Europa espera a Marco Asensio
Madrid, AS
Europa consuela al Real Madrid (vulgar este año en Liga pero ya clasificado para octavos de la Champions como primero de grupo a falta de un partido) y puede ser la vitamina para Marco Asensio. El balear, caído al equipo B con Solari, apunta al once de esta tarde contra el CSKA y tiene una nueva oportunidad de responder a su suplencia con trabajo y goles. Como hizo la pasada semana en Copa ante el Melilla, en su última titularidad (dos goles y una asistencia). La Champions, esa competición donde ya ha dejado huella, le espera esta temporada.
Porque Asensio está pasando de puntillas por esta Champions. Titular habitual con Lopetegui, sólo estuvo en el once en uno de los tres partidos que jugó con el técnico vasco en la máxima competición continental: la dura derrota contra el CSKA en Moscú (1-0). Acumuló 133 minutos en los que no tuvo trascendencia. Un escenario que se ha oscurecido de forma abrupta con la llegada de Solari, que le ha utilizado únicamente seis minutos en dos encuentros (Viktoria Plzen y Roma). Nadie, salvo Vallejo, Keylor y Casilla, ha jugado menos que Asensio en Champions con el argentino. La temporada pasada jugó 187 minutos en la fase de grupos, el 41,5% del total (se perdió un encuentro por lesión); este año suma 139, el 30%...
Por eso, el partido de esta tarde aparece en el campo de visión de Asensio como otra gran ocasión de mostrar a Solari su buena disposición para revertir esta situación con un juego activo y entusiasta. Como hizo contra el Melilla. En aquella ocasión, el partido iba río abajo (0-4 a favor en la ida), pero el balear no salió a cubrir el expediente y pidió ‘el indulto’ con un buenísimo partido. Después de no estar bien ante el Huesca (salió desde el banquillo en el 76’), como el resto del equipo, hoy volverá al once en una competición en la que siempre va de menos a más y ya ha maravillado a toda Europa.
'Feeling' con la Champions
En la 2016-17, en su primera temporada en el Real Madrid, derribó la puerta de Zidane a puntapiés con una actuación de campanillas contra el Bayern (en la ida de cuartos, en el Allianz, asistió a Cristiano; en la vuelta cerró la eliminatoria con un golazo), brilló en la ida de semifinales ante el Atlético y metió la Duodécima en la maleta con el último gol de la final contra la Juventus. La temporada pasada, Europa volvió a frotarse los ojos con el balear. ‘Mató’ al PSG en la ida de octavos con dos escapadas que acabaron en goles de Cristiano y Marcelo (3-1) y se puso otra medalla en el pecho en la vuelta (1-2) tras desplegar todas sus virtudes. Las mismas con las que fulminó al Bayern en la ida de semifinales con el 1-2 que allanó el camino hacia la final. Este año aún no ha dado el golpe en la mesa. Hoy tiene una nueva oportunidad. Europa le espera.
Europa consuela al Real Madrid (vulgar este año en Liga pero ya clasificado para octavos de la Champions como primero de grupo a falta de un partido) y puede ser la vitamina para Marco Asensio. El balear, caído al equipo B con Solari, apunta al once de esta tarde contra el CSKA y tiene una nueva oportunidad de responder a su suplencia con trabajo y goles. Como hizo la pasada semana en Copa ante el Melilla, en su última titularidad (dos goles y una asistencia). La Champions, esa competición donde ya ha dejado huella, le espera esta temporada.
Porque Asensio está pasando de puntillas por esta Champions. Titular habitual con Lopetegui, sólo estuvo en el once en uno de los tres partidos que jugó con el técnico vasco en la máxima competición continental: la dura derrota contra el CSKA en Moscú (1-0). Acumuló 133 minutos en los que no tuvo trascendencia. Un escenario que se ha oscurecido de forma abrupta con la llegada de Solari, que le ha utilizado únicamente seis minutos en dos encuentros (Viktoria Plzen y Roma). Nadie, salvo Vallejo, Keylor y Casilla, ha jugado menos que Asensio en Champions con el argentino. La temporada pasada jugó 187 minutos en la fase de grupos, el 41,5% del total (se perdió un encuentro por lesión); este año suma 139, el 30%...
Por eso, el partido de esta tarde aparece en el campo de visión de Asensio como otra gran ocasión de mostrar a Solari su buena disposición para revertir esta situación con un juego activo y entusiasta. Como hizo contra el Melilla. En aquella ocasión, el partido iba río abajo (0-4 a favor en la ida), pero el balear no salió a cubrir el expediente y pidió ‘el indulto’ con un buenísimo partido. Después de no estar bien ante el Huesca (salió desde el banquillo en el 76’), como el resto del equipo, hoy volverá al once en una competición en la que siempre va de menos a más y ya ha maravillado a toda Europa.
'Feeling' con la Champions
En la 2016-17, en su primera temporada en el Real Madrid, derribó la puerta de Zidane a puntapiés con una actuación de campanillas contra el Bayern (en la ida de cuartos, en el Allianz, asistió a Cristiano; en la vuelta cerró la eliminatoria con un golazo), brilló en la ida de semifinales ante el Atlético y metió la Duodécima en la maleta con el último gol de la final contra la Juventus. La temporada pasada, Europa volvió a frotarse los ojos con el balear. ‘Mató’ al PSG en la ida de octavos con dos escapadas que acabaron en goles de Cristiano y Marcelo (3-1) y se puso otra medalla en el pecho en la vuelta (1-2) tras desplegar todas sus virtudes. Las mismas con las que fulminó al Bayern en la ida de semifinales con el 1-2 que allanó el camino hacia la final. Este año aún no ha dado el golpe en la mesa. Hoy tiene una nueva oportunidad. Europa le espera.