Lío tremendo Kepa-Sarri: el portero se negó a ser sustituido
Maurizio Sarri quería meter a Willy Caballero por los problemas físicos del español y pensando en los penaltis ante el Manchester City pero Kepa no le hizo caso.
Pablo M. Fuentenebro
As
El esperpento se ha instalado en el Chelsea. En el último minuto de la segunda parte de la prórroga de la Carabao Cup, Kepa Arrizabalaga, portero del Chelsea, se negó a abandonar el campo sustituido. El italiano Sarri había mandado a Willy Caballero saltar al campo por el portero español, pero Kepa se negó a ser cambiado. Incluso, el árbitro habló con Kepa para que abandonara el césped pero el español se negó en rotundo e hizo números aspavientos para no salir del césped de Wembley. El cuarto árbitro ya había mostrado la tablilla con el número 1 de Kepa por el 13 de Caballero. El argentino esperaba en la banda pero Kepa no quiso salir.
El técnico italiano había tomado la decisión de sacar al guardameta argentino por Kepa, después de que el exportero del Athletic se quejará de problemas físicos, tras sacar un remate a Sergio Agüero, y con la mente puesta en la tanda de penaltis. El enfado de Sarri fue mayúsculo y amagó con marcharse del banquillo hacía el vestuario. La autoridad del entrenador italiano, muy tocado por los malos resultados, queda en entredicho.
Luego en la tanda de penalti el Chelsea perdió y Kepa sólo pudo atajar el lanzamiento de Sané.
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El esperpento se ha instalado en el Chelsea. En el último minuto de la segunda parte de la prórroga de la Carabao Cup, Kepa Arrizabalaga, portero del Chelsea, se negó a abandonar el campo sustituido. El italiano Sarri había mandado a Willy Caballero saltar al campo por el portero español, pero Kepa se negó a ser cambiado. Incluso, el árbitro habló con Kepa para que abandonara el césped pero el español se negó en rotundo e hizo números aspavientos para no salir del césped de Wembley. El cuarto árbitro ya había mostrado la tablilla con el número 1 de Kepa por el 13 de Caballero. El argentino esperaba en la banda pero Kepa no quiso salir.
El técnico italiano había tomado la decisión de sacar al guardameta argentino por Kepa, después de que el exportero del Athletic se quejará de problemas físicos, tras sacar un remate a Sergio Agüero, y con la mente puesta en la tanda de penaltis. El enfado de Sarri fue mayúsculo y amagó con marcharse del banquillo hacía el vestuario. La autoridad del entrenador italiano, muy tocado por los malos resultados, queda en entredicho.
Luego en la tanda de penalti el Chelsea perdió y Kepa sólo pudo atajar el lanzamiento de Sané.
