La venta de entradas para la final indigna a River y Boca
Si hay algo que puso de acuerdo a hinchas de River y Boca, fue la venta y disposición de entradas para la final de Copa Libertadores.
Marcos Duran
As
Si hay algo que puso de acuerdo a hinchas de River y Boca, fue la venta y disposición de entradas para la final de Copa Libertadores.
“Casi dos días estuve para intentar sacar entrada. Me dio error con cinco tarjetas diferentes, horas y horas adelante de la computadora” comenta a este diario una hincha de Boca en Barcelona que intentó comprar entrada desde el martes a las 20:00 horas y no lo consiguió.
Los hinchas de River también tuvieron problemas. El sistema se abrió a las 20:00 horas españolas del domingo y pocos minutos más tarde un cartel afirmaba que no había más disponibilidad. Pero no era así.
El sistema de venta de entradas no disponía de una ‘cola virtual’ como en otros casos, si no que automáticamente iba sacando entradas por tandas. Ese hecho hizo que los intentos de muchos hinchas fueran en vano: al elegir zona o asiento el sistema te dirigía al principio del proceso. Una y otra vez.
La Conmebol había puesto a la venta 20.000 entradas para el sector de River (fondo Norte y zonas cercanas en tribuna oeste y este) y otras 20.000 para el sector Boca (lo mismo pero en el fondo Sur). Estas entradas no solo eran para argentinos residentes en España, como se había difundido. Estas entradas las podía comprar cualquier persona no residente en Argentina (aunque esquivar esta situación no era difícil).
En este sistema, un comprador, con datos de una persona, podía comprar hasta cuatro entradas. Este hecho molestó mucho a los organismos de seguridad, que no puede controlar quién compra esas entradas. Uno de los máximos responsables del operativo de seguridad del partido mostró su información a este periódico: “No puede ser que los que vienen de Argentina tengan un control estricto y aquí se puedan comprar cuatro entradas con los datos de solo uno y además se puedan transferir. Es inadmisible”.
Otra hincha de Boca cuenta su experiencia: “Desde que salieron las entradas estuve probando. No podía de ninguna manera, llegué más de 25 veces a poner datos de la tarjeta y me saltaba error. Recién lo conseguí el miércoles de madrugada. Estaba desesperada”.
Lo despropósitos de la Conmebol son patentes día a día. El hecho de llevarse la Copa Libertadores de América a Europa fue solo la punta del iceberg.
Marcos Duran
As
Si hay algo que puso de acuerdo a hinchas de River y Boca, fue la venta y disposición de entradas para la final de Copa Libertadores.
“Casi dos días estuve para intentar sacar entrada. Me dio error con cinco tarjetas diferentes, horas y horas adelante de la computadora” comenta a este diario una hincha de Boca en Barcelona que intentó comprar entrada desde el martes a las 20:00 horas y no lo consiguió.
Los hinchas de River también tuvieron problemas. El sistema se abrió a las 20:00 horas españolas del domingo y pocos minutos más tarde un cartel afirmaba que no había más disponibilidad. Pero no era así.
El sistema de venta de entradas no disponía de una ‘cola virtual’ como en otros casos, si no que automáticamente iba sacando entradas por tandas. Ese hecho hizo que los intentos de muchos hinchas fueran en vano: al elegir zona o asiento el sistema te dirigía al principio del proceso. Una y otra vez.
La Conmebol había puesto a la venta 20.000 entradas para el sector de River (fondo Norte y zonas cercanas en tribuna oeste y este) y otras 20.000 para el sector Boca (lo mismo pero en el fondo Sur). Estas entradas no solo eran para argentinos residentes en España, como se había difundido. Estas entradas las podía comprar cualquier persona no residente en Argentina (aunque esquivar esta situación no era difícil).
En este sistema, un comprador, con datos de una persona, podía comprar hasta cuatro entradas. Este hecho molestó mucho a los organismos de seguridad, que no puede controlar quién compra esas entradas. Uno de los máximos responsables del operativo de seguridad del partido mostró su información a este periódico: “No puede ser que los que vienen de Argentina tengan un control estricto y aquí se puedan comprar cuatro entradas con los datos de solo uno y además se puedan transferir. Es inadmisible”.
Otra hincha de Boca cuenta su experiencia: “Desde que salieron las entradas estuve probando. No podía de ninguna manera, llegué más de 25 veces a poner datos de la tarjeta y me saltaba error. Recién lo conseguí el miércoles de madrugada. Estaba desesperada”.
Lo despropósitos de la Conmebol son patentes día a día. El hecho de llevarse la Copa Libertadores de América a Europa fue solo la punta del iceberg.