May descartó recurrir a elecciones generales tras desacuerdos con su partido por el Brexit
Londres, AS
La primera ministra británica, Theresa May, descartó hoy la convocatoria de unas elecciones generales tras el reto del Partido Conservador a su liderazgo, promovido por diputados de sus filas que rechazan su acuerdo del “brexit”.
En la sesión semanal de preguntas a la jefa del Gobierno en la Cámara de los Comunes, May insistió en que unos comicios generales “no serían en este momento de interés nacional”, después también de retrasarse la votación parlamentaria sobre el acuerdo de retirada de la Unión Europea (UE).
“Creo que debemos respetar el referéndum que se celebró en 2016″, reiteró una vez más la líder de los conservadores, en una sesión parlamentaria agitada.
La “premier” aseguró que está haciendo “progresos” en sus contactos con líderes europeos ante las inquietudes que ha provocado el pacto entre los parlamentarios, por la salvaguarda pensada para evitar una frontera física entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte.
“Ninguna de las personas con las que me reuní ayer (por los líderes europeos) dudó sobre la intensa preocupación que hay en la cámara (de los Comunes) sobre el ‘backstop’ (salvaguarda)”, insistió May, quien esta noche afronta una moción de confianza iniciada por su propio partido, el Conservador.
El líder de la oposición laborista, el izquierdista Jeremy Corbyn, exigió a May que presentase en la Cámara el pacto del “brexit” al que podría llegar con el bloque europeo, tras un periplo que realizó ayer para entrevistarse con dirigentes políticos de la UE, en un intento de mejorarlo y lograr un mayor apoyo parlamentario.
La primera ministra contestó que lo único que Corbyn buscaba era derribar el Gobierno, crear divisiones y perjudicar a la economía, en lugar de alcanzar un buen acuerdo de salida de la UE para el país.
El lunes, May retrasó la votación que iba a celebrarse ayer sobre el pacto del “brexit” al conocer que no contaba con los apoyos suficientes para que el documento superara este trámite.
El llamado Comité 1922, que reúne al grupo conservador en los Comunes, recibió las 48 cartas necesarias para presentar la moción de confianza contra la primera ministra, quien deberá dimitir si pierde en la votación que se celebrará esta tarde.
En caso de ganar la votación interna entre los diputados “tories”, no habrá otro proceso interno contra May durante un año, según las reglas de la formación en el poder.
Pero si pierde, ésta dimitirá aunque seguirá como primera ministra hasta la elección de un nuevo líder conservador, quien automáticamente se convertirá en el jefe del Gobierno.
La primera ministra británica, Theresa May, descartó hoy la convocatoria de unas elecciones generales tras el reto del Partido Conservador a su liderazgo, promovido por diputados de sus filas que rechazan su acuerdo del “brexit”.
En la sesión semanal de preguntas a la jefa del Gobierno en la Cámara de los Comunes, May insistió en que unos comicios generales “no serían en este momento de interés nacional”, después también de retrasarse la votación parlamentaria sobre el acuerdo de retirada de la Unión Europea (UE).
“Creo que debemos respetar el referéndum que se celebró en 2016″, reiteró una vez más la líder de los conservadores, en una sesión parlamentaria agitada.
La “premier” aseguró que está haciendo “progresos” en sus contactos con líderes europeos ante las inquietudes que ha provocado el pacto entre los parlamentarios, por la salvaguarda pensada para evitar una frontera física entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte.
“Ninguna de las personas con las que me reuní ayer (por los líderes europeos) dudó sobre la intensa preocupación que hay en la cámara (de los Comunes) sobre el ‘backstop’ (salvaguarda)”, insistió May, quien esta noche afronta una moción de confianza iniciada por su propio partido, el Conservador.
El líder de la oposición laborista, el izquierdista Jeremy Corbyn, exigió a May que presentase en la Cámara el pacto del “brexit” al que podría llegar con el bloque europeo, tras un periplo que realizó ayer para entrevistarse con dirigentes políticos de la UE, en un intento de mejorarlo y lograr un mayor apoyo parlamentario.
La primera ministra contestó que lo único que Corbyn buscaba era derribar el Gobierno, crear divisiones y perjudicar a la economía, en lugar de alcanzar un buen acuerdo de salida de la UE para el país.
El lunes, May retrasó la votación que iba a celebrarse ayer sobre el pacto del “brexit” al conocer que no contaba con los apoyos suficientes para que el documento superara este trámite.
El llamado Comité 1922, que reúne al grupo conservador en los Comunes, recibió las 48 cartas necesarias para presentar la moción de confianza contra la primera ministra, quien deberá dimitir si pierde en la votación que se celebrará esta tarde.
En caso de ganar la votación interna entre los diputados “tories”, no habrá otro proceso interno contra May durante un año, según las reglas de la formación en el poder.
Pero si pierde, ésta dimitirá aunque seguirá como primera ministra hasta la elección de un nuevo líder conservador, quien automáticamente se convertirá en el jefe del Gobierno.