Un Modric en plenitud
Solari le ahorró siete partidos entre noviembre y enero y el croata ahora vuela. Ante el Atleti fue el mejor pasador blanco y dio una asistencia a Bale.
Manu de Juan
As
Es oficial: Modric ha vuelto. El croata ya había dejado entrever brotes verdes en varios encuentros pasados (Sevilla, Betis...), pero el punto más exigente del calendario blanco ha coincidido con la ebullición más constante del cerebro de Zadar. Ante el Atlético en el derbi del Metropolitano fue el faro que guió el mediocampo blanco: dio más pases que nadie (78), también más pases buenos que ninguno de sus compañeros (71, el 91%), recuperó siete balones (sólo Casemiro, con once, le superó) y dio una asistencia de gol a Bale para que el galés hiciese el 1-3 y remachase la faena.
Es un Modric en plenitud, al fin, tras meses de versiones incompletas, marcadas por un físico castigado a base de años (33) y de las secuelas que dejó el Mundial de Rusia. Al croata le ha llevado seis meses afinarse, pero ahora el Madrid lo agradece. Ya el pasado miércoles, en el Camp Nou, el croata puso su granito para cosechar un 1-1 esperanzador de cara a la vuelta, que puede dar el pase al Madrid para una nueva final de Copa del Rey: 94% de pases buenos, cinco recuperaciones, sólo seis pérdidas...
Y en ambos partidos, Modric aguantó los 90 minutos sobre el césped. Por ahí empieza su retorno al mejor nivel. Solari, consciente de que la edad es ya un handicap para el pequeño balcánico, le ha reservado en siete de los 25 partidos que lleva al frente del Real Madrid: dos de Champions y cinco de Copa del Rey. El argentino le ha dado la titularidad en sus 13 encuentros de Liga y le ha liberado siempre que pudo del resto de compromisos, apostando por las alternativas que ofrece la plantilla (Ceballos, Valverde, Llorente, Isco...). El resultado es palpable: Modric ahora vuela.
Vuela como eslabón imprescindible del engranaje blanco y vuela de cara a la portería rival: lleva tres goles y seis asistencias este curso, una participación global en nueve goles que le coloca sólo por detrás de Benzema (24: 18 goles, seis asistencias), Bale (17: 12 goles, cinco asistencias), Ramos (12: once goles, una asistencia) y Vinicius (12: cuatro goles, ocho asistencias).
Apunta a Ámsterdam
Ante el Atlético, Modric vio su quinta amarilla en esta Liga 2018-19, por lo que cumplirá ciclo ante el Girona en casa el próximo domingo 17 a las 12:00 horas, en el Bernabéu. Quedaba por ver si Solari pensaba reservarle, al menos algunos minutos, en Ámsterdam contra el Ajax, el miércoles en la ida de octavos de final de la Champions. Pero la sanción en Liga le abre de par en par las puertas para jugar, si es necesario, los 90 minutos en el Johan Cruyff y descansar luego hasta el domingo 24, cuando el Madrid visitará al Levante en el Ciutat de Valencia.
As
Es oficial: Modric ha vuelto. El croata ya había dejado entrever brotes verdes en varios encuentros pasados (Sevilla, Betis...), pero el punto más exigente del calendario blanco ha coincidido con la ebullición más constante del cerebro de Zadar. Ante el Atlético en el derbi del Metropolitano fue el faro que guió el mediocampo blanco: dio más pases que nadie (78), también más pases buenos que ninguno de sus compañeros (71, el 91%), recuperó siete balones (sólo Casemiro, con once, le superó) y dio una asistencia de gol a Bale para que el galés hiciese el 1-3 y remachase la faena.
Es un Modric en plenitud, al fin, tras meses de versiones incompletas, marcadas por un físico castigado a base de años (33) y de las secuelas que dejó el Mundial de Rusia. Al croata le ha llevado seis meses afinarse, pero ahora el Madrid lo agradece. Ya el pasado miércoles, en el Camp Nou, el croata puso su granito para cosechar un 1-1 esperanzador de cara a la vuelta, que puede dar el pase al Madrid para una nueva final de Copa del Rey: 94% de pases buenos, cinco recuperaciones, sólo seis pérdidas...
Y en ambos partidos, Modric aguantó los 90 minutos sobre el césped. Por ahí empieza su retorno al mejor nivel. Solari, consciente de que la edad es ya un handicap para el pequeño balcánico, le ha reservado en siete de los 25 partidos que lleva al frente del Real Madrid: dos de Champions y cinco de Copa del Rey. El argentino le ha dado la titularidad en sus 13 encuentros de Liga y le ha liberado siempre que pudo del resto de compromisos, apostando por las alternativas que ofrece la plantilla (Ceballos, Valverde, Llorente, Isco...). El resultado es palpable: Modric ahora vuela.
Vuela como eslabón imprescindible del engranaje blanco y vuela de cara a la portería rival: lleva tres goles y seis asistencias este curso, una participación global en nueve goles que le coloca sólo por detrás de Benzema (24: 18 goles, seis asistencias), Bale (17: 12 goles, cinco asistencias), Ramos (12: once goles, una asistencia) y Vinicius (12: cuatro goles, ocho asistencias).
Apunta a Ámsterdam
Ante el Atlético, Modric vio su quinta amarilla en esta Liga 2018-19, por lo que cumplirá ciclo ante el Girona en casa el próximo domingo 17 a las 12:00 horas, en el Bernabéu. Quedaba por ver si Solari pensaba reservarle, al menos algunos minutos, en Ámsterdam contra el Ajax, el miércoles en la ida de octavos de final de la Champions. Pero la sanción en Liga le abre de par en par las puertas para jugar, si es necesario, los 90 minutos en el Johan Cruyff y descansar luego hasta el domingo 24, cuando el Madrid visitará al Levante en el Ciutat de Valencia.
