"Muerto de hambre": la agresión de un futbolista chileno a su colega de Venezuela que genera indignación
Nicolás Díaz tuvo duras palabras hacia Pablo Bonilla durante el partido que enfrentó a sus respectivas selecciones en el Sudamericano Sub 20. El jugador de "La Roja" pidió disculpas públicas a través de una carta
Infobae
Durante el partido que las selecciones de Chile y Venezuela protagonizaron en el Sudamericano Sub 20, que terminó con victoria de la "Vinotinto" por 2-1 en Rancagua, se produjo un hecho que ha recibido una fuerte desaprobación en el mundo del fútbol.
Durante una acción del encuentro, y luego de recibir una dura falta, el futbolista chileno Nicolás Díaz le dijo "Muerto de hambre" en repetidas ocasiones a su colega venezolano Pablo Bonilla. Las cámaras de televisión captaron el momento en que el jugador de "La Roja" agredió verbalmente al rival, lo que desató una ola de indignación en las redes sociales.
Por la trascendencia que tomó el hecho -y también por la posibilidad de recibir una dura sanción por parte de la Conmebol-, Díaz debió salir a pedir disculpas públicas. Lo hizo a través de un escrito en su cuenta de la red social Instagram y también en un comunicado que difundió de manera oficial la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile (ANFP).
En el comunicado, el futbolista chileno (hermano del ex defensor de San Lorenzo, Paulo Díaz) no solo se dirigió a Bonilla -quien durante el partido no reaccionó ante la provocación del rival-, sino también al entrenador venezolano Rafael Dudamel y a todos los integrantes de la delegación del elenco "Vinotinto".
Por el momento, la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) no ha informado si iniciará algún tipo de reclamo ante las autoridades por el comportamiento de Díaz.
Aunque no se refirió puntualmente al episodio ocurrido en la cancha, el DT Dudamel dejó un claro mensaje sobre la situación que atraviesa Venezuela. "Gracias Chile por abrirle espacio a los venezolanos que estamos regados por el mundo. Les digo a mis jugadores que en cada lugar que visitamos, veo a los venezolanos ganándose la vida con dignidad. Hoy le dimos alegría", dijo ante la prensa una vez consumada la victoria de su equipo.
Y, concluyó: "Mi mensaje al país: aquí tienen a 23 futbolistas y seres humanos que están dando la vida por el país y se sienten orgullosos de ser venezolanos".
La carta completa de Nicolás Díaz:
Estimados Sres Rafael Dudamel, Pablo Bonilla y miembros de la delegación de la Selección Venezolana Sub 20:
Por medio de la presente, quisiera hacerles llegar mis más sinceras disculpas por mi reprochable actitud hacia Pablo Bonilla y el pueblo venezolano durante el desarrollo del partido entre Chileny Venezuela por el Sudamericano Sub 20.
Soy consciente de la larga historia de amistad entre Venezuela y Chile. Durante muchos años, miles de chilenos emigraron y fueron recibidos de manera cariñosa y fraterna. Todas las referencias que tengo de compatriotas que vivieron allá son tremendamente positivas y dan cuenta de un hermoso país, al que nunca pretendí lastimar con mis dichos.
Lamento profundamente mi reacción hacia Pablo Bonilla. En ningún caso, mi intención fue la de denigrar o insultar al pueblo venezolano. Al igual que millones de chilenos, he tenido la suerte de compartir con personas que han llegado de Venezuela a Chile y me he dado cuenta de su calidad humana.
Sin duda, esta triste experiencia me servirá en mi carrera como deportista. Los jugadores de fútbol tenemos una enorme responsabilidad pública. Son millones de personas las que ven en esta actividad el reflejo de valores como el compañerismo, el respeto y, por sobre todas las cosas, el juego limpio.
"Las cosas que pasan en la cancha, se quedan en la cancha" es un dicho que se utiliza de forma habitual en esta actividad, pero no justifica actitudes irresponsables y dichos tan hirientes como el que cometí. Soy un convencido de que el fútbol es mucho más que esto. Mi comportamiento como deportista profesional y persona pública tiene que ser siempre mucho más que esto.
Pido las más sinceras disculpas a Pablo Bonilla, al Profesor Rafael Dudamel y todo su equipo de trabajo, a la Federación Venezolana de Fútbol, al pueblo venezolano, a toda la comunidad venezolana que vive en Chile y, por supuesto, a todo aquel que se sintió ofendido por mis dichos.
