El Bayern vuelve a mirar hacia arriba en la Bundesliga
El equipo de Kovac ha dejado atrás la crisis y pasará el resto de temporada pisándole los talones a un Dortmund que tendrá muy poco margen de error.
José Carlos Menzel
As
El Bayern de Múnich hizo sus deberes en la Bundesliga y se impuso con facilidad a un gris Hannover a domicilio por 4-0. Fue la tercera victoria consecutiva del campeón en la competición doméstica, donde sigue tercero, pero igualado a puntos con el Gladbach tras el empate del segundo clasificado en su visita a Hoffenheim. El triunfo también le sirvió al equipo del Allianz Arena para recortar a seis puntos la diferencia con respecto al Dortmund, eso sí, a la espera de lo que haga el líder esta tarde frente al Bremen.
El encuentro en el HDI-Arena fue un monólogo muniqués desde el primer minuto. Llevaba tiempo Niko Kovac quejándose de la falta de puntería de los suyos, pero esta vez sus pupilos se mostraron más eficaces que nunca de cara a portería. A los dos minutos de juego, Kimmich abrió la lata de volea y comenzó la fiesta. Mientras el Hannover apenas lograba cruzar la línea divisoria, el Bayern embotelló a los de André Breitenreiter, dispuso de numerosas ocasiones para ampliar el marcador y finalmente lo logró a través de un latigazo de Alaba.
Con Thiago ya plenamente recuperado de su lesión de tobillo y de vuelta en el once, el conjunto visitante también salió mordiendo en la segunda mitad y en tan solo nueve minutos sentenció el encuentro. Un zurdazo de Gnabry y un cabezazo de Lewandowski, ambos tras asistencias del imperial Kimmich, firmaron la goleada en una tarde que volvió a poner a prueba que el Bayern, de una vez por todas, ha dejado atrás la crisis y pasará el resto de temporada pisándole los talones a un Dortmund que tendrá muy poco margen de error.
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El Bayern de Múnich hizo sus deberes en la Bundesliga y se impuso con facilidad a un gris Hannover a domicilio por 4-0. Fue la tercera victoria consecutiva del campeón en la competición doméstica, donde sigue tercero, pero igualado a puntos con el Gladbach tras el empate del segundo clasificado en su visita a Hoffenheim. El triunfo también le sirvió al equipo del Allianz Arena para recortar a seis puntos la diferencia con respecto al Dortmund, eso sí, a la espera de lo que haga el líder esta tarde frente al Bremen.
El encuentro en el HDI-Arena fue un monólogo muniqués desde el primer minuto. Llevaba tiempo Niko Kovac quejándose de la falta de puntería de los suyos, pero esta vez sus pupilos se mostraron más eficaces que nunca de cara a portería. A los dos minutos de juego, Kimmich abrió la lata de volea y comenzó la fiesta. Mientras el Hannover apenas lograba cruzar la línea divisoria, el Bayern embotelló a los de André Breitenreiter, dispuso de numerosas ocasiones para ampliar el marcador y finalmente lo logró a través de un latigazo de Alaba.
Con Thiago ya plenamente recuperado de su lesión de tobillo y de vuelta en el once, el conjunto visitante también salió mordiendo en la segunda mitad y en tan solo nueve minutos sentenció el encuentro. Un zurdazo de Gnabry y un cabezazo de Lewandowski, ambos tras asistencias del imperial Kimmich, firmaron la goleada en una tarde que volvió a poner a prueba que el Bayern, de una vez por todas, ha dejado atrás la crisis y pasará el resto de temporada pisándole los talones a un Dortmund que tendrá muy poco margen de error.
