Ferrari todavía no se lo cree
La escudería sigue convencida de su potencial y habla de problemas de configuración. Vettel, a As: "Nunca encontré la confianza de Barcelona".
Jesús Balseiro
As
Lo preguntó Vettel por radio a sus ingenieros en mitad de su segundo ‘stint’, el peor de todos montando los neumáticos medios: "¿Por qué somos tan lentos?". "No lo sabemos", respondieron. En el box de Ferrari nadie se explica el tremendo paso atrás que han dado en comparación con el potencial mostrado en Barcelona, cuando pusieron en la pista al mejor coche de la parrilla, con cierto margen. Lo que sí parece claro es que no es un problema de base del SF90, que sigue siendo un coche con muchísimas posibilidades, sino de la configuración empleada en Albert Park y de las particularidades que tiene este trazado semiurbano.
Mattia Binotto, director de la escudería, así lo explica: "Sufrimos con los neumáticos, intentamos diferentes configuraciones pero nunca terminamos de encontrar el equilibrio correcto. Nos faltaba agarre. ¿Sabemos por qué? Probablemente no. Tenemos que volver, analizar los datos y entender lo que ha sucedido". "Las condiciones de Albert Park se parecen poco a las de Barcelona. Como dice Toto (Wolff), que es consciente, quizás las encontremos en la próxima carrera. Este fin de semana no refleja el verdadero potencial de nuestro coche, que es mucho mayor, de eso estamos seguros", explicó el dirigente suizo.
As preguntó a Sebastian Vettel sobre las diferencias en la conducción del Ferrari desde Montmeló hasta Australia: "Siendo justo, teníamos menos agarre. En Barcelona estábamos muy contentos con el coche en ese aspecto desde el primer día, el equilibrio era correcto y el coche respondía a lo que le pedía. Tenía una confianza que no he tenido en ningún momento del fin de semana en Australia. Resumiendo, no encontré la confianza que tenía en Barcelona. Había puntos muy fuertes, el rendimiento en algunas curvas era bueno, pero en la mayoría no. Por eso éramos más lentos que otros".
No tiene nada que ver con los problemas que sufrieron hace justo un año, a pesar de ganar la carrera con un golpe de estrategia: "No hay que esconderlo, el año pasado acabamos los test con problemas en el coche, no se comportaba como debía, pero este año es todo lo contrario, se comportaba como esperábamos. Por eso en Australia 2018 el equilibrio no era correcto. Entonces encontramos el ritmo y ganamos la carrera, arreglamos los problemas de los test. Este año el problema no tiene nada que ver con aquello. Por ahora no tenemos una respuesta, pero cuando volvamos lo veremos y la encontraremos. Sabemos que el coche es mejor de lo que hemos visto hasta ahora". "Lo relevante es que en Barcelona sabemos que teníamos otra cosa, que no era como esto. Hay potencial", finaliza el tetracampeón. Ferrari no se cree lo de Australia: hay potencial.
Jesús Balseiro
As
Lo preguntó Vettel por radio a sus ingenieros en mitad de su segundo ‘stint’, el peor de todos montando los neumáticos medios: "¿Por qué somos tan lentos?". "No lo sabemos", respondieron. En el box de Ferrari nadie se explica el tremendo paso atrás que han dado en comparación con el potencial mostrado en Barcelona, cuando pusieron en la pista al mejor coche de la parrilla, con cierto margen. Lo que sí parece claro es que no es un problema de base del SF90, que sigue siendo un coche con muchísimas posibilidades, sino de la configuración empleada en Albert Park y de las particularidades que tiene este trazado semiurbano.
Mattia Binotto, director de la escudería, así lo explica: "Sufrimos con los neumáticos, intentamos diferentes configuraciones pero nunca terminamos de encontrar el equilibrio correcto. Nos faltaba agarre. ¿Sabemos por qué? Probablemente no. Tenemos que volver, analizar los datos y entender lo que ha sucedido". "Las condiciones de Albert Park se parecen poco a las de Barcelona. Como dice Toto (Wolff), que es consciente, quizás las encontremos en la próxima carrera. Este fin de semana no refleja el verdadero potencial de nuestro coche, que es mucho mayor, de eso estamos seguros", explicó el dirigente suizo.
As preguntó a Sebastian Vettel sobre las diferencias en la conducción del Ferrari desde Montmeló hasta Australia: "Siendo justo, teníamos menos agarre. En Barcelona estábamos muy contentos con el coche en ese aspecto desde el primer día, el equilibrio era correcto y el coche respondía a lo que le pedía. Tenía una confianza que no he tenido en ningún momento del fin de semana en Australia. Resumiendo, no encontré la confianza que tenía en Barcelona. Había puntos muy fuertes, el rendimiento en algunas curvas era bueno, pero en la mayoría no. Por eso éramos más lentos que otros".
No tiene nada que ver con los problemas que sufrieron hace justo un año, a pesar de ganar la carrera con un golpe de estrategia: "No hay que esconderlo, el año pasado acabamos los test con problemas en el coche, no se comportaba como debía, pero este año es todo lo contrario, se comportaba como esperábamos. Por eso en Australia 2018 el equilibrio no era correcto. Entonces encontramos el ritmo y ganamos la carrera, arreglamos los problemas de los test. Este año el problema no tiene nada que ver con aquello. Por ahora no tenemos una respuesta, pero cuando volvamos lo veremos y la encontraremos. Sabemos que el coche es mejor de lo que hemos visto hasta ahora". "Lo relevante es que en Barcelona sabemos que teníamos otra cosa, que no era como esto. Hay potencial", finaliza el tetracampeón. Ferrari no se cree lo de Australia: hay potencial.