En la próxima jornada en que nos veamos en el Estadio El Teniente, espero poder entregarles mis más sinceras disculpas personalmente.
Infobae
Durante el partido que las selecciones de Chile y Venezuela protagonizaron en el Sudamericano Sub 20, que terminó con victoria de la "Vinotinto" por 2-1 en Rancagua, se produjo un hecho que ha recibido una fuerte desaprobación en el mundo del fútbol.
Durante una acción del encuentro, y luego de recibir una dura falta, el futbolista chileno Nicolás Díaz le dijo "Muerto de hambre" en repetidas ocasiones a su colega venezolano Pablo Bonilla. Las cámaras de televisión captaron el momento en que el jugador de "La Roja" agredió verbalmente al rival, lo que desató una ola de indignación en las redes sociales.
Por la trascendencia que tomó el hecho -y también por la posibilidad de recibir una dura sanción por parte de la Conmebol-, Díaz debió salir a pedir disculpas públicas. Lo hizo a través de un escrito en su cuenta de la red social Instagram y también en un comunicado que difundió de manera oficial la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile (ANFP).
En el comunicado, el futbolista chileno (hermano del ex defensor de San Lorenzo, Paulo Díaz) no solo se dirigió a Bonilla -quien durante el partido no reaccionó ante la provocación del rival-, sino también al entrenador venezolano Rafael Dudamel y a todos los integrantes de la delegación del elenco "Vinotinto".
Por el momento, la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) no ha informado si iniciará algún tipo de reclamo ante las autoridades por el comportamiento de Díaz.
Aunque no se refirió puntualmente al episodio ocurrido en la cancha, el DT Dudamel dejó un claro mensaje sobre la situación que atraviesa Venezuela. "Gracias Chile por abrirle espacio a los venezolanos que estamos regados por el mundo. Les digo a mis jugadores que en cada lugar que visitamos, veo a los venezolanos ganándose la vida con dignidad. Hoy le dimos alegría", dijo ante la prensa una vez consumada la victoria de su equipo.
Y, concluyó: "Mi mensaje al país: aquí tienen a 23 futbolistas y seres humanos que están dando la vida por el país y se sienten orgullosos de ser venezolanos".
La carta completa de Nicolás Díaz:
Estimados Sres Rafael Dudamel, Pablo Bonilla y miembros de la delegación de la Selección Venezolana Sub 20:
Por medio de la presente, quisiera hacerles llegar mis más sinceras disculpas por mi reprochable actitud hacia Pablo Bonilla y el pueblo venezolano durante el desarrollo del partido entre Chileny Venezuela por el Sudamericano Sub 20.
Soy consciente de la larga historia de amistad entre Venezuela y Chile. Durante muchos años, miles de chilenos emigraron y fueron recibidos de manera cariñosa y fraterna. Todas las referencias que tengo de compatriotas que vivieron allá son tremendamente positivas y dan cuenta de un hermoso país, al que nunca pretendí lastimar con mis dichos.
Lamento profundamente mi reacción hacia Pablo Bonilla. En ningún caso, mi intención fue la de denigrar o insultar al pueblo venezolano. Al igual que millones de chilenos, he tenido la suerte de compartir con personas que han llegado de Venezuela a Chile y me he dado cuenta de su calidad humana.
Sin duda, esta triste experiencia me servirá en mi carrera como deportista. Los jugadores de fútbol tenemos una enorme responsabilidad pública. Son millones de personas las que ven en esta actividad el reflejo de valores como el compañerismo, el respeto y, por sobre todas las cosas, el juego limpio.
"Las cosas que pasan en la cancha, se quedan en la cancha" es un dicho que se utiliza de forma habitual en esta actividad, pero no justifica actitudes irresponsables y dichos tan hirientes como el que cometí. Soy un convencido de que el fútbol es mucho más que esto. Mi comportamiento como deportista profesional y persona pública tiene que ser siempre mucho más que esto.
Pido las más sinceras disculpas a Pablo Bonilla, al Profesor Rafael Dudamel y todo su equipo de trabajo, a la Federación Venezolana de Fútbol, al pueblo venezolano, a toda la comunidad venezolana que vive en Chile y, por supuesto, a todo aquel que se sintió ofendido por mis dichos.
En la próxima jornada en que nos veamos en el Estadio El Teniente, espero poder entregarles mis más sinceras disculpas personalmente.