Manto de impunidad cubre los casos de violaciones en Mairana

Una denuncia destapó al menos 20 casos de vejación en el municipio cruceño cometidos por un clan familiar que tiene lazos poderosos con autoridades locales.

Juan Carlos Véliz / La Paz
El viernes 11 de enero se conoció que un médico y un farmacéutico violaron a una adolescente de 15 años en Mairana. El caso fue la punta del ovillo de al menos 20 casos de abusos sexuales cometidos por un clan de violadores en ese municipio cruceño.


La abogada de las víctimas del municipio de Mairana, Darly Franco, reveló que el número de adolescentes vejadas puede superar los 20 y demandó la actuación inmediata del Ministerio de Justicia para agilizar el avance de las investigaciones y dar con los autores, ahora prófugos.

“He entendido que son más de 20 el número de las víctimas que tienen el valor de denunciar a este clan familiar que afectó a muchas adolescentes. De momento ya hay cinco identificadas y tres que me han traído sus expedientes, cada caso es desgarrador”, informó la jurista.

Los abusos fueron cometidos desde hace tres años al amparo de una repugnante red de protección de familiares que ocupan cargos clave en ese municipio.

La abogada Franco señala que al revisar los cuadernos de investigación se evidencia que las autoridades de la Fiscalía, Defensoría de la Niñez de Mairana y Vallegrande favorecieron al clan familiar de violadores.

Las autoridades identificaron al médico Robert Mendoza como cabecilla de la banda que abandonó Mairana junto a su familia y allegados.

La jurista denunció que en las querellas presentadas por las víctimas, que fueron rechazadas sin mayores argumentos, están involucrados el hermano, tío y sobrino de Mendoza.



Además, reveló un dato escalofriante: la encargada de la Defensoría de la Niñez, Margo Guzmán, es prima hermana del imputado y la fiscal de la provincia también es su pariente.

El padre de la última víctima que denunció a Mendoza y al farmaceútico por la violación reveló otro dato espantoso: la fiscal que apellida Banegas -que tenía a cargo el caso de su hija- le habría dicho “por qué te has buscado abogada, si esto aquí nomás se podía arreglar” cuando pidió celeridad en las pesquisas.

La protección de las autoridades fue aprovechada por el clan de violadores para dejar Mairana sin rastro mientras las víctimas y pobladores no lograron la atención de las autoridades sino después de 12 días y un bloqueo de caminos. Ahora los victimadores tienen orden de aprehensión.

La abogada de las víctimas demandó la intervención inmediata del ministro de Justicia, Héctor Arce, del fiscal departamental y de policías de la FELCV de la capital cruceña para romper el fornido manto de impunidad.

Melvy Jaramillo, representante del Ministerio de Justicia, dijo ayer que Arce instruyó el acompañamiento de este caso.

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