UNITED 0-PSG 2 / Mbappé y el PSG meten miedo
El conjunto francés venció al United en Old Trafford en una gran segunda parte. Kimpembe hizo el primero y Mbappé sentenció. Pogba, expulsado, se pierde la vuelta.
Alberto Muñoz
As
No estaban Neymar ni Cavani, pero no hizo falta. Por allí andaban Di María y Mbappé. Argentino y francés se tragaron de un bocado al Manchester United de Solskjaer, que no había perdido en los casi dos meses que lleva en el puesto, y prácticamente sentenciaron una eliminatoria que no verá a Pogba en la vuelta, expulsado por un calentón en los últimos minutos. El ‘Fideo’ dio dos asistencias, una para Kimpembe y otra para Mbappé, que dejaron mudo Old Trafford.
Demasiado respeto y demasiado miedo a perder. Al menos eso es lo que demostraron ambos equipos durante los primeros 45 minutos en los que hubo más oportunidades de que hubiese un expulsado que un gol. Ni red devils ni parisinos consiguieron crear una sola ocasión clara de gol, aunque dos arrancadas, una de Mbappé y otra de Pogba, pudieron cambiar el signo del partido.
Precisamente el medio francés pudo ser incluso expulsado durante la primera media hora de juego con tres entradas al límite que se saldaron con una única tarjeta amarilla. Una irresponsabilidad propia de un líder que terminó siendo expulsado en los minutos finales del encuentro por una absurda entrada sobre Dani Alves.
Sobre todo Pogba fracasó porque no supo guiar a su equipo a imponerse como debería. El PSG llegaba con bajas importantes, se plantaba en el Teatro de los Sueños contra un equipo aún invicto y sintiéndose inferior a los ingleses, y ante la ausencia de ese paso adelante de los de Solskjaer se crecieron en la segunda mitad.
Di María volvió a demostrar que más que un torbellino es un huracán cuando quiere, y suyo fue el centro de córner que terminó con el primer gol de Kimpembe como profesional. El argentino, enfervorizado, se enfrentó con la grada que un día le aplaudió. El Fideo no dejó ahí el roto a su ex equipo, sino que poco después puso un balón perfecto para que Mbappé llegase al espacio con una velocidad endiablada que le permitió definir sin problemas ante De Gea al primer toque.
El partido estaba suponiendo una auténtica dosis de realidad para un equipo que vivía en una burbuja desde que Mourinho fue despedido el pasado 17 de diciembre. Parecía que todo iba bien y que todo iba a ir siempre bien, pero lo cierto es que cuando suena la música de la Champions las ensoñaciones que producen los buenos resultados en Premier League suelen terminar en decepción.
También es verdad que las lesiones de Lingard, al que sustituyó un Alexis irreconocible, y Martial, por el que entró un Mata que poco más pudo hacer, mermaron a los red devils en ataque, pero vista la escasa creación de juego y la ausencia de Pogba para la vuelta parece muy difícil que los ingleses vayan a ser capaces de darle la vuelta a la eliminatoria.
Alberto Muñoz
As
No estaban Neymar ni Cavani, pero no hizo falta. Por allí andaban Di María y Mbappé. Argentino y francés se tragaron de un bocado al Manchester United de Solskjaer, que no había perdido en los casi dos meses que lleva en el puesto, y prácticamente sentenciaron una eliminatoria que no verá a Pogba en la vuelta, expulsado por un calentón en los últimos minutos. El ‘Fideo’ dio dos asistencias, una para Kimpembe y otra para Mbappé, que dejaron mudo Old Trafford.
Demasiado respeto y demasiado miedo a perder. Al menos eso es lo que demostraron ambos equipos durante los primeros 45 minutos en los que hubo más oportunidades de que hubiese un expulsado que un gol. Ni red devils ni parisinos consiguieron crear una sola ocasión clara de gol, aunque dos arrancadas, una de Mbappé y otra de Pogba, pudieron cambiar el signo del partido.
Precisamente el medio francés pudo ser incluso expulsado durante la primera media hora de juego con tres entradas al límite que se saldaron con una única tarjeta amarilla. Una irresponsabilidad propia de un líder que terminó siendo expulsado en los minutos finales del encuentro por una absurda entrada sobre Dani Alves.
Sobre todo Pogba fracasó porque no supo guiar a su equipo a imponerse como debería. El PSG llegaba con bajas importantes, se plantaba en el Teatro de los Sueños contra un equipo aún invicto y sintiéndose inferior a los ingleses, y ante la ausencia de ese paso adelante de los de Solskjaer se crecieron en la segunda mitad.
Di María volvió a demostrar que más que un torbellino es un huracán cuando quiere, y suyo fue el centro de córner que terminó con el primer gol de Kimpembe como profesional. El argentino, enfervorizado, se enfrentó con la grada que un día le aplaudió. El Fideo no dejó ahí el roto a su ex equipo, sino que poco después puso un balón perfecto para que Mbappé llegase al espacio con una velocidad endiablada que le permitió definir sin problemas ante De Gea al primer toque.
El partido estaba suponiendo una auténtica dosis de realidad para un equipo que vivía en una burbuja desde que Mourinho fue despedido el pasado 17 de diciembre. Parecía que todo iba bien y que todo iba a ir siempre bien, pero lo cierto es que cuando suena la música de la Champions las ensoñaciones que producen los buenos resultados en Premier League suelen terminar en decepción.
También es verdad que las lesiones de Lingard, al que sustituyó un Alexis irreconocible, y Martial, por el que entró un Mata que poco más pudo hacer, mermaron a los red devils en ataque, pero vista la escasa creación de juego y la ausencia de Pogba para la vuelta parece muy difícil que los ingleses vayan a ser capaces de darle la vuelta a la eliminatoria.