La Casa Blanca se acerca a un nuevo cierre de gobierno ante la falta de acuerdo por el presupuesto
El Gobierno de Donald Trump y la oposición demócrata mantienen su enfrentamiento sobre los fondos solicitados para la construcción del muro en la frontera con México. Si no hay un consenso en el Congreso para el viernes 21, cuando expiran los fondos de varias ramas, se procederá a un nuevo "shutdown", el tercero de este mandato
Infobae
La Casa Blanca comienza una semana clave sin torcer su pedido al Congreso de aprobar la partida de 5.000 millones de dólares para construir un muro en la frontera con México, a pesar de que los legisladores de ambos partidos no quieren dárselos, lo que hace cada vez más cercana la posibilidad de un cierre parcial del gobierno.
Si no se llega a un acuerdo, algunas partes del Gobierno federal dejarán de operar el viernes a medianoche.
"Vamos a hacer todo lo que sea necesario para construir el muro fronterizo para detener esta crisis de la inmigración ilegal que no cede", dijo el domingo Stephen Miller, asesor de la Casa Blanca de férrea retórica. Cuando se le preguntó si eso significa que el Gobierno cierre por falta de fondos, respondió: "Si se llega a eso, desde luego".
Este lunes, Trump insistió con el tema e incluso consideró que la construcción del muro sería positivo para las finanzas. "Es tiempo de que ahorremos miles de millones de dólares por año y tengamos, al mismo tiempo, ¡mucho más seguridad y control!", escribió en su Twitter, luego de criticar a los políticos demócratas que argumentan que se puede tener seguridad en las fronteras sin necesidad de levantar la prometida obra.
La semana pasada, Trump declaró que estaría "orgulloso" de tener un cierre gubernamental para hacer que el Congreso apruebe una partida de 5.000 millones de dólares para cumplir su promesa de campaña de construir un muro fronterizo. Pero el presidente carece de los votos en el Congreso controlado por los republicanos como para respaldar el financiamiento del muro a ese nivel.
Legisladores de ambos partidos han insinuado que le corresponde a Trump efectuar la siguiente jugada para solucionar el impasse. La Cámara de Representantes está tomándose un descanso amplio y regresará a trabajar el miércoles por la noche, mientras que el Senado vuelve este lunes luego de tres días de asueto.
Los líderes demócratas en el Congreso, el senador Chuck Schumer y la representante Nancy Pelosi, han propuesto no más de 1.600 millones de dólares, según se esboza en un proyecto de ley bipartidista en el Senado. El dinero no sería para el muro, sino para mejoras en las barreras que ya existen y en otras medidas de seguridad fronteriza. Los demócratas también ofrecieron simplemente mantener el financiamiento a su nivel actual de 1.300 millones de dólares.
Sin mostrar indicios de ceder, Schumer dijo el domingo que depende de Trump decidir si el gobierno federal cerrará sus operaciones parcialmente, lo que provocaría que miles de empleados federales se vayan a su casa sin goce de sueldo durante las festividades navideñas.
Aproximadamente una cuarta parte de los empleados del gobierno resultarían afectados, incluyendo los de los departamentos de Seguridad Nacional, de Transporte, de Agricultura, de Estado y de Justicia, así como los de los parques nacionales.
"Él no va a obtener el muro de ninguna forma", afirmó Schumer.
Hasta el viernes Trump no había aceptado ni rechazado la propuesta de los demócratas, según indicaron estos, diciéndoles que le echaría un vistazo. El mandatario necesitará los votos de los demócratas ahora o en el Año Nuevo.
Schumer declinó decir si los demócratas estarían dispuestos a sopesar otras propuestas distintas a las dos opciones que ofrecieron él y Pelosi.
Los republicanos "deberían unírsenos en una de estas dos propuestas, lo que permitiría tener votos más que suficientes y evitar un cierre" gubernamental, afirmó Schumer. "Luego, si el presidente quiere debatir sobre el muro el año próximo, puede hacerlo. No creo que lo obtenga. Pero no debería utilizar a trabajadores inocentes como rehenes para su rabieta".
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La Casa Blanca comienza una semana clave sin torcer su pedido al Congreso de aprobar la partida de 5.000 millones de dólares para construir un muro en la frontera con México, a pesar de que los legisladores de ambos partidos no quieren dárselos, lo que hace cada vez más cercana la posibilidad de un cierre parcial del gobierno.
Si no se llega a un acuerdo, algunas partes del Gobierno federal dejarán de operar el viernes a medianoche.
"Vamos a hacer todo lo que sea necesario para construir el muro fronterizo para detener esta crisis de la inmigración ilegal que no cede", dijo el domingo Stephen Miller, asesor de la Casa Blanca de férrea retórica. Cuando se le preguntó si eso significa que el Gobierno cierre por falta de fondos, respondió: "Si se llega a eso, desde luego".
Este lunes, Trump insistió con el tema e incluso consideró que la construcción del muro sería positivo para las finanzas. "Es tiempo de que ahorremos miles de millones de dólares por año y tengamos, al mismo tiempo, ¡mucho más seguridad y control!", escribió en su Twitter, luego de criticar a los políticos demócratas que argumentan que se puede tener seguridad en las fronteras sin necesidad de levantar la prometida obra.
La semana pasada, Trump declaró que estaría "orgulloso" de tener un cierre gubernamental para hacer que el Congreso apruebe una partida de 5.000 millones de dólares para cumplir su promesa de campaña de construir un muro fronterizo. Pero el presidente carece de los votos en el Congreso controlado por los republicanos como para respaldar el financiamiento del muro a ese nivel.
Legisladores de ambos partidos han insinuado que le corresponde a Trump efectuar la siguiente jugada para solucionar el impasse. La Cámara de Representantes está tomándose un descanso amplio y regresará a trabajar el miércoles por la noche, mientras que el Senado vuelve este lunes luego de tres días de asueto.
Los líderes demócratas en el Congreso, el senador Chuck Schumer y la representante Nancy Pelosi, han propuesto no más de 1.600 millones de dólares, según se esboza en un proyecto de ley bipartidista en el Senado. El dinero no sería para el muro, sino para mejoras en las barreras que ya existen y en otras medidas de seguridad fronteriza. Los demócratas también ofrecieron simplemente mantener el financiamiento a su nivel actual de 1.300 millones de dólares.
Sin mostrar indicios de ceder, Schumer dijo el domingo que depende de Trump decidir si el gobierno federal cerrará sus operaciones parcialmente, lo que provocaría que miles de empleados federales se vayan a su casa sin goce de sueldo durante las festividades navideñas.
Aproximadamente una cuarta parte de los empleados del gobierno resultarían afectados, incluyendo los de los departamentos de Seguridad Nacional, de Transporte, de Agricultura, de Estado y de Justicia, así como los de los parques nacionales.
"Él no va a obtener el muro de ninguna forma", afirmó Schumer.
Hasta el viernes Trump no había aceptado ni rechazado la propuesta de los demócratas, según indicaron estos, diciéndoles que le echaría un vistazo. El mandatario necesitará los votos de los demócratas ahora o en el Año Nuevo.
Schumer declinó decir si los demócratas estarían dispuestos a sopesar otras propuestas distintas a las dos opciones que ofrecieron él y Pelosi.
Los republicanos "deberían unírsenos en una de estas dos propuestas, lo que permitiría tener votos más que suficientes y evitar un cierre" gubernamental, afirmó Schumer. "Luego, si el presidente quiere debatir sobre el muro el año próximo, puede hacerlo. No creo que lo obtenga. Pero no debería utilizar a trabajadores inocentes como rehenes para su rabieta".