente cocalero del Chapare Leonardo Loza advirtió al candidato presidencial por Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, y a otros opositores que los cocaleros no garantizarían su seguridad en el trópico durante la campaña electoral.
Un jefe policial que trabaja en esa región aseguró que los dirigentes cocaleros y los mismos comunarios tienen “mucho poder, incluso por encima de la Policía”.
“Como dirigentes es nuestra responsabilidad alertarle, nosotros podemos abrir las puertas, pero cuando hay reacción de nuestros propios compañeros de la zona nosotros no nos responsabilizamos ni garantizamos de Carlos Mesa o de otro partido político o personaje político neoliberal”, sostuvo el líder cocalero del Chapare hace casi un mes.
Esa advertencia se plasma en que hasta la fecha el candidato presidencial por CC no llegó todavía a regiones del trópico.
Para el oficial de la Policía que trabaja en una unidad policial en el Chapare esa advertencia es completamente real. “Aquí los policías tenemos toda la ley a nuestro favor para actuar, pero eso no ocurre, ellos tienen más poder, ellos dirigen no solo sus sindicatos cocaleros, sino a todas las comunidades, controlan qué movilidades pasan por los caminos, qué llevan y también qué traen”, contó.
El jefe policial no quiso identificarse porque teme que los líderes cocaleros tomen acciones en su contra. “Nosotros nos mantenemos al margen, muchas veces, de algunos acontecimientos. Cuando hay celebraciones en las poblaciones hacemos un control minucioso, pero no siempre es lo que esperamos, porque hay consumo de bebidas alcohólicas y a veces los arrestados no cumplen las ocho horas”, comentó.
En febrero, Loza manifestó que todos los ciudadanos, sean políticos o no, tienen derecho a circular por todos los departamentos y visitar el trópico de Cochabamba; sin embargo, señaló que es responsabilidad de los dirigentes “alertar” sobre posibles reacciones de los pobladores de la zona.
El oficial de la Policía señaló que mientras no haya sucesos que vayan en contra de su oficio (cultivos de coca) “no se meten en problemas”, Sin embargo, cuando ocurren hecho de violencia entre cocaleros “casi siempre derivan en hechos violentos, heridos y hasta muertos”.
Punto de vista
RENÉ CALLA, vicepresidente de los policías pasivos.
“No permitamos territorios sin ley”
De un tiempo a esta parte, el servicio pasivo se convirtió en el vigía de que no se dañe más a la institución policial, que ha sido descuartizada y vapuleada por actos que siempre son responsabilidad de otros. El tráfico de droga es un delito de lesa humanidad y la Policía cumplía su labor y hacía su trabajo. En Bolivia no debemos permitir territorios sin ley. Los miembros del sindicato San Rafael, por ejemplo, no tienen consciencia de que son parte de un país y que la institución llamada por ley a hacer cumplir ese sentido es la Policía, y que no pueden coartar su trabajo.
Es un trabajo, una lucha que tiene la Policía con base en información, en seguimiento y que se planifica hasta en el más mínimo detalle, pero cuando no hay garantías, sólo por capricho de unas cuantas personas, no sirve de nada.
Nosotros tenemos el orgullo de decir que ingresamos al Chapare con Umopar, porque era ese territorio era tierra de nadie: se vendía alegremente la droga, no se ejercía ningún derecho, la Policía no podía identificarse porque era asesinada.
Nuestro pronunciamiento no es político, pero exigimos al Gobierno que nos dé muestras claras de que luchará contra el narcotráfico y que protegerá el trabajo de la Policía. Si en el futuro no lo hace, todos sabremos quién es el responsable de la violencia, porque la violencia genera violencia, venga de donde venga. En los años 83, 84 y 85 ingresamos a esas zonas, dormimos en carpas, en el monte, por varios días, y nunca tuvimos un opositor (al trabajo) como ahora.